El nombre Ego Egoexpress es una típica palabra utilizada por los niños que lo dice todo por sí misma, lo quiero todo y lo quiero ahora. Ambos miembros del equipo habían colgado los instrumentos desde hace tiempo. Tanto Mense Reents como Jimi Siebels, considerados de los mejores productores del mundo, han necesitado casi cinco años, desde su última publicación en 2001.

Pero tras la pausa creativa, los dos de Hamburgo aparecen con “Hot Wire My Heart”, nada adecuado para el aparato auditivo de la masa pero una auténtica denominación de origen. Y en la categoría de Tecno, seguramente próximo candidato a disco del año. Reents y Siebels han demostrado no ser robots y permitirse el paso de los años, hasta tener un proyecto lo suficientemente maduro como para editar un disco.

Más Tecno que nunca

La música de este trabajo viene sin adornos, un álbum compacto con menos melodías pop que en su último trabajo. Pero lo que siempre garantizan es la diversión con los excesos y una mano infalible para lograr un tempo perfecto.

De sus inicios con el Electropunk, tan sólo ha quedado una canción en todo el álbum, “Links eine Hand”. El resto de los títulos se mueve dentro de la esfera del Tecno y el House. Las espectaculares novedades se han quedado fuera de este proyecto, pero, eso sí, la música y el baile seguro que no faltan.

De entre las diez canciones cabe destacar la primera, “Ananda”, todo un placer para el oído. “Oh my god, it´s techno music”, dice la voz en la tercera pieza, Knartz IV. Con un comienzo como ese y las posteriores repeticiones de esta f frase durante toda la pieza, sin duda está destinada a levantar al público en las pistas de baile. Como siempre, construyen sus canciones con textos base que tienen más significado por las noches que durante el día.

En todo el trabajo, suena música de las que no se abandonan en el cajón, una auténtica declaración de amor a la cultura del club y a las noches donde la música parece dirigir al público bajo los focos. En un solo disco, todo lo mejor de una de las bandas de mayor reputación en la escena House mundial.