El Bayern Múnich, eliminado en semifinales de la Champions
4 de mayo de 2016
Pese a ganar 2-1 frente al Atlético de Madrid en el Allianz Arena, el 1-0 del partido de ida clasifica a los atléticos, que jugarán la final contra el vencedor del partido entre el Real Madrid y el Manchester City.
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El Atlético de Madrid jugará por tercera vez por el máximo título europeo de fútbol tras clasificarse este martes (03.05.2016) para la final de la Liga de Campeones en una dramática semifinal en la que enterró el sueño del triplete del Bayern Múnich de Josep Guardiola. El entrenador español ha sido eliminado en sus tres años al frente del equipo alemán en semifinales de esta competición.
El equipo dirigido por Diego Simeone cayó por 2-1 en el Allianz Arena muniqués, pero hizo bueno el 1-0 que había logrado seis días antes en Madrid y jugará así su tercera final tras las derrotas de 1974 y 2014.
Xabi Alonso adelantó al Bayern en la primera mitad con un tiro de falta y Antoine Griezmann empató en el minuto 53. El polaco Robert Lewandowski devolvió la emoción en el 83, pero el gran protagonista del partido fue el arquero Jan Oblak, que además de atajar un penal a Thomas Müller que hubiera significado el 2-0, detuvo la avalancha ofensiva del Bayern.
Fernando Torres erró también un penal en las postrimerías del encuentro, pero aún así el Atlético avanza a la final del 28 de mayo en Milán, donde se medirá al ganador de la semifinal que mañana definen en el Santiago Bernabéu Real Madrid y Manchester City, tras el empate a cero de la ida.
Fútbol feo contra el mejor del mundo
El chileno Arturo Vidal, jugador del Bayern, resumió al ser preguntado por los estilos contrapuestos de ambos equipos: "Fue fútbol feo contra el mejor fútbol del mundo". "No siempre en el fútbol gana el mejor, como hoy. Hoy ganó el equipo que fue más certero a la hora de concretar las ocasiones", continuó. Y reiteró que el Atlético de Madrid no es un justo finalista: "Por supuesto que no, por todo lo que se dio en estos 180 minutos".
Guardiola dijo haberse empleado al máximo con el equipo y, a pesar del resultado de la eliminatoria, se mostró orgulloso de lo conseguido: "Cuando uno hace lo que hemos hecho hoy, uno puede dormir tranquilo". Sin embargo, admitió: "Estoy triste por los jugadores. También por los fans y el club, pero sobre todo por los jugadores". Y en declaraciones a la cadena pública alemana ZDF tras el partido, coincidió con Vidal: "Es fútbol, es así. Puedes perder haciendo todo mejor".
El presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, por su parte, mira ya a la final y adelantó que no da importancia a quién sea su rival en la final: "Hemos pasado ante el PSV, el Barcelona y el Bayern. El que venga nos da lo mismo", afirmó en declaraciones a Atresmedia. "Siempre digo que la Champions nos debe una y posiblemente sea esta. Sería nuestra primera Liga de Campeones y el cierre de una temporada maravillosa. El partido contra el Bayern ha sido una pre-final, igual de importante e interesante como la de Milán. A ver si podemos traer la Copa para verla bien. Que sea la primera y no la última", concluyó.
LGC (dpa / EFE)
Las mil caras de Uli Hoeness
Uli Hoeness fue liberado de prisión después de sólo 21 meses tras las rejas. Ahora , el héroe caído de 64 años está a punto de embarcarse en un nuevo capítulo en su vida aventurera y exitosa.
Imagen: Getty Images/Bongarts/A. Hassenstein
Libre de nuevo
Después de 637 días en prisión, Uli Hoeness, vuelve a ser libre. El expresidente del Bayern Múnich fue puesto en libertad después de cumplir sólo la mitad de los tres años y medio de prisión impuestos. En los medios había el rumor de que Hoeness planeaba celebrar su regreso a casa con una banda de música, pero logró escapar de los fotógrafos que lo estaban esperando a la salida de la cárcel.
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"¡Esto no se ha acabado!"
Esta afirmación hecha por Hoeness en la reunión anual del FC Bayern está siendo vista como un indicio de lo que pasará pronto. Primero dijo que tomaría vacaciones antes de anunciar sus planes a futuro. Aún en la cárcel, Hoeness se reunió con el director deportivo del Bayern Matthias Sammer y el presidente Karl-Heinz Rummenigge, lo que ha alimentado las sospechas sobre su posible regreso al club.
