La presentación de una nueva producción del "Anillo de Nibelungo" del compositor alemán Richard Wagner en el Festival de Bayreuth siempre genera gran expectación mediática. Después de todo, con una duración total de 16 horas, es uno de los ciclos de ópera más largos del mundo. La obra se divide en cuatro piezas musicales: "El oro del Rin (Das Rheingold, en alemán)", "La valquiria (Die Walküre)", "Siegfried" y "El ocaso de los dioses (Götterdämmerung)".

En esta oportunidad, en "La valquiria", destacan las ideas del artista austriaco de 82 años Hermann Nitsch. Sus asistentes lanzan cubetas repletas de pintura de diferentes colores sobre las paredes y el escenario mientras se desarrolla la ópera, bajo la dirección musical del finlandés Pietari Inkinen. El color rojo predomina al final de esta ópera, algo que no fue del todo bien recibido por el público.

Una versión a menor escala

Richard Wagner construyó su famoso teatro de Bayreuth en 1876 para presentar su obra, basada en sagas alemanas y una parábola social a gran escala. No es fácil resumir en palabras toda la epopeya del compositor, pues hay muchos enredos entre dioses, semidioses, gigantes, enanos y personas con relaciones complejas.

A pesar de que la nueva producción se había pospuesto para el 2022 debido a la pandemia del coronavirus, la directora del Festival de Bayreuth, Katharina Wagner, no quiso prescindir de la obra en su totalidad durante este año. Músicos, dramaturgos, artistas y titiriteros interpretan las cuatro óperas de formas muy diferentes y a menor escala, lo que es una novedad.

"La valquiria" y sus polémicos colores

La directora del evento, Katharina Wagner, le permitió este año a Hermann Nitsch cumplir uno de sus principales sueños: montar una ópera en Bayreuth. El polémico artista austriaco de 82 años se hizo conocido por sus escandalosas orgías de sangre de animales en el género dramático de Misterio, idea que pretendía implementar en "La valquiria", aunque cambió de parecer.

"Aunque en un principio no pretendía estar en relación directa con la ópera, la violencia y el esplendor de la música hacen que mi action painting, entendido teatralmente, sí se relacione directamente con la música", se lee en el folleto del programa.

En la obra destacan inicialmente los colores azul, verde y morado. Luego, la fuerte presencia del color rojo. Finalmente, se presentan los colores amarillo, naranja y nuevamente rojo, los que simbolizan un anillo de fuego. 

La obra cuenta con partes en 3D

La tarea del artista de video y performance estadounidense Jay Scheib y su equipo era transmitir virtualmente la ópera de cuatro horas a través de unas gafas 3D en cuatro minutos. Esto era, por supuesto, imposible, y Scheib centró deliberadamente su animación en la escena del dragón, en "Siegfried". 

Quien utiliza las gafas puede luchar virtualmente contra el dragón en la sala de conciertos de Bayreuth. Una figura holográfica se mueve en el escenario, da instrucciones y dirige la música de Wagner. "El hombre es el violinista afroamericano Marcus Thompson. El te dirige en la lucha contra el dragón", explica Scheib. Es una alusión al movimiento Black Leves Matter. 

Anillos de seis metros entrelazados con hilo rojo

Para este evento, y en relación con la obra de Wagner "El ocaso de los dioses", la artista japonesa Chiharu Shiota instaló anillos de seis metros y los entrelazó con hilo rojo, como el de una tela de araña. Shiota tiene una fascinación por el anillo como símbolo del poder del destino, por eso, llama a la obra "El hilo del destino". 

La artista, quien representó a su país en la 56 versión de la Bienal de Venecia en 2015, ya ha diseñado escenografías para óperas de Richard Wagner. En sus palabras, el hilo como material tiene algo muy especial: "Puede estar tenso, contraerse, estirarse, como las relaciones humanas", describió en el folleto de presentación de la obra.

(ju/er)