Durante su gira por Medio Oriente, que este domingo (03.11.2013) lo llevó hasta El Cairo para reunirse con las autoridades locales, el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, realizó unas declaraciones que no cayeron nada de bien en Damasco, donde consideraron sus palabras poco adecuadas justo cuando se debate sobre la viabilidad del encuentro Ginebra 2, que buscaría alcanzar la paz en Siria.

Kerry, que estará once días en la zona para visitar a diversas autoridades, dijo que “hay algunos países a los que les gustaría que EE.UU. hiciera algo en particular con respecto a Siria, pero nosotros hemos hecho otra cosa. Compatimos el mismo objetivo, es decir salvar al Estado sirio e instalar un gobierno de transición que pueda darle al pueblo una oportunidad de escoger su futuro”.

Con esa declaraciones, se refería a las diferencias que ha tenido Washington con Arabia Saudita, un país que apoya a la oposición a Al Assad y que esperaría que la potencia mundial actuara de forma más decidida en el conflicto. “Pensamos también que Assad, por haber perdido toda autoridad moral, no puede formar parte” de ese gobierno y que “nadie puede en realidad responder a la pregunta sobre cómo poner fina la guerra mientras Assad esté allí”.

Declaraciones mal recibidas

Las palabras de Kerry no cayeron bien en Siria, donde el Ministerio de Asuntos Exteriores reaccionó mediante una fuente citada por la agencia de noticias Sana, que reproduce que la intervención del secretario estadounidense “supone una injerencia flagrante en los asuntos sirios y una agresión al derecho del pueblo de determinar su propio futuro”.

Asimismo, el régimen sostuvo que estas declaraciones “conducen al fracaso de la conferencia de Ginebra 2”, donde Rusia y Estados Unidos, además de otros Estados, buscan consensuar una salida pacífica a la guerra civil que azota al país asiático desde marzo de 2011. El comunicado sirio recuerda que el éxito de esa conferencia “depende solo de la voluntad de los sirios y del consenso para poner fin a la violencia”.

Mientras, la oposición aglutinada en la Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición sostuvo, por medio de su líder, Ahmad Jarba, que no acudirán a las negociaciones de paz a no ser que exista un calendario claro para la salida de Bashar al Assad del poder. “Hemos decidido no participar en las conversaciones de Ginebra a menos que sea con dignidad y que haya una transición con un calendario específico”, dijo Jarba.

DZC (EFE, Europa Press, Reuters, AFP)