"El gran reemplazo”. Ese es el título del manifiesto que Brenton Tarrant subió a la red poco antes de perpetrar la masacre. No está claro si él mismo lo escribió, ni si realmente actuó por cuenta propia.

Sea como fuere, en círculos de extrema derecha de países occidentales existe un ámbito ideológico en el que el tema del "gran reemplazo” se entiende de inmediato. Tal concepto se refiere a que la población blanca de Europa está siendo "reemplazada progresivamente” por la inmigración de personas con otro color de piel y mayores tasas de natalidad.

En el ámbito de la extrema derecha alemana, se habla generalmente en este contexto de "sustitución de pueblos”.

La clave de la diversidad

Entre todos los grupos de derecha y ultraderecha, el Movimiento Identitario es probablemente el que tiene mayor afinidad ideológica con Tarrant. También en esa corriente ocupa un lugar central el tema del "gran reemplazo”. Tanto los identitarios como Tarrant plantean, en contraposición, lo que a menudo se denomina etnopluralismo.

Tarrant habla, sin embargo, de razas, e incluso se autodefine como racista. Dice no tener "nada contra otros pueblos y razas”, mientras permanezcan en "sus países de origen”. Y afirma que el ataque de Christchurch "no es un atentado contra la diversidad, sino en nombre de la diversidad; para velar por que los pueblos se conserven diferentes, separados, únicos y sin diluirse”.

El Movimiento Identitario es especialmente activo en las redes sociales e intenta atraer a jóvenes con contenidos de apariencia inofensiva. "Su objetivo es presentarse como una agrupación con la que se puede simpatizar, sin correr el riesgo de ser considerado neonazi”, señaló Anna-Lena Herkenhof, experta que brinda asesoría contra el extremismo de derecha, en una entrevista concedida a DW en octubre. Un informe de un centro de protección juvenil indica que "se pretende mostrar el extremismo de derecha como algo normal” en la vida cotidiana. Sobre todo en Instagram se presenta un "estilo de vida alternativo”,  con temas populares, como viajes o naturaleza, en el primer plano.

Disposición a la violencia

La gran diferencia entre el panfleto de Tarrant y las declaraciones oficiales de los identitarios radica en el tema de la violencia, pero solo a primera vista. Tarrant exhorta abiertamente a la violencia. "Su objetivo es instigar a una guerra civil”, opina Matthias Quent, experto en extremismo de derecha. "Su propósito es exacerbar las tensiones sociales de modo que haya una guerra contra la democracia, contra la sociedad abierta y, en especial, contra personas de familias inmigrantes. Ese es el objetivo perseguido, no solo por él, sino también por muchos extremistas de derecha”, apunta.

Dado que los identitarios saben que semejantes exhortaciones a la violencia acarrearían una inmediata prohibición, su estrategia comunicacional opta por llamar al "pueblo” supuestamente homogéneo a "ofrecer resistencia”. Deliberadamente no especifican qué implica esa "resistencia”. Pero de ahí a la violencia hay poco trecho. Por lo menos verbalmente, los identitarios y algunos políticos del partido Alternativa para Alemania (AfD) preparan el terreno para que algunos se sientan llamados a emplear violencia contra supuestos extranjeros o "traidores a la cultura” en sus propias filas.

(er/cp)

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