América Latina: el efecto del coronavirus en el turismo
Judit Alonso
27 de septiembre de 2020
La crisis sanitaria mundial ha provocado la pérdida de millones de empleos y ha puesto contra las cuerdas a centenares de empresas en una región que tiene alta dependencia del sector turístico.
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Playas de ensueño, diversidad de paisajes y culturas, gastronomía y el calor de sus gentes, son algunos de los atractivos de América Latina y el Caribe que mueven a millones de personas al año a descubrir sus encantos. Según el Informe de Impacto Económico del Consejo Mundial del Viaje y el Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés), "en 2019, el sector de viajes y turismo generó 16,9 millones de empleos, es decir, 7,9 por ciento de la fuerza laboral total de Latinoamérica". "También contribuyó con 298 mil millones de dólares del producto interior bruto (PIB), lo que representó 8,1 por ciento para la economía en la región, un crecimiento de 1,6 por ciento respecto a 2018”, dijo a DW Gloria Guevara, presidenta de este foro para la industria del viaje y del turismo.
"En el Caribe, la actividad generó 2,8 millones de empleos, es decir, 15,2 por ciento de la fuerza laboral. Además, aportó 58 mil millones de dólares, lo que representa un 13,9 por ciento de la economía de la región”, agregó la que también fue Secretaria de Turismo de México de 2010 a 2012.
No obstante, el coronavirus ha sacudido el sector. "Se han perdido 5 millones de empleos en México, 4,5 millones en Brasil, casi un millón en Argentina y casi 700.000 en Colombia”, agregó Maribel Rodríguez, vicepresidenta de dicha organización. Además del fuerte peso de este sector, otros factores han agravado la situación. "Ha habido una gran cuarentena, algunos países han sobrepasado los cuatro meses, con lo cual el bloqueo ha sido mayor y se ha tardado muchísimo tiempo en que haya vuelos internos, no solamente internacionales”, consideró.
El duro golpe de la cancelación de vuelos
El turismo internacional es clave para algunos países centroamericanos, como Costa Rica. "Manejamos una cifra de 3.100.000 turistas, de los cuales un 75 por ciento son de Estados Unidos”, dijo a DW Fernando Madrigal, Presidente de la Cámara de Ecoturismo y Turismo Sostenible de Costa Rica (CANAECO).
"Unas 650.000 personas dependen del turismo, que representa el 8 por ciento del PIB del país”, explicó. No obstante, el cierre de aeropuertos provocó "pérdidas de alrededor de 2.500 millones de dólares para esta temporada”, detalló.
"En un solo día perdí 23.000 dólares en reservas”, dijo a DW Pippa Kelly, directora de Casitas Tenorio, que estima pérdidas económicas para su negocio de entre 80.000 y 150.000 dólares. "Antes de la pandemia, tuvimos un nivel de ocupación de 90 por ciento”, no obstante, con un 98 por ciento de clientes internacionales, "perdimos todas las reservas para marzo, abril y mayo”. "Teníamos la esperanza de recuperarnos para junio o julio, pero no fue así y ahora se están cancelando las reservas de noviembre y diciembre”, lamentó Kelly, que también es propietaria de este alojamiento situado a unos 10 kilómetros del Parque Nacional Volcán Tenorio.
"Estamos ubicados en una zona rural dependiente del turismo, la gente se está quedando sin dinero”, relató. En su caso, "estamos sembrando nuestra propia comida, produciendo nuestra propia carne y productos lácteos para sobrevivir y haciendo intercambios con los vecinos”, detalló. Igualmente, "vamos a tratar de abrir los fines de semana en octubre” para turistas nacionales, un público que normalmente representa el 14 por ciento del turismo en Costa Rica. "Ahora es el 100 por ciento, pero el turismo nacional no es suficiente para sostener las operaciones”, reconoció Madrigal.
Rumbo a la recuperación
El Consejo Mundial del Viaje y el Turismo realizó una serie de análisis y determinó que "el tiempo de recuperación promedio para el número de visitantes a un destino fue de 19,4 meses”, apuntó Guevara. No obstante, "con la respuesta y el manejo adecuados podrían recuperarse en tan solo 10 meses”, agregó.
