El futuro de la catedral de Notre Dame es incierto
Sven Töniges
24 de junio de 2019
Más de dos meses después del incendio de la catedral parisina de Notre Dame, no está claro cómo se procederá a la reconstrucción. El 26 de junio la Asamblea Nacional vuelve a debatir el tema.
Publicidad
El arzobispo de París lleva un casco blanco en la cabeza cuando comienza la misa el 16 de junio de 2019. Los monaguillos y la congregación también usan cascos de seguridad. Los focos de construcción iluminan el altar con una luz brillante. En la transmisión de televisión se puede ver el cielo por encima del altar.
Este fue el marco en el que Michel Aupetit, arzobispo de París, celebró su primera misa en la Catedral de Notre Dame, exactamente dos meses después de que un gran incendio destruyera el techo y la aguja central.
Peligro de colapso
Los expertos siguen afirmando que la iglesia corre peligro de derrumbarse. Una opinión que comparte también la coordinadora de la ayuda alemana para la reconstrucción de Notre Dame, Barbara Schock-Werner. Según ella, todavía se encuentran muchas vigas carbonizadas y piedras en la nave central. La sillería del coro, empapada por el agua que se usó para apagar el fuego, se ve amenazada por el moho. Como todo el interior, el órgano está completamente lleno de hollín.
El principal obstáculo para el trabajo de limpieza, sin embargo, son las toneladas de plomo fundido del techo, que ahora contaminan el interior. Debido al peligro de envenenamiento por plomo, Schock-Werner informó que se está intentando salvar los escombros de la catedral con pequeñas excavadoras teledirigidas. Pero solo cuando la iglesia haya sido completamente limpiada y asegurada, podrá comenzar la reconstrucción.
Un exgeneral como gerente de la reconstrucción
La reconstrucción debería completarse en cinco años. Eso es lo que el Presidente Emmanuel Macron prometió a los franceses en abril. Este ambicioso calendario está ahora en manos del general de cinco estrellas Jean-Louis-Georgelin. El exmilitar es desde abril el encargado especial para la reconstrucción de Notre Dame.
Philippe Villeneuve, el arquitecto jefe de la reconstrucción de la catedral, se distanció de la apretada agenda de Emmanuel Macron en una extensa entrevista con "Le Figaro". El presidente había pedido una "reconstrucción ingeniosa", una alianza de tradición y modernidad y un "atrevimiento respetuoso".
Estos eslóganes animan ahora el concurso nacional de arquitectura, que el gobierno ya había lanzado en abril. A finales de junio se presentaron ideas para el nuevo diseño del techo y de la aguja central. Poco a poco se fueron conociendo propuestas muy poco convencionales y ambiciosas. El arquitecto Vincent Callebaut piensa en un invernadero. Se imagina cultivar 21 toneladas de frutas y verduras al año por encima de París. El arquitecto de Estocolmo Ulf Mejergren quiere convertir la aguja central de la iglesia en una torre de saltos y propone construir una gran piscina en el tejado de Notre Dame.
Según una encuesta publicada en abril por el instituto de sondeos YouGov, el 54% de los encuestados franceses estaban a favor de una reconstrucción. Mientras tanto, el arquitecto jefe Philippe Villeneuve muestra cansado de todas las "enormes tonterías" que escucha sobre la reconstrucción.
En una entrevista con "Le Figaro", se remitió a las exigencias de la Carta de Venecia para la Conservación de los Monumentos Históricos de 1964, que Francia debe cumplir. En resumen, según Villeneuve: "La aguja central debe ser reconstruida de forma idéntica".
La aguja central, que fue destruida en el incendio y diseñado por Eugène Viollet-le-Duc en el siglo XIX, "se insertó de manera atemporal" en el diseño del templo. Esta silueta debe ser reconstruida, según Villeneuve. El conflicto entre las ideas atrevidas y el respeto ante el diseño original en la reconstrucción de la catedral sigue sin resolverse.
