España está jugando el fútbol más atractivo de la Eurocopa, es el equipo que más goles ha marcado, derrotó a la anfitriona Alemania en cuartos de final, a la vigente campeona de Europa, Italia, y ahora a la máxima favorita, Francia, por 2-1 en la primera semifinal.

El "niño prodigio" español Lamine Yamal volvió a desempeñar un gran papel. Con 16 años, no solo es el jugador más joven, sino también el goleador de menor edad de la historia de la Eurocopa, tras su gol de ensueño contra Francia.

Pero con tanto revuelo en las redes sociales en torno a Yamal, ha pasado casi desapercibido un artista español subestimado, que pocos tenían en su radar. Dani Olmo, profesional de la Bundesliga, del RB Leipzig, ha saltado a primer plano en esta Eurocopa.

En el duelo de cuartos de final contra Alemania (2-1 tras la prórroga), marcó el primer gol y asistió el segundo. Con un brillante derechazo, fue el autor del victorioso 2-1 contra Francia, en semifinales.

Del Barcelona al Dinamo Zagreb

"Para nosotros, da igual quién marque los goles", declaró modestamente Olmo tras el partido. Ahora sueña con conquistar el título de campeón de Europa: "Estamos a un paso. Es increíble. Nos merecemos estar en la final".

La carrera de Olmo ha sido bastante inusual para un futbolista de la famosa cantera del FC Barcelona, "La Masía". A sus 16 años, Olmo fichó de forma inesperada por el Dinamo Zagreb.

Puede que el tradicional club croata no figure entre la élite europea, pero es conocido como una fábrica de talentos que ha ayudado a llegar al fútbol profesional a leyendas como Luka Modric.

Olmo debutó con el Dinamo en la primera división croata a los 17 años. Allí conoció la dureza competitiva, sufrió lesiones tempranas y contratiempos. Pero no tardó en impresionar a los aficionados croatas, que incluso llegaron a bautizarlo como "Olmic", en referencia a los populares apellidos croatas de grandes estrellas como Ivan Rakitic y Modric. Según Olmo, la asociación croata incluso quiso nacionalizarlo.

Al Leipzig gracias a Julian Nagelsmann

Sin embargo, lo descartó pronto y siguió jugando con las selecciones inferiores de España. "Mi sueño siempre fue jugar con España", dijo a DW en una entrevista.

En 2020, el entrenador y actual seleccionador alemán, Julian Nagelsmann, lo trajo a la Bundesliga. Desde entonces, Olmo ha disputado 107 partidos con el RB Leipzig, en los que ha marcado 17 goles y ha dado 24 asistencias.

Pero en la selección española, Olmo fue sobre todo un jugador complementario, en lugar de una figura clave. Había demasiada competencia en el centro del campo español, repleto de jugadores procedentes de los mejores clubes de Europa: Rodri, del Manchester City; Fabián, del París Saint-Germain; y Pedri, del FC Barcelona.

De suplente a jugador clave

"Lo que sí es cierto es que la Bundesliga tiene menos protagonismo en España. De ahí que pueda ser que la gente me conozca un poco mejor aquí en Alemania que en España", declaró Olmo recientemente al diario Süddeutsche Zeitung.

Incluso al comienzo de la Eurocopa, Olmo solo entró al partido desde el banquillo de suplentes y estuvo completamente ausente en la ronda preliminar contra Italia. Pero, tras la temprana lesión de Pedri, en el choque de cuartos de final contra Alemania, tuvo una presentación explosiva. 

"No me sorprende en absoluto", declaró el seleccionador español, Luis de la Fuente. "Lo conozco muy bien, siempre supe de su potencial. Le estoy muy agradecido", agregó.

Dani Olmo ha logrado darle un sabor diferente al juego español: en el Leipzig está acostumbrado a presionar alto, recuperar el balón y dar muchos más pases verticales.

¿Próximo paso a Manchester o Múnich?

Sin embargo, persisten los rumores de que Olmo podría abandonar pronto el Leipzig. Según la prensa, su contrato tiene una cláusula que le permite abandonar el club si otro club está dispuesto a pagar 60 millones de euros por su traspaso antes del 20 de julio.

Los grandes clubes europeos lo tienen en la mira. Se especula con un regreso al Barcelona, pero también se rumorea que Manchester City y Bayern Múnich están interesados en él. Ahora, no solo los aficionados de Croacia, sino de toda Europa saben por qué.

(vt/cp)