"España se ha mostrado unida contra el terror", titula en su portada el diario berlinés Der Tagesspiegel. El mismo periódico destaca que ‘millones de personas han salido a las calles a protestar y rendir homenaje a las víctimas de los atentados del 11 de marzo’ e indica que la banda terrorista ETA ha negado ser la autora de los ataques.

El Frankfurter Rundschau, de Fráncfort, señala que "los atentados de Madrid han hecho renacer el miedo de una escalada terrorista en todo el mundo" y agrega que no hay claridad acerca de si los atentados fueron perpetrados por ETA o por Al Qaeda.

El Süddeutsche Zeitung, de Múnich, subraya que el Gobierno español mantiene a ETA como la principal sospechosa, aunque un diario vasco recibió una llamada de una persona que, en nombre de esa banda terrorista, negó toda responsabilidad en los crímenes.

¿Quién pagará el precio político?

Varios diarios dedican comentarios a la evolución de las pesquisas, a las dos direcciones principales en que están investigando los servicios de seguridad y a las repercusiones de los atentados para la política de seguridad en Europa.

El conservador Frankfurter Allgemeine se pregunta si, en caso de que los responsables fueron terroristas árabes, los españoles no verán en los atentados una consecuencia del apoyo español a la guerra de Irak. Y agrega que "en las cabezas y los ánimos de los españoles esta pregunta desempeñará un papel" en las elecciones del domingo.

"Ellos decidirán en las urnas quién tiene que pagar el precio político inmediato por un crimen cuyos autores todavía no están determinados con seguridad", dice el diario de Fráncfort. "La votación se realizará antes de que los españoles sepan si los vascos dejaron una pista falsa con versos del Corán o si Al Qaeda imitó el terrorismo de mochila de ETA", añade.

Una nueva dimensión del terror

El también conservador Die Welt señala que este atentado es el primero de esas dimensiones en Europa después de la Guerra Fría y del fin de los viejos bloques ideológicos, y que "en eso consiste la nueva dimensión de la que ha hablado el canciller" Gerhard Schröder.