Cuatro de los ocho detenidos tienen una "clara pertenencia" a la milicia radical Estado Islámico (EI), explicó el máximo responsable de la Policía de Cataluña (Mossos d'Esquadra), Josep Lluís Trapero, en una entrevista con el canal público de la región TV3.

La investigación, en la que colaboró la Policía de Bélgica, podría ayudar a resolver atentados como los perpetrados el año pasado en Bruselas o en Francia, añadió Trapero sin dar más detalles por el secreto dictado por el juez responsable del caso.

El consejero de Interior del Gobierno catalán, Jordi Jané, confirmó que parte de los detenidos están al parecer vinculados a los autores de los atentados que en marzo del año pasado dejaron más de una treintena de muertos en el metro y el aeropuerto de Bruselas.

Los detenidos tienen entre 31 y 39 años y son de origen marroquí, aunque residían en Cataluña desde hace tiempo. "Han podido moverse por Bélgica y otras ciudades europeas", explicó Trapero, según el cual no hay indicios de que planearan atentar en Cataluña.

Algunos de los arrestados tienen antecedentes por crimen organizado, delincuencia común o tráfico de drogas. Durante la operación, que continúa abierta, se practicaron 12 registros en Barcelona. La investigación comenzó hace ocho meses gracias a la llamada anónima de un ciudadano alertando sobre implicados en tráfico de droga. Desde entonces, la policía catalana compartió información con la belga y con la Policía Nacional y los servicios de inteligencia españoles.

Se trata "claramente de la operación más importante realizada hasta ahora" contra el yihadismo en Cataluña, sostuvo Trapero. Hace un año, en abril de 2015, los Mossos d'Esquadra desarticularon en la región a otra célula yihadista que planeaba en ese momento un atentado en Barcelona. La operación acabó entonces con 14 detenidos.

CP (efe, El Mundo, La Vanguardia)