Descubren una fosa común con 500 cadáveres cerca de Mosul
11 de marzo de 2017
Estado Islámico tomó la cárcel de Badoush en junio de 2014 y ejecutó a cientos de presos chiíes. La milicia que ha encontrado la fosa, afirma haber detenido a los 87 yihadistas responsables de la masacre.
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Una de las milicias chiitas aliada del Gobierno de Irak aseguró este sábado (11.03.2017) haber descubierto una fosa común con los restos de alrededor de medio millar de cuerpos cerca de Mosul. Los restos fueron hallados en las inmediaciones de la prisión de Badusch, que unidades paramilitares iraquíes consiguieron arrebatar a la milicia terrorista Estado Islámico hace pocos días y en la que no quedaba ningún preso vivo.
El EI se apoderó de la ciudad de Badusch y del centro penitenciario en junio de 2014. La organización pro derechos humanos Human Rights Watch dijo entonces que el grupo yihadista supuestamente ejecutó a 600 presos el 10 de junio de 2014. También liberó a miles de presos, incluyendo a líderes y combatientes del propio grupo terrorista que cumplían condena en esas instalaciones.
Multitud Popular, la milicia que ha encontrado la fosa, afirma que la mayoría de los ejecutados eran también chiíes. Y explica que ha detenido a 87 combatientes de Estado Islámico a los que considera responsables de la masacre.
Durante la ofensiva contra el EI, las autoridades iraquíes han encontrado varias fosas comunes, la última de ellas, con cerca de 100 cadáveres, fue hallada el pasado 26 de febrero. En noviembre fue encontrada otra fosa común al sur de Mosul con los cuerpos de 300 personas, en su mayoría policías ejecutados por los yihadistas, y en junio pasado se descubrió otra con cerca de 400 víctimas en la ciudad de Faluya.
LGC (dpa/EFE)
La batalla por recuperar Mosul
Tras meses de preparación, el Ejército de Irak y sus numerosos aliados lanzaron la ofensiva para arrebatar Mosul a Estado Islámico. Los kurdos anunciaron ahora una operación similar para liberar Al Raqa.
Imagen: REUTERS/T. Al-Sudaini
Conquista fácil para los yihadistas
La forma en que los combatientes de Estado Islámico tomaron la principal ciudad del norte de Irak, Mosul, en junio de 2014 es llamativa por lo sencilla que resultó la operación para los yihadistas. Un par de miles de milicianos arriba de camionetas bastaron para que el Ejército de Irak huyera en desbandada, dejando atrás sus equipos, precioso botín para los terroristas.
Imagen: Reuters
Obligados a huir
Desprotegidos ante el abandono de la ciudad por parte de los soldados -lo que en la práctica significó la desaparición del Estado-, miles de vecinos de Mosul debieron escapar de la ciudad con lo puesto. Otros no tuvieron la misma suerte y se vieron forzados a vivir sometidos al régimen de terror impuesto por los radicales.
Imagen: Romina Peñate
Un sermón del "califa"
El líder de Estado Islámico y autoproclamado califa, Abu Bakr al Bagdadi, en una de sus raras apariciones. En esta imagen aparece en Mosul, en julio de 2014, dando un sermón a sus seguidores en la mezquita de la ciudad. En la actualidad se sospecha que sigue en Mosul, aunque su paradero específico es desconocido. Recientemente, llamó a sus combatientes a la "guerra total" contra la coalición.
Imagen: picture alliance/dpa
Salvajismo anticultural
En febrero de 2015, Estado Islámico difundió imágenes de sus seguidores destruyendo valiosas esculturas y estatuas asirias pertenecientes a la colección del Museo de Mosul. También arrasaron con la biblioteca central de la urbe. Los radicales sunitas querían demostrar que lo suyo era una lucha contra los "falsos ídolos".
Imagen: Quelle: Islamischer Staat/Internet
Primeras señales de unidad
Combatientes peshmerga, pertenecientes al Kurdistán iraquí, montan guardia en un puesto de control en el norte del país. Los kurdos fueron los primeros en reaccionar ante Estado Islámico y se convirtieron en los enemigos más fieros de los yihadistas. En abril de 2015 anunciaron alianzas con otros grupos para plantar cara a las tropas radicales.
Imagen: picture-alliance/dpa/T. Rassloff
Renace la esperanza
En mayo de 2016, el primer ministro de Irak, Haidar al Abadi, anunció que el Ejército estaba preparando una gran ofensiva para recuperar Mosul. Sus tropas, entrenadas por Estados Unidos, contarían con respaldo aéreo de la coalición internacional en esta misión. Antes, las unidades iraquíes recuperaron otras ciudades que habían caído en manos de los yihadistas, como Faluja.
Imagen: Getty Images/AFP/S. Hamed
El Estado Islámico retrocede
El 16 de octubre de 2016 comenzó la anunciada ofensiva, que cuenta también con la participación de las poderosas unidades kurdas peshmerga y milicias locales, tanto sunitas como chiitas. Rápidamente, gracias a la envergadura de la operación, los iraquíes recuperaron parte del terreno perdido en 2014. Estado Islámico se batió en retirada con la ilusión de resistir en la parte oeste de la ciudad.
Imagen: Getty Images/AFP/A. Al-Rubaye
Mujeres peshmerga, en el frente de batalla
Las unidades kurdas atacan por el norte. Las fuerzas iraquíes por el sur y por oriente. Por el oeste se suman milicias chiitas. Estado Islámico está rodeado y Mosul debería caer en las próximas semanas. Los peshmerga, junto a otros grupos, anunciaron este 6 de noviembre que lanzarán una operación para liberar también a Al Raqa, en Siria.