Al mediodía de este 16 de diciembre la famosa “buena suerte” que usualmente acompaña en el fútbol a los alemanes estuvo ausente. En el sorteo realizado en la sede de la UEFA en Nyon, Suiza, para determinar los cruces en octavos de final de la Champions League a los equipos alemanes les correspondieron rivales difíciles. La previsión es que no todos van a llegar a los cuartos de final de la competencia.

Las oportunidades de los clubes de la Bundesliga de rebatir las dudas que el sorteo ha arrojado sobre sus posibilidades de aspirar al título, y situarse entre los ocho mejores de Europa pasan por Londres, San Petersburgo, Paris y Madrid.

Bayern - Arsenal

Al actual campeón de la Champions League le tocará de nuevo vérselas con un rival inglés En la fase de grupos el enemigo fue el Manchester City, que le propinó la única derrota en el escenario internacional al club de Múnich en todo lo que va corrido del 2013, y en octavos de final el turno es para el Arsenal de Londres.

El duelo entre los dos equipos también será el reencuentro de los jugadores alemanes con sus colegas de la selección nacional Per Mertesacker, Mesut Özil y Lukas Podolski. Ellos, con el equipo inglé, ya tuvieron que enfrentar a un club alemán en la fase de grupos de la Champions League, al Dortmund, que les superó en Londres, y encajó una derrota en casa.

En la temporada pasada el azar deparó también este partido en octavos de final. Entonces el Bayern, que había ganado 3-1 en Londres, estuvo a punto de ser eliminado del torneo del que a la postre fue campeón tras perder 0-2 en un dramático enfrentamiento en el Allianz Arena. Con esa historia fresca en la memoria, sumada a las estadísticas que dicen que de seis duelos entre ambos los alemanes apenas han ganado dos, no sorprende que en Múnich reine la precaución.

“Nos tocó el rival más duro que podíamos tener” comentó desde Marruecos el defensor central del Bayern Jerome Boateng a la página web del Bayern, mientras el directivo Karl-Heinz Rummenigge aseguró que “había otros contrincantes más fáciles, pero nos tocó Arsenal y ya no hay nada más que hacer, solo jugar bien y obtener resultados positivos”.

Dortmund – Zenit

La afición alemana no tiene buenos recuerdos de los enfrentamientos de sus equipos contra el Zenit San Petersburgo. En la temporada 2007/2008 el club ruso fue el encargado de eliminar en la semifinal de la Liga de Europa al Bayern Múnich tras propinarle una goleada (4-0) en su estadio, y arrancarle un empate (1-1) en el Allianz Arena. Un año más tarde, en la misma competencia, la victima fue el Stuttgart, al que venció en dos ocasiones por 2-1.

El equipo ruso nunca antes ha enfrentado oficialmente al Dortmund, que de los alemanes es quizás el que mejor suerte tuvo en el sorteo; al fin y al cabo el club de San Petersburgo ha hecho historia en esta versión del torneo al llegar a los octavos de final con apenas 6 puntos, menos que cualquier otro equipo antes. Además, el Zenit, cuyo director deportivo es un alemán que conoce muy bien la Bundesliga, Dietmar Beiersdorfer, ex funcionario del Hamburgo, estará en plena pausa invernal al momento de tener que enfrentar al actual subcampeón de la Champions League.

“Podemos vivir con el rival que nos deparó el sorteo, al fin y al cabo ya no hay partidos fáciles” dijo el gerente del Dortmund, Hans-Joachim Watzke, al conocer el nombre de su contrincante. El entrenador Jüurgen Klopp anunció que en las próximas semanas iniciará la preparación del partido. Para el club alemán la principal preocupación es el clima del invierno ruso.

Leverkusen – PSG

Los deseos se cumplieron: “Nos alegraría que el rival fuera el Paris Saint Germain. Contra este equipo nunca hemos jugado, el viaje a Francia sería una delicia para nuestros aficionados, y encontramos muy atractivo el desarrollo de ese club en los últimos meses. Especialmente interesante sería tener como enemigo y huésped a la estrella sueca Zlatan Ibrahimovic”, había dicho antes del sorteo el gerente del Leverkusen Michael Schade.

Exactamente así será. Los alemanes recibirán al nuevo poder (por lo menos económico) del fútbol europeo, lleno de estrellas como Ibrahimovic, Edison Cavani o Javier Pastore, y de dinero. Su presupuesto anual es de 430 millones de euros, y hace poco se aseguró un patrocinio de la oficina de turismo de Qatar que le garantizará 200 millones más al año hasta el 2016.

Desde esa perspectiva el director deportivo del club alemán, Rudi Völler, hizo el mejor resumen de lo que será para Leverkusen este partido de octavos de final: “tenemos una muy pequeña oportunidad de salir avante, intentaremos aprovecharla presentándonos decorosamente, pero es claro que no somos favoritos”.

Schalke – Real Madrid

Desde fuera de la cancha, el protagonista de este partido será sin duda la superestrella española Raúl, ícono del Real Madrid y exjugador del Schalke, cuya afición le tiene un gran cariño. Ya sobre el césped, la única alegría en el club de la Bundesliga es por la afición, que verá en el estadio de Gelsenkirchen a una de las principales figuras del fútbol mundial, el portugués Cristiano Ronaldo, rival de Alemania en Brasil 2014.

Por lo demás, no hay quien le de muchas posibilidades al Schalke de alcanzar la siguiente fase de la Champions League. “No nos pudo haber tocado peor. El partido será muy complicado, pero también un gran espectáculo para todos, en especial para mí que había soñado con algo así”, sostuvo el juvenil jugador del Schalke Julian Draxler.