Hasta la noche del domingo (17.11.2013), el servicio meteorológico nacional reportó casi 80 posibles tornados. Además, se registraron fuertes tormentas, lluvias y granizo. En muchos aeropuertos, como el de Chicago, se cancelaron o fueron retrasados numerosos vuelos.

El fuerte frente de tormentas, poco común para la época, se movió el domingo hacia el noreste. Se emitieron alertas de tornados en Illinois, Iowa, Ohio, Indiana, Missouri, Wisconsin y Michigan, entre otros.

La Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA) envió un equipo de manejo de incidentes para apoyar a las autoridades del estado de Illinois, el más afectado por las tormentas, además de desplegar coordinadores en centros de operaciones de emergencias en Indiana y Ohio.

"La devastación es simplemente increíble"

El presidente Barack Obama fue informado sobre las fuertes tormentas por Lisa Monaco, asistente de seguridad interior y lucha contra el terrorismo del mandatario, indicó la Casa Blanca, que aseguró que el jefe de Estado seguirá recibiendo informes regulares de la situación.

En el condado de Washington, en el sur de Illinois, se registraron tres muertes, dijo el director de emergencias del estado, Jonathon Monken, a CNN, quien indicó que un hospital en Peori atendió a 37 heridos.

"Es un día triste en Washington. La devastación es simplemente increíble. No se lo pueden imaginar. Nuestra comunidad parece una zona de guerra", dijo el alcalde de Washington, Gary Manier, según informaciones de la agencia Reuters.

La tormenta destruyó al menos 70 viviendas en dos comunidades. Los rescatistas intentaban llegar a las personas atrapadas en sus sótanos. "Veo calles que tenían 20 ó 30 casas y ya no hay ninguna", aseguró un testigo a Fox News.

VC (dpa, Reuters)