El presidente ucraniano, Petro Poroshenko, anunció hoy (04.12.2014) que el próximo martes el Ejército dejará las armas por un día, con lo que busca sentar las bases para una nueva tregua con los separatistas en el este del país. El ministro de Defensa ucraniano, Stepan Poltorak, dijo, por su parte, que lo principal es que reine la paz.

Los separatistas prorrusos habían dado a conocer previamente que acatarían un alto el fuego a partir del viernes, que no fue confirmado por las autoridades en Kiev. Los rebeldes de Donetstk comunicaron que están dispuestos a cumplir con la nueva tregua.

Por su parte, el presidente de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), Didier Burkhalter, dio la bienvenida a la nueva tregua pactada entre el Gobierno ucraniano y los separatistas, pero llamó a la "cautela". "La experiencia nos ha enseñado que debemos mantener la cautela", indicó el ministro de Exteriores suizo en una rueda de prensa, en la que valoró el primer día de la cumbre ministerial de la organización. Burkhalter indicó que la tregua es un paso positivo pero dado el incumplimiento de las últimas se deberá realizar un seguimiento de la situación para poder emitir un juicio más consistente.

Putin defiende su política sobre Ucrania

Desde principios de septiembre, rige un cese del fuego entre el Gobierno y los separatistas, pero no ha sido respetado. Más de 1.000 personas murieron durante ese tiempo en diversos enfrentamientos. Las autoridades ucranianas estiman que el Ejército debe enfrentar a más de 32.000 combatientes, entre los que cree que hay 10.000 soldados rusos.

Moscú, por su parte, ha negado reiteradamente haber enviado combatientes al país vecino. En el discurso anual sobre el estado de la nación que este jueves pronunció Vladimir Putin, el presidente ruso defendió su política en Ucrania.

MS (dpa/efe)