Desplazados aumentaron a 80 millones en 2019, nuevo récord
18 de junio de 2020
Más del 1 por ciento de la población del planeta se encuentra en esa situación. Venezuela es el segundo país con más desplazados, detrás de Siria y por sobre Afganistán.
Publicidad
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) informó este jueves (18.06.2020) que en 2019 se produjo un récord en el número de personas que debieron huir de sus hogares a causa de la violencia y la persecución. Casi 80 millones de personas cumplían con las condiciones para ser consideradas "desplazados”, lo que quiere decir que más del 1 por ciento de la humanidad se encontraba en esa situación en 2019.
Comparada la cifra con la de 2018, supone un aumento de casi nueve millones de personas. Se trata del número más alto recogido por el organismo desde que recopila estas estadísticas. "El 1 por ciento de la población mundial no puede volver a sus hogares porque hay guerras, persecución, violación de derechos humanos y otras formas de violencia", explicó el jefe de la ACNUR, Filippo Grandi, a la AFP.
El incremento se explica en parte por el mayor flujo de desplazados en zonas como la región del Sahel (Mali, Níger), desde la República Democrática del Congo hacia Uganda o en el noroeste de Siria, explicó Grandi al presentar el informe. En apenas una década, la cantidad de personas que tuvieron que huir dejando atrás sus hogares prácticamente se ha duplicado.
La pandemia no frena las guerras
De esta población en movimiento, 45,7 millones son desplazados internos, es decir que se han movido dentro de su país de origen; 26 millones son refugiados en territorios distintos al suyo (generalmente países de ingresos bajos o medios), 4,2 millones son solicitantes de asilo y 3,6 millones son venezolanos considerados en una categoría distinta por la doble vertiente económica y política de su éxodo. Venezuela, cuyo éxodo en realidad supera los 5 millones de personas, es el segundo país en número de refugiados contabilizados por ACNUR, solo por debajo de los 6,6 millones de sirios.
En cuanto a los destinos, Turquía es el país que acoge un mayor número de refugiados (3,6 millones) seguido de Colombia (1,8 millones), Pakistán (1,4 millones), Uganda (1,4 millones) y Alemania (1,1 millones).
"Ha habido más conflicto, más violencia", advirtió Grandi. "Y eso significa que las soluciones políticas han sido insuficientes. Con una comunidad internacional muy dividida, incapaz de lograr la paz, desafortunadamente la situación no dejará de crecer, y me temo mucho que el año que viene será peor que este año", indicó. "Una actividad que no se ha visto frenada por la pandemia (del coronavirus) es la guerra, el conflicto o la violencia", resumió.
DZC (EFE, AFP)
Idlib, Siria: un desastre humanitario
El ejército sirio, apoyado por Rusia, está bombardeando la región de Idlib, en el norte del país. Los refugiados huyen hacia la frontera turca. La ONU advirtió sobre un inminente "baño de sangre".
Imagen: picture-alliance/AA/E. Hacioglu
En pleno escape
El tráfico es fuerte en las carreteras que se dirigen al norte a través de la región de Idlib, hacia la frontera turca. Los soldados del régimen de Al Assad avanzan desde el sur y el este, asistidos por sus aliados rusos e iraníes. Algunos grupos rebeldes sirios son apoyados por Turquía, que también tiene sus propios soldados en la región. Pero la gente común solo quiere llegar a un lugar seguro.
Imagen: Reuters7K. Ashawi
"El horror se ha multiplicado"
Casi 1 millón de personas han sido desplazadas desde diciembre. Según el jefe humanitario de la ONU, Mark Lowcock, "el horror se ha multiplicado" en las últimas semanas. Las líneas del frente se están cerrando y están provocando grandes movimientos de personas en solo unos pocos días. Al Assad quiere expulsar a la población civil de Idlib y se moviliza para capturar este último bastión rebelde.
Imagen: Reuters/K. Ashawi
Bombardeada a pedazos
Maaret Al Numan y sus alrededores han sido en particular gravemente afectados por los ataques. La ciudad ha sido bombardeada a pedazos y está prácticamente desierta. La importante carretera M5 pasa por aquí, desde Damasco, a través de Alepo, y hasta la frontera turca. La mayoría de los que huyen intentan llegar a Turquía, pero la frontera está cerrada.
Imagen: picture-alliance/AA/M. Said
Esperando en la frontera
Alrededor de 100 personas, incluidos 35 niños, murieron en los bombardeos solo en las primeras dos semanas de febrero, según la ONU, que ha denunciado el "desprecio flagrante por la vida y la seguridad de los civiles". La familia de la foto huyó a la frontera turca hace meses. Están viviendo en el campo de refugiados de Kafr Lusin y se aferran a la esperanza de que Turquía los deje entrar.
Imagen: Getty Images/AFP/A. Watad
Medio millón de niños en emergencia
Se estima que alrededor de la mitad de las casi 1 millón de personas que han huido son niños. Del resto, la mayoría son mujeres. No hay suficientes albergues en la frontera turca para todos y muchos refugiados viven en tiendas de campaña. Los campos a menudo se levantan a toda prisa y están muy hacinados. La gente duerme en las puertas y en pedazos de cartón, a veces a temperaturas bajo cero.
Imagen: Getty Images/AFP/A. Watad
Alimento y medicinas escasas
Los que han podido encontrar una tienda de campaña la comparten con hasta una docena de familiares. La medicina se está acabando en muchos de los campamentos, y los alimentos básicos y la ropa también están escaseando. Los médicos informan que muchos niños sufren de malnutrición, algunos incluso mueren de hambre. El frío también está pasando factura: algunas personas se han congelado hasta morir.
Imagen: Getty Images/AFP/A. Watad
Refugio en una escuela
Muchos niños en la región ya no pueden ir a la escuela, por lo que algunos edificios escolares han sido reutilizados. La escuela de la foto fue convertida en un refugio. Incluso los campos de refugiados son a veces blanco de los bombardeos.
Imagen: Getty Images/B. Kara
Tratando de alcanzar la seguridad
La ruta ilegal a través de la frontera con Turquía es costosa y casi nadie puede pagarla. Los contrabandistas están cobrando a las personas hasta 1.800 euros. Los que se atreven a intentarlo arriesgan sus vidas: los guardias fronterizos turcos tienen cámaras térmicas para ayudarlos a detectar las personas que intentan cruzar. Y a veces disparan a los refugiados que intentan escalar el muro.
Imagen: Getty Images/AFP/A. Watad
Buscando dignidad
La ONU ha dicho que la situación en Idlib podría ser el mayor desastre humanitario del siglo XXI. Nadie sabe si habrá o no un alto el fuego. A los refugiados no les importa quién ponga fin a la guerra, solo quieren una vida con seguridad y dignidad para ellos y sus hijos. Una cumbre entre Turquía, Rusia, Francia y Alemania, prevista para el 5 de marzo, está ahora en peligro.
Imagen: Getty Images/B. Kara
9 imágenes1 | 9
Deutsche Welle es la emisora internacional de Alemania y produce periodismo independiente en 30 idiomas. Síganos enFacebook | Twitter | YouTube |