(gg/cp)
Deutsche Welle es la emisora internacional de Alemania y produce periodismo independiente en 30 idiomas. Síganos en Facebook | Twitter | YouTube |
Las catedrales de York y Notre Dame, unidas por el fuego
Los templos de York y Notre Dame tienen mucho en común. También los incendios. La catedral inglesa podría servir de modelo a la hora de reconstruir la parisina.
Imagen: Getty Images/AFP/O. Scarff
Catedrales hermanas
La catedral de York podría ser hermana de la de Notre Dame. Son parecidas y tienen casi la misma edad. Además, a ambas les une un destino parecido: mientras que parte de Notre Dame ardió este 15 de abril de 2019, la de York se vio en llamas cuatro veces. Por última vez en 1984.
Imagen: Getty Images/AFP/O. Scarff
Un rayo en el corazón de la catedral
El 9 de julio de 1984, un rayo cayó sobre la catedral de York y desencadenó un incendio, que pudo ser sofocado varias horas después. El fuego destruyó toda la cubierta de la parte sur del transepto. También la famosa vidriera de las rosas fue víctima de las llamas. El calor destruyó 7.000 mosaicos de cristales de colores.
Imagen: picture-alliance/empics/R. Bagnall
Eterna reconstrucción
En la actualidad, numerosos operarios continúan con la reconstrucción de la York Minster. Esto se debe también al tamaño del edificio. La catedral e iglesia metropolitana de San Pedro en York, su nombre oficial, es la mayor iglesia medieval de Gran Bretaña.
Imagen: Getty Images/AFP/O. Scarff
La historia plasmada en piedra
Para la reconstrucción de la catedral de Notre Dame podría ser interesante el hecho de que la York Minster fue construida con los mismos materiales. La rehabilitación del templo en el noreste de Inglaterra podría servir de modelo para las labores de reconstrucción de la famosa catedral de París.
Imagen: Getty Images/AFP/O. Scarff
Ardua labor
Cada figura se talla laboriosamente a mano. El material es piedra arenisca. En todas las grandes catedrales, la reconstrucción es una batalla eterna contra la destrucción. Por eso, se buscan especialistas, buenos canteros.
Imagen: Getty Images/AFP/O. Scarff
Huellas en las herramientas
Las herramientas de los canteros tampoco han variado en los últimos siglos. Todavía se sigue tallando en piedra con cincel y mazo, lo que deja huellas en las herramientas.
Imagen: Getty Images/AFP/O. Scarff
Más detalles
Cuanto más fino sea el contorno, más pequeñas son las herramientas usadas. Para que la nueva escultura, como la de la imagen, obtenga una cabellera tan detallada, el escultor requiere muchas horas de trabajo.
Imagen: Getty Images/AFP/O. Scarff
Esperando a ser colocadas
Estas piezas de un capitel ya están listas para ser colocadas. Solo hay que ajustarlas en el lugar adecuado. Con el paso del tiempo, la piedra se oscurecerá por la polución.
Imagen: Getty Images/AFP/O. Scarff
Con andamios
Entretanto, la cubierta del transepto se reconstruyó y los arcos vuelven a lucir en todo su esplendor. La fachada sur de la catedral de York sigue, sin embargo, tapada por los andamios, incluso treinta años después del terrible incendio.
Imagen: Getty Images/AFP/O. Scarff
Bocetos para la reconstrucción
El jefe de los canteros, John David, trabaja en el boceto de una ventana. Tomando en cuenta antiguas fotos y documentos, él y su equipo reconstruyen la forma original de los arcos.
Imagen: Getty Images/AFP/O. Scarff
Como nueva, con casi 550 años
En la catedral de York se trabajó 250 años, hasta que se inauguró en 1472. A pesar de que en el templo hubo cuatro incendios, el edificio tiene una imagen reluciente visto de frente. Para la catedral de Notre Dame también cabe la esperanza de que algún día se vea de nuevo impecable.