El alcalde moscovita, Yuri Luzhkov, volvió hoy a descartar de forma vehemente una dimisión de su cargo, pese a la presión por las acusaciones de corrupción en su contra vertidas por medios estatales rusos.

Las acusaciones no son más que "basura", dijo durante una entrevista en televisión el autoritario alcalde, de 73 años, que lleva 18 al frente de la capital rusa.

Luzhkov negó también las acusaciones contra su mujer, Jelena Baturina, considerada la mujer más rica de Rusia, que según los medios se benefició continuamente de los encargos recibidos desde el ayuntamiento moscovita.

"Mi mujer es sumamente talentosa y sería incluso aún más rica si no se hubiera casado con un alcalde", dijo, anunciando pasos legales contra las acusaciones por sobornos y nepotismo.

Los analistas creen que el presidente ruso, Dmitri Medvedev, quiere hacer caer al burgomaestre, fiel al primer ministro, Vladimir Putin.

Dentro del partido de Putin, Rusia Unida, crece mientras tanto la preocupación de que las informaciones negativas sobre Luzhkov afecten también al partido, informa hoy el diario "Vremia Novostei".

El presidente del Parlamento, Boris Gryslov, confirmó las informaciones sobre un encuentro secreto con Luzhkov, pero no se pronunció sobre las especulaciones de los medios de que sondeó las condiciones para una posible dimisión del alcalde.

dpa