El volante creativo brasileño del Werder Bremen es sin lugar a dudas la figura más importante del momento en el fútbol alemán. Desde su discreto aterrizaje en la Bundesliga en el verano del 2006 como uno más de los muchos talentos que año tras año llegan a Alemania desde el Brasil, Diego Ribas da Cunha se ha transformado rápidamente en una estrella mundial.

Constantemente se habla y se escribe acerca de su futuro en Alemania, su formidable rendimiento en la Bundesliga y su papel en la selección nacional brasilera. Con DW-WORLD Diego habló sobre todos estos temas.

Contento sí, pero...

El 2008 inició para Diego con noticias tan positivas que él podría sostener que este es el mejor momento de su carrera: la revista alemana de fútbol Kicker lo coronó como el mejor jugador de la primera vuelta del campeonato 07/08 basado en las respuestas a una encuesta realizada entre futbolistas de la Bundesliga; los televidentes eligieron el gol que le marcó al Alemania Aachen desde la mitad de la cancha en abril del 2007 como el más bonito del año; y los aficionados alemanes lo consideran como el cuarto mejor jugador del mundo, sólo superado por Kaká, Lionel Messi y Christiano Ronaldo.

"Yo estoy muy contento con esos reconocimientos pero aún quedas cosas por hacer, yo quiero y debo ganar algo, un título sería muy importante para mí. Claro que me alegro de lo que ha pasado conmigo hasta ahora aquí en Alemania, pero un club como el Werder debe lograr títulos" dijo a DW-WORLD.

Desde que él juega para el equipo de Bremen los trofeos se han mantenido alejados de la ciudad. ¿Es esta una razón para estar frustrado? "Nosotros estamos en condiciones de tener éxitos pero se necesita paciencia. Con el tiempo vendrán los títulos, yo los quiero lograr, me hacen falta".

Rumores que no acaban

Con apenas 22 años Diego es hoy por hoy uno de los mejores futbolistas del mundo; demasiado bueno para Alemania en la opinión de aquellos grandes clubes europeos que lo pretenden: Real Madrid, Barcelona, Juventus, etc.

Cada semana se pueden leer noticias en las que se informa sobre una presunta transferencia a otra liga en Europa y su salida del Werder Bremen. Apenas unos minutos más tarde los cables noticiosos citan a Diego desmintiendo los rumores.

"Para mí no es verdaderamente desagradable, ni tampoco me incomoda, que constantemente me pregunten sobre mi futuro en la Bundesliga, aunque creo que en algún momento se debe acabar con el tema" le respondió el brasileño a DW-WORLD cuando se le preguntó si quería decir algo al respecto.

"Yo tengo todavía tres años más de contrato con el Werder Bremen, yo creo que me quedo aquí en la Bundesliga todo ese tiempo" recalcó Diego con la esperanza de dar por terminada la discusión sobre su futuro.

Diego y Kaká

Para Diego, como para todos los futbolistas brasileños, el mayor reconocimiento a su rendimiento es tener la oportunidad de jugar para la selección nacional. Él viste la camiseta de Brasil con regularidad, desde el 2003 pertenece al primer equipo y ya en dos ocasiones ha ganado la

Copa América, ahora sus objetivos son los Juegos Olímpicos y el Mundial 2010.

"Yo creo que con el tiempo las cosas van a acontecer, en la selección la competencia siempre es muy grande, allí hay mucha calidad, pero mi momento va a llegar, yo voy a trabajar duro para ello".

¿Y cuándo verá el mundo ese dúo de ensueño Kaká - Diego jugando juntos? "Esa es una pregunta para Dunga, él es el que toma las decisiones; yo me voy a esforzar para que suceda lo más rápido posible".

El próximo peldaño en esa dirección es Pekín 2008: "quiero participar en los Juegos Olímpicos, sobre el tema aún no he hablado con el Werder Bremen".