Delator que acusa a Rousseff cooperará con la Corte Suprema
15 de marzo de 2016
Un juez de la Corte Suprema de Brasil aceptó hoy un acuerdo de cooperación propuesto por el exjefe del oficialismo en el Senado Delcidio Amaral, que implicó a Rousseff y a Lula en caso de corrupción de Petrobras.
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Un juez de la Corte Suprema de Brasil aceptó este martes (15.3.2016) un acuerdo de cooperación propuesto por el exjefe del oficialismo en el Senado Delcidio Amaral, quien ha implicado en la corrupción en la petrolera estatal Petrobras a la presidenta Dilma Rousseff y a su antecesor Luiz Inácio Lula da Silva.
La información fue confirmada por la propia corte y ello supone que las declaraciones que el senador Amaral, detenido por el asunto, ya ha dado a la Justicia pueden ser utilizadas por la Policía en la investigación sobre la red de corrupción que operó en Petrobras.
Hoy podrían hacerse públicas las declaraciones de Amaral
Parte de las declaraciones de Amaral han sido adelantadas por la revista Istoé, que obtuvo algunos documentos según los cuales el senador afirmó que Rousseff y Lula "sabían" de la corrupción petrolera e intentaron "manipular" a la Justicia para obstruir la investigación y liberar a algunos acusados.
Fuentes del Tribunal Supremo confirmaron que el magistrado también decidió que, como sucede en todos los casos en que se acepta un acuerdo de cooperación, las declaraciones que ha prestado Amaral serán hechas públicas, lo cual podrá ocurrir hoy mismo.
Amaral fue encarcelado en noviembre pasado, cuando ejercía como jefe del grupo oficialista en el Senado, acusado de "obstaculizar a la Justicia" y de intentar sobornar a algunos implicados en la red de corrupción petrolera a cambio de su silencio.
Las multitudinarias protestas que se tomaron Brasil
Imagen: Agência Brasil/R. Rosa
Sao Paulo: la marcha más numerosa
Un millón 400 mil manifestantes fueron los que llegaron a la avenida Paulista, según informó la policía militar de la ciudad de Sao Paulo, aunque quienes congregaron a las marchas hablan de dos millones y medio de personas. A pesar de la multitud, la marcha se desarrolló en completa calma.
Imagen: Reuters/P. Whitaker
Río de Janeiro se tiñó de verde y amarillo
La marea humana que inundó la costanera que recorre Copacabana llegó a congregar cerca de un millón de personas, cifra entregada por los organizadores de las protestas. Las autoridades prefirieron no revelar el número real de participantes.
Imagen: Agência Brasil/T. Rêgo
Lula compartió protagonismo con Rousseff en todas las ciudades
Las máscaras y los muñecos inflables de la presidenta y del exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva se vieron en todas las ciudades. Los manifestantes exhibieron en diversos tamaños la figura de Lula vestido como presidiario, producto de la acusación que enfrenta por lavado de dinero.
Imagen: picture-alliance/dpa/S. Moreira
100 mil manifestantes llegaron al Congreso Nacional de Brasilia
Unas 100 mil personas llegaron ante el Congreso Nacional en Brasilia, manifestando su respaldo al juicio político que la oposición promueve contra la presidenta Dilma Rousseff. El número de participantes fue calculado por la Policía Militar, que además aseguró que fue una de las manifestaciones más multitudinarias que se han visto en las últimas décadas en la capital brasileña.
Imagen: Getty Images/AFP/E. Sa
El héroe de la jornada fue el juez Sergio Moro
Además de los cánticos contra la presidenta, las protestas también expresaron un claro respaldo a la lucha contra la corrupción. Muchos de los participantes llevaron sus pancartas y máscaras para destacar la figura del juez Sergio Moro, quien es el encargado de la investigación por las graves irregularidades detectadas en la estatal Petrobras.
Imagen: Agência Brasil/R. Rosa
El objetivo final: juicio político a la presidenta
La jornada nacional de protestas fue un éxito para los grupos sociales ligados a la oposición, los que convocaron a las multitudinarias marchas en todo Brasil. También fue una contundente muestra del malestar que existe en el país. Con las manifestaciones se espera presionar al Congreso para que apoye el juicio político iniciado contra la mandataria.