Diez consejos para un cabello hermoso
27 de agosto de 2015Diez consejos para un cabello hermoso
Tener un cabello hermoso y bien cuidado es algo que muchos desean. Aunque las características del pelo son muy individuales, pueden cometerse muchos errores en su cuidado. Diez consejos para un cabello sano.
Cuero cabelludo sano
La premisa para tener un cabello sano es un cuero cabelludo sano; si éste se descuida, pueden surgir problemas como piel reseca, irritaciones o caspa. Los masajes del cuero cabelludo estimulan la irrigación y las glándulas sebáceas, y son un remedio para el cabello seco. Si el cuero cabelludo sufre problemas pueden aplicarse lociones o tinturas medicinales.
Un lavado correcto
Conviene cepillar el pelo antes de lavarlo, ya que muchas impurezas se eliminan con el cepillado. Tras ello, basta con lavar una sola vez con poco champú. Es importante aclarar bien, con agua no demasiado caliente, pues eso perjudica al cabello. Al final se puede aclarar con agua fría y unas gotas de limón o de vinagre, para dar brillo y resistencia al pelo.
Un cuidado adecuado
El pelo precisa de cuidados tras cada lavado. El acondicionador se deposita como una película protectora sobre el cabello y le confiere más brillo, flexibilidad y suavidad; pero no hay que abusar de él. Se aconseja peinar el pelo mojado cuidadosamente con un peine de puntas separadas.
Un secado que sea perjudicial
No es bueno secarse el pelo frotando fuerte con la toalla, ya que eso daña su capa de queratina. Tampoco es muy aconsejable hacerse el turbante tradicional: eso mantiene caliente al cabello, con el resultado de que éste se hincha y se vuelve más delicado. Lo ideal es secarse le pelo al aire libre, con aire templado del secador o con un secador de sensor infrarrojo.
Tratamientos, de vez en cuando
Aunque se cuide regularmente el cabello, es necesario aplicar de vez en cuando una mascarilla. Hay productos en venta para cada tipo de cabello, pero éstos también pueden hacerse en casa. Para cabellos secos es aconsejable el aceite vegetal o la crema de aguacate: hacer una pasta del aguacate con dos cucharadas soperas de aceite de girasol y unas gotas de limón y aplicar sobre el pelo 15 minutos.
El cabello y sus enemigos
Las puntas abiertas son una auténtica molestia, sobre todo en el pelo largo. El teñido frecuente, la radiación solar, el aire ambiental seco o el aire muy caliente de un secador pueden partir el cabello y darle un aspecto poco sano. Esto puede prevenirse frotando las puntas con aceite o con cremas nutritivas especiales, o, en casos excepcionales, con un preparado de silicona.
Cepillar y peinar bien
Unos buenos cepillos y peines son tan importantes como los cuidados concretos. Un cepillo de cerdas de jabalí es adecuado para repartir la grasa sebácea desde la base a las puntas. Las cerdas tienen que ser suaves y de punta redondeada. Las puntas de los peines también deben estar redondeadas. Hay que lavar los cepillos y peines regularmente con champú, para evitar que proliferen bacterias.
Un teñido correcto
Teñirse es un tratamiento químico y el tinte debe penetrar profundamente en el cabello. Los decolorados eliminan los pigmentos naturales del pelo y pueden volverlo quebradizo, por eso es necesario aplicar después un cuidado especial. El tinte oscuro no daña tanto. Cuidado en caso de usar henna: ésta no se puede aplicar sobre cabello teñido; hay que esperar a que crezca naturalmente.
Una alimentación sana
Una dieta alimenticia limitada daña el cabello y puede dar lugar a un pelo mate, quebradizo y fino, por falta de vitaminas y minerales como hierro, vitamina H o biotina, cinc, ácido pantoténico o vitamina B1. Ciertos alimentos como fruta, pescado, aves, verdura verde en hojas, productos lácteos, soya y grano integral proporcionan los oligoelementos necesarios.
Saber relajarse
El estrés hace que el organismo genere cortisol en exceso, y eso puede provocar infecciones en la raíz del cabello, caída de pelo o un cabello débil. La ciencia aún no logró explicar definitivamente cómo opera ese proceso, pero es importante relajarse y reducir estrés, por ejemplo practicando deporte. Después de algún tiempo, el pelo se recupera.
