Una mujer llevó a cabo un tiroteo en centro de distribución situado a 55 kilómetros al noreste de Baltimore, en el estado de Maryland. Hay tres víctimas mortales más la propia autora, que se ha suicidado.
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Una mujer ha matado este jueves (20.09.2018) a tres personas y ha dejado heridas a otras tres antes de suicidarse en un centro de distribución en la localidad de Aberdeen, situada a unos 55 kilómetros al noreste de Baltimore, en el estado de Marylan. Así lo informó la Oficina del Sheriff del condado de Harford. El mismo sheriff, Jeffrey Gahler, explicó en una rueda de prensa que la mujer, una empleada temporal de 26 años, acudió a su lugar de trabajo en el centro de distribución de farmacias RideAid, como cada día, antes de abrir fuego por razones que aún se desconocen.
Tres personas murieron como resultado del tiroteo, una de ellas ya estando en el hospital. Otras tres resultaron heridas y, según Gahler, se espera que se recuperen. La responsable del tiroteo también murió en el hospital producto de un disparo autoinfligido. Las autoridades recibieron la alerta sobre el tiroteo a las 09.06 hora local y en unos cinco minutos se desplegaron en el lugar. Gahler también precisó que sus agentes no dispararon sus armas durante el incidente. Una portavoz de la farmacéutica, Susan Henderson, confirmó a la CNN que el tiroteo tuvo lugar en sus instalaciones, donde trabajan un millar de personas.
MS (afp/ap)
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Una "misa" para rendir culto a las armas
La mayoría de las religiones tiende a predicar el amor y la paz; pero ese mensaje suele ser malinterpretado con frecuencia. Como muestra, una misa celebrada en Estados Unidos a la que se asiste armado hasta los dientes.
Imagen: Reuters/E. Munoz
¡Bendito seas, AR-15!
El fusil de salto semiautomático AR-15 es el arma predilecta de los estadounidenses. Fue con esa arma larga que se perpetró la matanza en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas de Parkland, Florida, el 14 de febrero de 2018. Esa es también el arma que más feligreses llevaron a la extraña misa celebrada el 28 de febrero en Newfoundland, Pensilvania (en la imagen, en una versión dorada).
Imagen: Reuters/E. Munoz
Con municiones por corona
A los feligreses se les pidió que asistieran a la misa con una corona; algunas de ellas fueron hechas a base de municiones. Esa ceremonia religiosa fue organizada por un hijo del difunto Sun Myung Moon, el coreano que emigró a EE. UU. y fundó la Asociación del Espíritu Santo para la Unificación del Cristianismo Mundial –más conocida como la secta Moon–, tras autoproclamarse mesías.
Imagen: Reuters/E. Munoz
Tras los pasos de su padre
Originalmente, se suponía que Moon Hyung-jin (coronado, en el lado derecho de la foto) debía asumir el liderazgo de la secta Moon tras la muerte de su padre, en 2012. Pero una rencilla con su madre lo llevó a fundar su propia iglesia. En esta imagen, él bendice a parejas casadas ...y a sus armas.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Larma
¿Derecho divino?
La iglesia le pidió a sus feligreses que llevaran sus armas a la misa como prueba de que creían en el derecho a poseer armas y estaban dispuestos a defenderlo. En su sermón, Moon Hyung-jin alegó que la posesión de armas era un derecho otorgado por dios. Esta ceremonia, que llamó la atención de la prensa, reveló hasta qué punto un segmento de la población estadounidense venera sus arsenales.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Larma
Precauciones de rigor
Las armas traídas a la misa por las alrededor de 250 parejas invitadas fueron inspeccionadas en la entrada de la iglesia para confirmar que estuvieran descargadas. Además, el cargador de las mismas fue sellado para evitar que a alguien se le ocurriera la idea de consumar una masacre en el templo.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Larma
Una clara jerarquía
En la ceremonia religiosa se hizo evidente una clara jerarquía: los puestos delanteros estaban reservados para quienes poseían ametralladoras, fusiles de asalto o metralletas y los asientos traseros, para los dueños de revólveres y otras armas con menor poder de fuego. Los fotógrafos y camarógrafos sólo tuvieron permitido estar de pie al final de la sala.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Larma
¿Riesgo reducido?
Al parecer, cuando los entusiastas de las armas se reúnen, el resto de sus conciudadanos corre menos peligro. Un estudio realizado por científicos estadounidenses revela que, durante el encuentro anual de la NRA, la asociación de los lobbyistas de las armas de fuego en EE. UU., el número de heridos desciende en un 20 por ciento; ese efecto empieza unos días antes y termina varios días después.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Larma
“¡Ya basta!”
En EE. UU. hay 300 millones de armas de fuego en circulación y éstas causan 30.000 muertes cada año. Pero también está creciendo el número de personas que protestan airadamente contra la laxitud de las leyes que regulan la posesión y el porte de armas. Tras la matanza de Florida, ha aumentado la cantidad de jóvenes que se han unido a la causa de exigir controles más severos.