Han pasado cinco años desde que las tropas estadounidenses declararan que el país podía sentirse libre del régimen talibán. Ahora es la ISAF, una tropa internacional, la que ha tomado el relevo de las operaciones militares. Sin embargo, la situación en Afganistán está lejos de ser estable. Los talibanes siguen activos, sobre todo en el sur. Y el Gobierno, atrincherado en Kabul, no logra imponer seguridad.