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PolíticaArabia Saudita

El afán deportivo de Arabia Saudí tinene motivos económicos

Arthur Sullivan
11 de mayo de 2023

Tras años de inmensos gastos, Arabia Saudí es ahora un actor central en los deportes más lucrativos del mundo. Los críticos dicen que se trata de un lavado de cara, pero ¿hay habría también otros motivos?

Un aficionado saudí apoyando a su selección durante un partido contra Argentina en la Copa del Mundo de 2022.
Además de su amor por el deporte, los saudíes han descubierto que el fútbol, el críquet y el golf pueden mejorar la imagen global de un país.Imagen: Robert Michael/dpa/picture alliance

El enorme papel que Arabia Saudí desempeña actualmente en el deporte mundial se puso de manifiesto la semana pasada en una importante disputa en la que se vio implicadoLionel Messi, el futbolista más destacado del mundo.

Messi fue suspendido por su club, el París Saint-Germain (PSG) francés de propiedad qatarí, por realizar un viaje no autorizado a Arabia Saudí como parte de su papel de embajador turístico de ese país. Ahora se espera que el argentino abandone el PSG, con la liga saudí como posible destino.

Messi gana decenas de millones de euros por ese papel como embajador del turismo, parte de un enorme desembolso que Arabia Saudí realiza actualmente en el deporte profesional.

Un informe de 2021 de la ONG de derechos humanosGrant Liberty, con sede en Londres, reveló que Arabia Saudí había gastado 1.500 millones de dólares (1.370 millones de euros) en deportes en los últimos años. Esa cifra ha aumentado drásticamente en los dos últimos años, con un incremento de la inversión en fútbol, golf, automovilismo y cricket.

El fondo soberano del país, el Fondo de Inversión Pública (FPI), gastó cerca de 800 millones de dólares en su circuito de golf LIV solo en 2022, según el antiguo director de operaciones de dicho circuito, Atul Khosla. Además, el PIF compró el club de fútbol inglés Newcastle United por unos 400 millones de euros (438 millones de dólares) en 2021 y desde entonces ha gastado más de 300 millones de euros en nuevos jugadores. En el fútbol nacional saudí, se gastó una fortunapara traer a Cristiano Ronaldo a la liga.

El príncipe heredero Mohamed bin Salmán es el artífice de la política saudí de apertura al mundo.Imagen: IMAGO/Le Pictorium

Arabia Saudí también anunció recientemente planes para aumentar drásticamente el gasto en críquet. Quiere convertirse en un "destino mundial del críquet" creando uno de los torneos más lucrativos del mundo. A principios de este año se informó que Arabia Saudí estuvo incluso a punto de comprar la totalidad de la Fórmula 1 en un acuerdo que habría superado los 20.000 millones de dólares.

Mucho deporte, mucho lavado de imagen

Muchos críticos acusan a Arabia Saudí de practicar un "lavado deportivo" a gran escala. La organización Greenpeace define el "lavado deportivo" como "el acto de patrocinar un equipo o acontecimiento deportivo para distraer la atención de las malas prácticas en otros lugares". Esta táctica la utilizan a menudo empresas y gobiernos con un mal historial medioambiental o de derechos humanos, aprovechando la afición de la gente al deporte para 'lavar' su imagen.

Jon B. Alterman, director del Programa de Oriente Medio del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, afirma que el objetivo del gasto masivo de Arabia Saudí en deportes es crear una imagen más positiva del país en general. "Cuando el público occidental piensa en Arabia Saudí, muchos piensan primero en cosas como la riqueza petrolera inmerecida, el terrorismo y la segregación de género", dijo a DW.

El turismo como industria clave

La creación de asociaciones más positivas puede, en última instancia, tener un impacto directo en la economía del país. No es casualidad que Messi esté a la cabeza del impulso turístico, ya que los dirigentes del país lo consideran un sector vital en su intento de diversificar la economía del país para liberarse de su actual dependencia del petróleo.

Alrededor del 40 por ciento del PIB saudí se basa en el petróleo, mientras que cerca del 80 por ciento de los ingresos por exportaciones del país están ligados a su producción de crudo.

Los ingresos por turismo aumentaron considerablemente en el país en 2022 y el gobierno tiene planes enormemente ambiciosos, con el objetivo de atraer a unos 100 millones de visitantes anuales para finales de la década, como parte del marco estratégico "Visión Saudí 2030" del príncipe heredero bin Salman.

(gg/ers)

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