Para reactivar la actividad del sector, la organización ha puesto en marcha un distintivo que identifica las destinaciones seguras para viajar. La iniciativa cuenta con más de un centenar de destinos, entre los que se encuentran, además de Costa Rica, "muchas regiones de México, algunos lugares de Brasil, Colombia, algunas municipalidades de Ecuador, Panamá, Perú y Paraguay. Estamos trabajando con países como Argentina, Guatemala y Honduras para que lo tengan”, detalló a DW Rodríguez.
Asimismo, el foro aboga por la eliminación de cuarentenas, el seguimiento de casos y realización de pruebas rápidas "entre ciudades importantes de diferentes corredores económicos a nivel global, por ejemplo, entre Bogotá y Miami, y entre ciudades importantes de Latinoamérica, con el objetivo de reactivar el turismo de negocios”, puntualizó Guevara.
Madrigal estimó, en tanto, que la apertura definitiva en Costa Rica se hará en enero del próximo año. "Vamos a tardar dos años a recuperar la tasa de los 3 millones de turistas”, adelantó. Sin embargo, arrojó un rayo de luz. "La gente ha durado mucho tiempo encerrada en sus casas y lo que quiere es ver naturaleza. Somos un país que va a salir adelante por su sostenibilidad”, aseguró. (dzc)
Costa Rica, un pequeño país con una gran biodiversidad
Costa Rica se encuentra entre los 25 países más biodiversos del mundo. DW repasa su flora y fauna, que se han convertido en una de sus mayores fuentes de riqueza por la apuesta del país por el desarrollo sostenible.
Imagen: DW/J. Alonso Gonzalbez
Uno de los 25 países más biodiversos del planeta
Con tan solo 51.100 km² de superfície, en este pequeño territorio habitan más de 500.000 especies, lo que representa el 6 por ciento de la biodiversidad mundial. Se estima que es el país con mayor cantidad de especies por unidad de área, con 1,8 especies por km². Quizás el encontrarse en la zona intertropical de América explique esa variedad.
Imagen: DW/J. Alonso
Concentración de biodiversidad
Se estima que los países más cercanos al Ecuador son los más biodiversos. Un ejemplo de ello es que mientras un área de 1.200 km² de la selva tropical del centro de Costa Rica alberga unas 6.500 especies de plantas (foto), la selva Lacandona del estado mexicano de Chiapas (en un área de 9.600 km²) cuenta con unas 3.000 especies de plantas.
Imagen: DW/J. Alonso
Manteniendo el patrimonio natural
La primera reserva natural del país fue Cabo Blanco, fundada en 1963, no obstante, no fue hasta 1970 cuando se creó la red de parques nacionales. Desde 1994 está admimistrada por el SINAC, un departamento del Ministerio del Ambiente y Energía encargado del mantenimiento de todas las áreas protegidas del país. Así, gestiona 27 parques nacionales y varias reservas biológicas y forestales.
Imagen: DW/J. Alonso Gonzalbez
De sectores productivos a áreas protegidas
Aunque al principio supuso una apuesta arriesgada, "nuestros parques naturales son probablemente uno de los mayores recursos que tenemos a nivel de atracción turística", recordó la primera dama Claudia Dobles en la conferencia P3, "y la atracción turística es uno de los generadores más grandes, no solamente a nivel de generación de oportunidades de empleo, sino también de producto interno bruto".
Imagen: DW/J. Alonso Gonzalbez
Corredores biológicos, más biodiversidad de lo habitual
Por otro lado, según el Sistema Nacional de Áreas de Conservación, Costa Rica cuenta, además, con 44 corredores biológicos, que representan cerca del 33% del territorio continental. De estos, el 59% presentan un índice de biodiversidad mayor a la media. No obstante, actualmente se mantiene el 26% del territorio de ecosistemas terrestres protegidos sin disminución.
Imagen: DW/J. Alonso
Insectos, los más diversos
De este medio millón de especies, un poco más del 70% (360.000) son diferentes especies de insectos. La diversidad de mariposas de Costa Rica representa el 90% de todas las mariposas de Centro América, el 66% de las especies del neotrópico y el 18% de todas las especies del planeta. La morfo azul (Morpho peleides limpida) es una de más reconocible de todas cuando extiende sus alas azules (foto).