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Un día amargo
El 13 de marzo de 2014, Hoeness fue condenado por evasión de 28,5 millones de euros (31 millones de dólares) en impuestos y fue condenado a tres años y medio de cárcel. La fiscalía había pedido cinco años y seis meses para él. Hoeness empezó su condena el 2 de junio de 2014, logrando así la caída de una leyenda alemana de fútbol.
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Goleador
Gerd Müller conformó con Uli Hoeness una de las parejas de ataque más peligrosas de Europa. Pero con 27 años tuvo que parar debido a una lesión. Tres veces resultó campeón con el Bayern - en el campeonato y la Copa de Campeones de Europa. Y como jugador de la selección fue campeón europeo y campeón mundial.
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Persona de éxito
En 2013, el Bayern Múnich logra un triplete con la Liga, la Copa Alemana y la Champions-League. "Un año increíble. El más impresionante, la era más hermosa en 113 años del FC Bayern", dijo el entonces jefe del club.
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Presidente
El pico más alto de la carrera de Hoeness en el fútbol es seguido también por el pozo más bajo en su vida personal. En la reunión anual del Bayern Múnich, los miembros del club aplaudieron a su presidente y hasta le hicieron derramar unas lágrimas. El había descartado dimitir a su puesto.
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Una mano amiga
Hoeness dio siempre una mano a sus amigos que necesitaban ayuda. Clubes como el St. Pauli, e incluso rivales como el Borussia Dortmund conocen de su generosidad. También ha ayudado a ex compañeros como Gerd Müller, quien tuvo problemas con el alcohol, o como el jugador Sebastian Deisler, que sufría de depresión. También Dietmar Hamann, quien cayó tanto en el alcoholismo como en la ludopatía.
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¿Amigos políticos?
A políticos como la canciller alemana, Angela Merkel, les gustaba ser vistos junto a Uli Hoeness, pero desde que fue condenado por evasión de impuestos, se enfrió la relación amistosa. Merkel ha dicho que ella tiene un enorme respeto por el trabajo de caridad del expresidente del Bayern, pero que esto se ha visto empañado por una "triste faceta".
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Entusiasta del golf
En términos deportivos, Uli Hoeness, puede hacer algo más que patear un balón de fútbol, pues también tiene pasión por el golf. No hay nada mejor para el expresidente del Bayern que jugar una partida cerca del lago Tegernsee, a unos 50 kilómetros al sur de Múnich. Y quien sabe si, incluso, la transferencia de algún futbolista fue hecha durante un partido de golf.
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Hombre de familia
Por lo general, Uli Hoeness, protege mucho su vida privada. Con Susanne está casado hace 40 años y juntos tuvieron a Sabine y Florian. El exfutbolista disfruta de una vida tranquila en casa y no han habido escándalos conocidos que involucren a su familia. La familia Hoeness está unida haciendo frente al escándalo de evasión de impuestos.
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Sus propias salchichas
Hoeness, hijo de un carnicero, puso en marcha la fábrica de salchichas HoWe en Nuremberg en 1985. Actualmente es proveedor principal de empresas como Aldi y McDonalds. Con HoWe, Hoeness hizo gran parte de su riqueza, hoy es dirigida por su hijo Florian.
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Con mucha suerte
El 17 de febrero de 1982, Uli Hoeness fue el único sobreviviente de un accidente en un avión privado mientras se dirigía a un partido amistoso, como parte de la selección nacional. Las otras tres personas a bordo murieron. Hoeness, que dormía en el asiento trasero del avión cuando se estrelló, no recuerda nada sobre el accidente.
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Aguafiestas
En el año 2000, la pelea en el estudio del canal de televisión ZDF fue el comienzo de una rivalidad. El escándalo de drogas: Hoeness acusó al antiguo seleccionador nacional Christoph Daum de consumo de cocaína. Después de una muestra de cabello positiva, Daum tuvo que aceptarlo. Sobre la evasión de impuestos, Daum dijo: "Nunca me lo hubiera esperado, ojalá que Hoeness salga bien de este problema".
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Blanco de burlas
El escándalo de la evasión de impuestos fue un regalo del cielo para el carnaval alemán: en los carros alegóricos de la ciudad de Mainz, se mostraba a Hoeness caricaturizado con un balón en la cara, como símbolo de autogol.