La que fuera la carpintería de la famosa Escuela Superior de Diseño en Dessau alberga desde hoy una exposición permanente de más de 200 objetos, testigos del revolucionario concepto integral de arte y arquitectura de la Bauhaus.

Con claridad y funcionalidad pretendía atender todas las necesidades de la gente, en un universo de vidrio, cemento y metal en el que la forma se somete a la función. Paradas de buses y edificios diseñaron los maestros de la "arquitectura moderna" y de la "nueva objetividad"; también teteras, esculturas de papel, tapices, muñequitos y ceniceros de tres puntas. La Bauhaus pretendía diseñar para suplir las necesidades del pueblo, no del lujo.

Material didáctico

Esta muestra se concentra en el material generado durante las clases de la Escuela de Diseño, pues se pretende enfocar, sobre todo, el afán interdisciplinario de la institución que Walter Gropius fundara en 1919 en Weimar y que por motivos políticos tuvo que trasladar a Dessau en 1925.

La escuela taller fue dirigida por Gropius hasta 1928, quien por presiones políticas tuvo que entregar la dirección al urbanista suizo Hannes Meyer. Éste, a su vez, dos años más tarde, pasó el testigo a Mies Van der Rohe, quien estuvo a la cabeza de la casi mítica fuente del diseño del siglo XX, "la iglesia del marxismo" como la denominaron los nacionalsocialistas, fue clausurada en 1932.

En el exilio, los artistas de la Bauhaus siguieron desarrollando su genial línea: Lyonel Feininger, Lázlo Moholy Nagy, el mismo Gropius, Marcel Breuer o Mies Van Der Rohe en Estados Unidos.

Vuelta al origen

Mucho de lo que se expone ahora fue creado entre 1925 y 1932, y ha vuelto a su lugar de origen. Dessau -que había sido el centro del clasicismo europeo y que después vivió aislada todo el tiempo de la República Democrática Alemana- lo alberga en el edificio de la escuela-taller. Éste fue declarado en 1996 Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO. Bastante afectado durante la Segunda Guerra Mundial, después de un saneamiento profundo que costó diez años y 17 millones de euros, ahora es la sede de la Fundación Bauhaus Dessau.

La exposición permanente pone ante la vista de sus, aproximadamente, 80.000 visitantes anuales la serie de dibujos, fotografías, bocetos, muebles y utensilios domésticos que ha venido recabando y recobrando desde 1976. Con ello, la Fundación Bauhaus Dessau, creada en 1994, cumple con sus dos objetivos: conservar la herencia material e intelectual de la Bauhaus y difundirla.