Imagen: DW/J. Alonso
Hongos, detrás de los insectos
Tras los insectos, el grupo más numerosos son los hongos (foto), importantes en el mantenimiento de los ecosistemas, ya que permiten el reciclaje de gran cantidad de desechos orgánicos, que luego serán utilizados por otros organismos, como plantas y animales. Las bacterias y otros invertebrados, como arañas, crustáceos (camarones, langostas y cangrejos), entre otros, siguen el orden de la lista.
Imagen: DW/J. Alonso Gonzalbez
Vertebrados, los más investigados
Aunque solo hay identificadas unas 91.000 especies de las 500.000, los grupos que más se conocen en el país son las plantas y los vertebrados: anfibios, reptiles, aves (foto), mamíferos y peces. En estos grupos se han descrito cerca del 83 y 81 % de las especies estimadas, respectivamente. Asimismo, hay que destacar que existe un mayor conocimiento de las especies terrestres que las marinas.
Imagen: DW/J. Alonso
La rana de ojos rojos, la más popular
Conocida como "Agalychnis callidryas", se caracteriza por el color rojo de sus ojos. Este anfibio tiene pupilas muy estrechas que se extienden verticalmente. Aunque la mayoría tiene el cuerpo de color verde brillante, también presenta franjas amarillas y azules a los lados y sus extremidades suelen ser anaranjadas. Aunque no está considerada en peligro, el estado de su hábitat es preocupante.
Imagen: DW/J. Alonso
Conservación de la flora y fauna
Costa Rica también es conocida por sus monos (foto) y osos perezosos, pero son solo una fracción de los mamíferos que contiene el país. Costa Rica estableció una estrategia nacional de biodiversidad, cuyas metas rastrean los avances del país respecto a su Política Nacional de Biodiversidad (2015-2030) y el estado de la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad nacional.
Imagen: DW/J. Alonso Gonzalbez
Protección del territorio
Según los resultados del Sexto Informe Nacional sobre el Estado de la Biodiversidad (6IN), que se presentó en mayo de 2019 y recopila el estado de la cuestión entre 2014 y 2018, el país aumentó a 26,51% la superficie terrestre protegida. Asimismo, incrementó a 2,75% su superficie marina, con la creación de dos nuevas áreas protegidas en 2017 y 2018.
Imagen: DW/J. Alonso Gonzalbez
Diversidad de ecosistemas en peligro
No obstante, según este documento, el estado de los manglares (foto), el bosque húmedo tropical y la parte marino-costera presentan una pérdida de cobertura o deterioro. El estado de conservación y cobertura ha disminuido en estos ecosistemas. Según el informe, las áreas de Guanacaste, Huetar Norte y Tortuguero son las más afectadas.
Imagen: DW/J. Alonso Gonzalbez
Sedimentación y contaminanción, amenazas de los ríos
Asimismo, el reporte apunta que aunque los ríos costarricenses presentan afectaciones por sedimentación, contaminación y otras vinculadas con los efectos esperados del cambio climático, en general la tendencia de estos es a mantenerse. En el caso de los pantanos, se presentan procesos de desacación y sedimentación en la zona norte y Caribe norte.
Imagen: DW/J. Alonso
Humedales en riesgo
La contaminación también es un riesgo para los 350 humedales (foto) que existen en Costa Rica y que cubren aproximadamente un 7% del territorio nacional. De estos, 11 se han identificado como "Sitios Ramsar", de importancia a escala mundial, debido a que son sitios representativos o raros y proporcionan importantes funciones ecosistémicas que aseguran su diversidad biológica.
Imagen: DW/J. Alonso Gonzalbez
Información al alcance de todos
Además de la publicación del Sexto Informe Nacional sobre el Estado de la Biodiversidad, el país lanzó BioCosta Rica, una plataforma que pretende mejorar la información disponible sobre esta cuestión. Así, su objetivo es poner a disposición del público y del mundo información sobre su biodiversidad y los avances logrados para su conservación y uso sostenible.