Diez consejos para un cabello hermoso
Tener un cabello hermoso y bien cuidado es algo que muchos desean. Aunque las características del pelo son muy individuales, pueden cometerse muchos errores en su cuidado. Diez consejos para un cabello sano.
Cuero cabelludo sano
La premisa para tener un cabello sano es un cuero cabelludo sano; si éste se descuida, pueden surgir problemas como piel reseca, irritaciones o caspa. Los masajes del cuero cabelludo estimulan la irrigación y las glándulas sebáceas, y son un remedio para el cabello seco. Si el cuero cabelludo sufre problemas pueden aplicarse lociones o tinturas medicinales.
Un lavado correcto
Conviene cepillar el pelo antes de lavarlo, ya que muchas impurezas se eliminan con el cepillado. Tras ello, basta con lavar una sola vez con poco champú. Es importante aclarar bien, con agua no demasiado caliente, pues eso perjudica al cabello. Al final se puede aclarar con agua fría y unas gotas de limón o de vinagre, para dar brillo y resistencia al pelo.
Un cuidado adecuado
El pelo precisa de cuidados tras cada lavado. El acondicionador se deposita como una película protectora sobre el cabello y le confiere más brillo, flexibilidad y suavidad; pero no hay que abusar de él. Se aconseja peinar el pelo mojado cuidadosamente con un peine de puntas separadas.
Un secado que sea perjudicial
No es bueno secarse el pelo frotando fuerte con la toalla, ya que eso daña su capa de queratina. Tampoco es muy aconsejable hacerse el turbante tradicional: eso mantiene caliente al cabello, con el resultado de que éste se hincha y se vuelve más delicado. Lo ideal es secarse le pelo al aire libre, con aire templado del secador o con un secador de sensor infrarrojo.
Tratamientos, de vez en cuando
Aunque se cuide regularmente el cabello, es necesario aplicar de vez en cuando una mascarilla. Hay productos en venta para cada tipo de cabello, pero éstos también pueden hacerse en casa. Para cabellos secos es aconsejable el aceite vegetal o la crema de aguacate: hacer una pasta del aguacate con dos cucharadas soperas de aceite de girasol y unas gotas de limón y aplicar sobre el pelo 15 minutos.
El cabello y sus enemigos
Las puntas abiertas son una auténtica molestia, sobre todo en el pelo largo. El teñido frecuente, la radiación solar, el aire ambiental seco o el aire muy caliente de un secador pueden partir el cabello y darle un aspecto poco sano. Esto puede prevenirse frotando las puntas con aceite o con cremas nutritivas especiales, o, en casos excepcionales, con un preparado de silicona.
Cepillar y peinar bien
Unos buenos cepillos y peines son tan importantes como los cuidados concretos. Un cepillo de cerdas de jabalí es adecuado para repartir la grasa sebácea desde la base a las puntas. Las cerdas tienen que ser suaves y de punta redondeada. Las puntas de los peines también deben estar redondeadas. Hay que lavar los cepillos y peines regularmente con champú, para evitar que proliferen bacterias.
Un teñido correcto
Teñirse es un tratamiento químico y el tinte debe penetrar profundamente en el cabello. Los decolorados eliminan los pigmentos naturales del pelo y pueden volverlo quebradizo, por eso es necesario aplicar después un cuidado especial. El tinte oscuro no daña tanto. Cuidado en caso de usar henna: ésta no se puede aplicar sobre cabello teñido; hay que esperar a que crezca naturalmente.
Una alimentación sana
Una dieta alimenticia limitada daña el cabello y puede dar lugar a un pelo mate, quebradizo y fino, por falta de vitaminas y minerales como hierro, vitamina H o biotina, cinc, ácido pantoténico o vitamina B1. Ciertos alimentos como fruta, pescado, aves, verdura verde en hojas, productos lácteos, soya y grano integral proporcionan los oligoelementos necesarios.
Saber relajarse
El estrés hace que el organismo genere cortisol en exceso, y eso puede provocar infecciones en la raíz del cabello, caída de pelo o un cabello débil. La ciencia aún no logró explicar definitivamente cómo opera ese proceso, pero es importante relajarse y reducir estrés, por ejemplo practicando deporte. Después de algún tiempo, el pelo se recupera.