Diez años de la muerte de Pina Bausch: vida y obra
Petra Lambeck
30 de junio de 2019
El fallecimiento repentino de la famosa bailarina y coreógrafa alemana fue un shock para el mundo de la danza. Bausch dejó un riquísimo legado artístico, manejado por su hijo.
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"Pina invita". Este es el nombre del proyecto de documentación que la Fundación Pina Bausch desarrolla en Wuppertal, Alemania, donde la artista trabajó desde 1973 hasta su repentina muerte, el 30 de junio de 2009. La tarea abarca una enorme cantidad de material: miles de fotos, videos, cartas y libretos de las 46 funciones que creó la famosa coreógrafa son preservadas en altos archivos de varios pisos en un patio de Wuppertal. La digitalización se inició en 2010 y se espera que el archivo esté disponible en línea para junio del año que viene.
Inicialmente se subirán los materiales disponibles de cinco de las piezas, anunció Salomon Bausch, hijo de la artista y fundador y responsable de la fundación. El objetivo es poder "compartir el archivo" con la gente. Por lo tanto, no debe ser un "aburrido almacén documental", sino un "lugar de intercambio animado, artístico y científico, para cualquiera que tenga curiosidad por el arte de Pina Bausch" y que pueda leerlo en el sitio web de la fundación.
Sede en Wuppertal
Pina Bausch siempre profesó debilidad hacia Wuppertal. Durante 36 años estuvo a cargo de su teatro de danza, que lleva diez años bailando sin ella. El año pasado, hubo cierta polémica por los desacuerdos en torno a la dirección de la famosa compañía. Tras la muerte de Bausch, los bailarines experimentados tomaron la dirección. En mayo de 2017, el dramaturgo Adolphe Binder fue nombrado director, pero fue despedido solo un año después. En el verano de 2018, el teatro de danza se mantuvo sin orientación hasta que, en noviembre, Bettina Wagner-Bergelt fue nombrada directora artística.
Y hay grandes planes en Wuppertal. En el antiguo teatro de la ciudad, que actualmente no está funcionando por motivos económicos, se construirá para 2026 el gran Centro Pina Bausch, que albergará tanto el teatro de danza como la Fundación Pina Bausch, incluido su archivo. Para ello, el edificio debe ser ampliado. El costo estimado es de 58 millones de euros, 30 de los cuales los aportará el Gobierno federal. También el estado de Renania del Norte-Westfalia, donde está ubicada Wuppertal, quiere participar.
Homenaje en octubre
La compañía de danza en sí no estuvo en Wuppertal en el décimo aniversario de la muerte de su fundadora y coreógrafa durante más de tres décadas, sino en París. Durante muchos años, la compañía ha sido invitada a ofrecer actuaciones por todo el mundo. Estos viajes e invitaciones a otros países, algunos lejanos y con culturas muy diversas, siempre la han enriquecido, dijo Bausch en un emocionado discurso durante la ceremonia de entrega del Premio Kioto 2007, considerado el más importante del mundo en las áreas de filosofía y cultura. "Conocer usos, costumbres y músicas completamente extranjeras me ha llevado a traducir a la danza lo que desconocemos, pero que debería pertenecer a todos". Esto también es un reflejo de su compañía, con integrantes internacionales.
El 3 de octubre se llevará a cabo en Wuppertal un homenaje con motivo del décimo aniversario de la muerte de Pina Bausch. Se llevará a escena la última producción realizada por la artista. Después de la actuación habrá un debate con los bailarines, todo bajo el título "Una noche con Pina".
(lgc/rrr)
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Compañía de danza de Pina Bausch
La compañía de danza-teatro de la legendaria coreógrafa alemana Pina Bausch revolucionó la escena, fue inspiración de bailarines y coreógrafos de todo el mundo, y hasta hoy sigue entusiasmando al público.
Imagen: privat
Danza sin concesiones
La legendaria coréografa Pina Bausch, ícono y pionera de la danza contemporánea, trabajaba solo con bailarines que, según ella, reunían características excepcionales. Fundó la Compañía de Danza de Wuppertal, famosa por sus obras innovadoras, que abrieron las puertas a la danza-teatro. Las coreografías de Pina Bausch parecen estar hechas a la medida de los bailarines.
Imagen: picture-alliance/dpa
A contracorriente
Las obras de Pina Bausch en los años 70 fueron provocadoras para el público de esa época. A la coreógrafa le gustaba experimentar y transgredir las convenciones sociales. Durante la primera presentación, en la Ópera de Wuppertal, hubo espectadores que abandonaron indignados la sala.
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Danza-teatro: una revolución
En sus comienzos, nadie hubiera pensado que la compañía Tanztheater Wuppertal iba a cosechar tantos éxitos. Pina Bausch desarrolló con sus coreografías algo totalmente nuevo, obras polémicas y celebradas en todo el mundo que cambiaron para siempre los cánones de la danza.
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Reinventando el movimiento
Los bailarines de la compañía de Wuppertal no bailan: corren, hablan, cantan, lloran, ríen, es decir, se expresan, actúan interpretando la danza de una manera totalmente diferente. Crean mundos en los que los temas de las obras, abordados desde una perspectiva cotidiana, se traducen en movimientos inusuales, teñidos por el lenguaje del inconsciente y lo onírico.
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El aporte personal
La atmósfera de las obras de Pina Bausch están imbuidas de la sensibilidad y la sinceridad de su autora, un ambiente que solo es posible lograr en la intimidad del trabajo comprometido que llevaba a cabo con sus bailarines. En la compañía de Pina Bausch no hay solistas ni jerarquías. Todos los bailarines tenían los mismos derechos y se esperaba de ellos que aportaran sus propias ideas.
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Una vida dedicada a la danza
Quien ingresaba a la compañía de Pina Bausch lo hacía por mucho tiempo; a veces, para siempre. El Tanztheater de Wuppertal se convirtíó en un grupo de artistas unidos como pocos por el amor a su trabajo. Luego de la muerte de Pina Bausch, el 30 de junio de 2009, la compañía, que actualmente cuenta con unos 30 bailarines de edades que van desde los 24 hasta los 60 años, todavía sigue bailando.
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Repertorio inigualable
Tras la muerte de Pina Bausch, los bailarines Dominique Mercy y el director de cine y teatro Robert Sturm asumieron la dirección artística de la compañía. Mercy es uno de los miembros más antiguos del grupo. Su objetivo era mantener el repertorio de Pina Bausch a través del tiempo. En 36 años, la coreógrafa creó 46 obras. En la foto se ve a Mercy bailando en el filme “Pina”, de Wim Wenders.
Imagen: picture-alliance/dpa
"Pina", nominada para un Oscar
La película “Pina”, de Wim Wenders –un homenaje en 3D a la artista y a Wuppertal, una ciudad industrial en el oeste de Alemania, en plena Cuenca del Ruhr- fue nominada para un Oscar en la categoría de “Mejor documental”.
Imagen: Getty Images for AFI
Copyright Pina Bausch
Las obras de Pina Bausch están protegidas y solo pueden ser llevadas a escena por la Tantztheater Wuppertal. Los bailarines tienen 40 obras para elegir, entre ellas, la famosa “Kontakthof” (Patio de contactos), en la imagen.
Imagen: picture-alliance/dpa
Nuevos rumbos
En 2013, Lutz Förster, un miembro de larga data del grupo, asumió la dirección de la Compañía de Danza-Teatro de Wuppertal. Förster es profesor de danza en la Universidad Folkwang de la Artes y planea reorientar el curso de la compañía. Hasta 2015 no habrá puestas en escena de nuevas obras, señaló.