DW: El grupo ciudadano “Nuevo comienzo en Duisburgo” logró destituir a través de un referéndum a su alcalde mayor, al que se tiene por responsable político de la tragedia de la Loveparade 2010. ¿Cambiará el panorama político la destitución de un alcalde?

Ansgar Klein: El caso “Sauerland” fortalecerá las iniciativas en otros Estados federados en donde se quiere que la figura de la destitución popular de alcaldes sea incluida en la Constitución nacional. La exitosa campaña de destitución de Sauerland hace evidente una cosa: en la democracia no basta con elegir a un representante. También hay que fiscalizar su desempeño y, si es necesario, también destituirlo.

¿Cree que el caso Sauerland hará escuela en Alemania?

Tiene que existir la posibilidad de destituir por votación popular a un representante político que, como Sauerland, se rehusó a asumir su responsabilidad.

¿Dañan la cultura política alemana personajes políticos como el (ex alcalde) Sauerland y el presidente alemán, Christian Wulff, que se rehúsan a abandonar sus cargos?

Desde luego. Cuando por anteponer intereses personales al beneficio público los políticos se niegan a abandonar el cargo al que fueron elegidos, se rompe con el dictado de que los representantes del pueblo en cargos políticos deben asumir la responsabilidad por los errores cometidos. Un ejemplo histórico fue la renuncia del extinto canciller Willy Brandt, tras conocerse que la Alemania comunista (RDA) había puesto a un espía en su entorno. Aún sin ser la culpa de Brandt, él asumió la responsabilidad política por haber sido posible permear el centro del poder en Alemania. En el caso de Wulff, se puede decir que ha cumplido a cabalidad sus funciones como presidente, sólo que ahora se está destapando su pasado.

¿Cómo ve usted la participación ciudadana en Alemania?

En Alemania hay 23 millones de personas que aportan, de alguna manera, al desarrollo social común. Alemania es uno de los países con la población socialmente más activa de Europa. En lo que concierne al trabajo político comunitario, los alemanes son menos entusiastas. En los últimos tiempos se percibe un apoyo a movimientos políticos de protesta como “Los Piratas”.

Nuestro sistema político está actualmente en ebullición debido a la crisis financiera. Se necesitan nuevas soluciones. En Estados como Renania Palatinado se estudia una Ley que permita mayor participación ciudadana y mediación en caso de conflicto.

¿Qué papel juega Internet en la participación ciudadana en Alemania?

Gracias a Internet podemos ahora generar más transparencia. Es cada vez más difícil retener información en círculos cerrados. Pero la preocupación es grande de que medios como Internet que refuerzan la libertad sean coartados.

¿Cómo se puede fortalecer la participación ciudadana en Alemania?

Actualmente participo en la iniciativa "Open governance" que trabaja por una mayor participación civil y contra la corrupción a nivel mundial. Esta idea es dirigida desde Brasil y Estados Unidos. Lamentablemente, Alemania aún no se ha unido como país. Democracia no es sólo votar sino actuar activamente social y políticamente construyendo el país.

Autor: Friedel Taube /José Ospina-Valencia
Editor: Pablo Kummetz