Un hombre "perteneciente a una organización terrorista" y cuatro integrantes de los Hermanos Musulmanes fueron arrestados como sospechosos en el ataque del domingo (20.10.2013) contra los invitados de una boda a las puertas de la Iglesia de la Virgen María en el suburbio de Warraq, al norte de la capital.

Los muertos son dos mujeres, un hombre y una niña de ocho años, según fuentes hospitalarias. Además hubo 17 heridos. Una coalición islamista, de la que forman parte los Hermanos Musulmanes, condenó el ataque y acusó al Ministerio del Interior de ser el responsable.

"La alianza considera responsable al Ministerio del Interior porque no se ha ocupado en asegurar la seguridad de los ciudadanos egipcios, sino que ha estado ocupado persiguiendo a manifestantes pacíficos y a estudiantes en los campus universitarios", señala una declaración de la Alianza Nacional para la Defensa de la Legitimidad.

Líderes egipcios condenan ataque

El ataque, que según testigos fue llevado a cabo por dos hombres en una motocicleta que dispararon de manera arbitraria con un arma automática, fue condenado ampliamente en Egipto por los líderes políticos y religiosos.

El primer ministro, Hazem el Beblaui, calificó el ataque como "un hecho criminal despreciable". "Estos hechos no tendrán éxito en abrir una brecha entre los dos componentes de la nación, musulmanes y cristianos", añadió en un comunicado publicado en el periódico "Al Ahram". El ataque también fue condenado por el máximo líder islámico en Egipto, el imán y presidente de la universidad de Al Azhar, Ahmed el-Tayeb.

Los ataques contra iglesias y miembros de la minoría copta se han multiplicado desde que los militares destituyeran al presidente islamista Mohamed Mursi. Decenas de iglesias y monasterios fueron atacados o incendiados en el sur del país en los días posteriores a su destitución.

VC (dpa, der Standard)