El Ministerio de Sanidad desmintió en las últimas horas informaciones que cifraban en 638 los muertos en la violencia desatada en el país el miércoles y habló de 578 muertos.

Durante la noche los habitantes de la provincia de Al Minia ayudaron a la policía del orden a evitar el asalto de su comisaría en la zona de Abu Karkas. Testigos contaron al portal de noticias youm7 que la comisaría local había sido incendiada.

Destruido un edificio de la recaudación de impuestos

Medios locales informaron además de que se escucharon nuevos disparos cerca de la plaza Tahrir de El Cairo antes de que finalizara el toque de queda. En la ciudad de Al Arish, en la península del Sinaí, fue incendiado el edifico de la oficina fiscal. Testigos señalaron que después de que los habitantes intentaran primero apagar el fuego, los atacantes volvieron con nuevas bombas incendiarias y controlaron que nadie interviniera.

Los Hermanos Musulmanes y partidos islamistas llamaron a la gente a salir a las calles tras los rezos del viernes para protestar contra el Ejército y el gobierno de transición. Algunos radicales islamistas llamaron por Twitter a los manifestantes a armarse.

Las marchas partirán "de todas las mezquitas de El Cairo y se dirigirán hacia la plaza Ramsés tras los rezos", escribió en Twister el portavoz de los Hermanos Musulmanes, Gehad el Hadad.

"Pese al dolor por la pérdida de nuestros mártires, los últimos crímenes de los golpistas aumentaron nuestra determinación para terminar con ellos", aseguró el grupo en un comunicado.

En Egipto rige el estado de excepción y un toque de queda nocturno.

jov /pk (dpa, n-tv)