Deutsche Welle: Hillary Clinton ganará, se comentaba una y otra vez en los últimos días y semanas. Ahora todo ha resultado ser de otra manera, ¿por qué es necesaria la demoscopia?

Thorsten Faas: La demoscopia nos mostró cambios en los últimos años. El apoyo a Donald Trump se infravaloró claramente. Hay diversos motivos. Uno que siempre se escucha es que los votantes, que al final decidieron votar a Trump, no quisieron dar previamente ninguna opinión en las encuestas. También aparece con frecuencia el término "deseabilidad social”. No lo creo del todo, porque hemos comprobado que más del 40% apoya a Trump.

¿Por qué es tabú reconocer el apoyo a Trump? Creo que la demoscopia tiene otro problema. No llega a ciertas esferas del electorado, que se muestran desconfiadas hacia la política, quizá también hacia los medios de comunicación y los sondeos de opinión. Quizá por eso no participen en las encuestas. Definitivamente, la consecuencia es que se ha infravalorado el apoyo a Trump. La demoscopia tiene un grave problema, sin ninguna duda. Nos ha aportado ideas falsas antes de las elecciones, pero creo que en el futuro se podrá identificar el problema más claramente y esperemos que se consiga solucionar.

Aparentemente, los votantes no dicen su opinión en las encuestas. ¿Por qué?

Con seguridad hay votantes que mienten. A algunos les parecerá vergonzoso reconocer que votarán a Trump ante sus conocidos e institutos de demoscopia. La predisposición a tomar parte en estos tipos de encuestas es recesiva. Lo que observamos en Estados Unidos con Trump, el brexit y en el contexto del partido AfD es que, los votantes de Trump y el AfD, no suelen participar en las encuestas. Por eso se infravalora su parte correspondiente. Después nos asombra que los resultados sean tan diferentes de los pronosticados. No logramos que esa gente participe en las encuestas.

Muchos consideran a Trump una provocación. ¿Se podría decir que muchos que lo votaron querían provocarlo?

Eso es lo que Trump logró definitivamente. Consiguió encauzar a su favor el descontento extendido. En muchos estados, como Míchigan o Wisconsin, la preocupación es enorme de caer en la ruina. És se ganó a esta gente. No es de ninguna manera obvio, es realmente el reto de una campaña electoral responder a estos sentimientos y estados de ánimo. Y esto lo logró Trump.

¿Se podría decir que es un golpe de estado en las urnas?

Golpe de estado es una palabra grave. Es en cualquier caso un sorpresa, una nueva combinación de votantes. Trump ganó en esferas sociales que creíamos tradicionalmente demócratas. Él consiguió ganar terreno en una nueva clase de votantes.

Francia votará pronto a un nuevo presidente. Las elecciones generales en Alemania tendrán lugar el año próximo. ¿Qué significa para usted y sus colegas estas elecciones tan importantes en Europa?

Deberíamos comunicar, con antelación a las encuestas y de manera más ofensiva, que estas pueden acarrear inseguridades y no son garantía de lo que suceda en el día de las elecciones. En Alemania también hemos visto de forma parecida que se infravaloró también al partido AfD. Los institutos de demoscopia y nosotros, en las academias de investigación electoral, tenemos mucho trabajo por delante. Pero estoy seguro de que asumiremos este reto con mucho gusto.

 

Thorsten Faas es catedrático de Ciencias Políticas en la Universidad de Maguncia.

Autor de la entrevista: Volker Wagener