EE.UU. llama a Rusia a respetar cese del fuego en Ucrania
26 de febrero de 2017
El Departamento de Estado exigió a las fuerzas rusas y separatistas que, además, retiren todas sus armas pesadas. Asimismo, condenó ataque contra observadores de la OSCE.
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El Departamento de Estado de Estados Unidos exigió este domingo (26.02.2017) a Rusia que respete "de inmediato” el cese de las hostilidades que impera en el este de Ucrania, acusando a las fuerzas separatistas y a Moscú de atacar a los funcionarios de la OSCE (Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa) que monitorean que se respete el acuerdo de silenciar las armas.
"Llamamos a Rusia y a las fuerzas separatistas que este país respalda a respetar de inmediato el cese el fuego, retirar todas las armas pesadas y permitir el acceso pleno y sin trabas a los monitores de OSCE”, dijo el departamento de Estado. Su portavoz, Mark Toner, aseguró que EE. UU. está muy atento a la creciente violencia que se vive en el este ucraniano y a cómo las fuerzas rusas y separatistas no cumplen lo acordado a comienzos de 2016 en Minsk.
"Condenamos el ataque del viernes contra la Misión Especial de Monitoreo de la OSCE y la incautación de un vehículo aéreo no tripulado de dicha entidad realizada por parte de las fuerzas combinadas ruso-separatistas”, dijo Toner. "Es imperativo que dichas fuerzas detengan sus ataques a la infraestructura civil, incluyendo la estación filtradora de agua de Donetsk”, añadió el portavoz.
Incremento de la violencia
En el incidente en cuestión, varios hombres armados apuntaron a los observadores de la OSCE cerca de Yasynuvata, al norte de Donetsk, tras lo cual les arrebataron un dron que era utilizado por esa entidad para vigilar los movimientos de las milicias y detectar cualquier violación a los tratados de Minsk. "Cualquier intento de disparar contra supervisores civiles desarmados es una violación directa de la voluntad colectiva de los estados de la OSCE y de los acuerdos de Minsk”, dijo el jefe de la misión, Ertugrul Apakan.
El sorpresivo comunicado estadounidense, que vincula sin ambages a Rusia con los separatistas, se conoce justo en medio de un incremento de la violencia en el este ucraniano. El Ejército de ese país, sin ir más lejos, reportó el sábado que 16 de sus soldados habían resultado heridos en las últimas 24 horas. Este mes, el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, se mostró "preocupado" por el papel de Rusia en la escalada de la violencia en el este de Ucrania.
DZC (AFP, Reuters, Europa Press, EFE)
Ucrania: la vida entre los bandos de guerra
Entre el fuego de los morteros, miles de personas mayores y ciudadanos empobrecidos continúan viviendo entre los bandos en la "zona gris" del este ucraniano. Diego Cupolo informa desde Donetsk.
Imagen: DW/D. Cupolo
En medio del fuego cruzado
Cada noche, el bombardeo comienza cuando se pone el sol. Los militares ucranianos y los separatistas prorrusos se enfrentan cerca de Donetsk. Atrapados en el fuego cruzado se hallan muchas personas mayores demasiado pobres e incapaces de ir a otro lugar. Ivan Polansky, en la imagen, observa los daños de su vivienda en Zhovanka.
Imagen: DW/D. Cupolo
‘Esperando los proyectiles’
Los residentes de Zhovanka en la llamada "zona gris", una delgada línea de tierra que separa a las partes enfrentadas, hacen cola para visitar al médico. Estas clínicas espontáneas se organizan una vez a la semana. "Cada día esperas que un proyectil alcance tu casa y nunca sabes cuándo va a suceder", dijo Ludmila Studerikove, residente local.
Imagen: DW/D. Cupolo
Sin electricidad ni calefacción
Zhovanka fue hace tiempo el hogar de 1.000 personas, pero la cifra se ha reducido a 200 desde que comenzó la guerra a mediados de 2014. Sus habitantes tuvieron luz y electricidad por última vez hace tres meses. "A veces, tengo tanto miedo que estoy acostada en la cama y solo tiemblo", dijo Studerikove. "Mi marido está a mi lado y me toma la mano".
Imagen: DW/D. Cupolo
Sin ningún lugar adonde ir
Olexander Voroshkov, coordinador del progrma caritativo SOS Kramtorsk, dijo que la gente sigue viviendo en casas medio destruidas y techos con agujeros, porque el alquiler de las ciudades ucranianas se ha disparado desde el comienzo del conflicto. "El precio de los alquileres en Kramatorsk es similar al de la ciudad de Kiev, pero los salarios son más bajos que en Kiev", dijo Voroshkov.
Imagen: DW/D. Cupolo
Dependiendo de la ayuda humanitaria
Las mujeres hacen cola en Zhokava para recibir medicinas y multivitaminas. Las organizaciones humanitarias aportan comida y ayuda; algunas veces, la gente tarda más de un día en pasar los puestos de control. "Teníamos de todo: aire fresco y naturaleza. Era muy bonito. Ahora solo tenemos frío", dijo Vera Sharovarova, habitante del lugar.
Imagen: DW/D. Cupolo
Adaptándose a la situación
Vera Anoshyna habla con los vecinos en Spartak, una ciudad que pertenece a la "República Popular de Donetsk". Anoshysa dijo que había hecho todo lo posible para adaptarse al conflicto. "Si no tienes agua, encuéntrala", dijo. "Si no tienes electricidad, busca una solución. Pero nunca sabes cuándo explotará la próxima bomba".
Imagen: DW/D. Cupolo
Seis costillas rotas
Svetlana Zavadenko, ante su casa en Spatak. Sufrió heridas cuando las paredes de su casa se derrumbaron, después de que varios proyectiles explotaran en el patio. Los vecinos tuvieron que cavar y extraer a Zavadenko de las ruinas. Llegó al hospital con seis costillas rotas y el hígado lesionado. Fuma la marca de cigarros "Minsk" y se ríe cuando se le pregunta su opinión sobre la guerra.
Imagen: DW/D. Cupolo
"Hemos perdido la esperanza"
Zavadenko se recuperó de sus heridas y vive sola con varias mascotas. Spartak no tiene electricidad ni gas ni agua desde 2014. Usa una barbacoa para cocinar su comida. Para conseguir leña, va a una fábrica de madera cercana. "El invierno pasado pensábamos que terminaría la guerra, pero ahora, honestamente, hemos perdido la esperanza", dijo.
Imagen: DW/D. Cupolo
¿Un nuevo alto el fuego?
Daños causados por los bombardeos en las afueras de Donetsk. A pesar de los fallidos intentos de reducir la intensidad de la guerra, en una reunión sobre el proceso de paz en noviembre, en Berlín, se intentará asegurar un nuevo alto el fuego. El presidente ucraniano, Petro Poroshenko, dijo que acabaría con las hostilidades en el este ucraniano y retiraría las tropas de la región.
Imagen: DW/D. Cupolo
"Hemos perdido a muchos soldados para parar ahora"
Incluso si ambas partes llegan a acordar el alto el fuego, tendrán que enfrentar la oposición de los militares, que se quejan de haberse esforzado mucho para dejar las armas. "Hemos perdido a demasiados soldados para parar ahora", dijo Vladimir Parkhamovich, coronel de la brigada 81 del Ejército del Aire en Ucrania. "Si nos dan la orden de cesar el fuego, los consideraremos traidores", añadió.