En el documento, acordado tras largas sesiones nocturnas de negociación, los Veinte se manifiestan a favor de "un marco favorable para todas las partes en el ámbito del comercio y las inversiones".
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No se ha emitido aún el comunicado oficial, pero la filtración llegó a las agencias de noticias. Los Veinte principales países industrializados y emergentes alcanzaron hoy (08.07.2017) un acuerdo sobre el espinoso tema del libre comercio y en contra el proteccionismo, reconociendo, sin embargo, "el papel de los instrumentos legítimos de defensa en el ámbito comercial". Con esta fórmula se podrá evitar el fracaso de la iniciativa y posibilitar que salga adelante un comunicado final al cierre de la cumbre que se celebra en Hamburgo, como es habitual en este tipo de foros.
En el documento, acordado tras largas sesiones nocturnas de negociación, los Veinte se manifiestan a favor de "un marco favorable para todas las partes en el ámbito del comercio y las inversiones". El viraje proteccionista del presidente estadounidense, Donald Trump, y su postulado de "Estados Unidos primero" había puesto en duda la posibilidad de llegar a un acuerdo en defensa del libre comercio.
Sin embargo, todavía no se llegó a un consenso en el conflictivo tema del cambio climático, ante la pretensión de Estados Unidos de mantener el uso de las energías fósiles en el mundo, consideradas las principales causantes del calentamiento global. Este punto es polémico porque, si se mantiene el uso de este tipo de energía, no se podrán alcanzar los objetivos del Acuerdo del Clima de París, que pretende limitar el calentamiento del planeta a un máximo de dos grados Centígrados.
MS (dpa/dlf)
G20: las protestas son parte de la cumbre
Cada vez que se reúnen jefes de Estado y de Gobierno, así como ministros, las protestas no se hacen esperar. Los críticos de la globalización aprovechan las cumbres para desahogarse.
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El comienzo: la batalla de Seattle
Ya pasaron casi 20 años desde la llamada “batalla de Seattle” (1999). Es considerada como el comienzo no oficial de la nueva ola del movimiento antiglobalización en Estados Unidos. En aquel entonces no se pudo llevar a cabo la conferencia de los ministros de Economía y Comercio de la Organización Mundial del Comercio (OMC): miles de opositores a la globalización se enfrentaron a la policía.
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Finalmente unidos
En el marco de las manifestaciones de Seattle, se unieron por primera vez los movimientos de trabajadores y de defensores del medio ambiente. Juntos, ambos grupos protestaron contra la Organización Mundial del Comercio y los efectos negativos de la globalización. Hubo numerosos detenidos.
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Londres: carnaval contra el capitalismo
Una de las primeras manifestaciones antiglobalización a nivel internacional fue el llamado “carnaval contra el capitalismo” del 18 de junio de 1999. Se realizó paralelamente a la cumbre del G8 en Colonia. Sobre todo en Londres y Eugene, en el estado de Oregón (EE.UU.), las fiestas de protesta llamaron la atención.
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Génova: escalada y parteaguas
Durante la cumbre del G8 en 2001, miles de personas protestaron bajo el lema de “Otro mundo es posible” en la ciudad italiana de Génova contra el desperdicio de recursos, la desnutrición y la desigualdad entre pobres y ricos. Lamentablemente las manifestaciones no fueron pacíficas. Fueron el comienzo de una nueva era de protesta con gases lacrimógenos, coches incendiados y cócteles molotov.
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La cosa se pone seria
20.000 policías intentaron controlar a los manifestantes. En vano. El triste balance: un sinfín de heridos, un muerto. El italiano Carlo Giuliani recibió un disparo en una pelea callejera. Desde entonces, las cumbres G8 y G20 se realizan casi siempre en lugares alejados y fáciles de asegurar.
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Garmisch-Partenkirchen: tranquilo e inaccesible
En 2015, la cumbre del G7 se celebró en el Castillo de Elmau, en Baviera. Masivas medidas de seguridad acompañaron el encuentro: las tapas de los sumideros en las calles fueron selladas con soldadura y se desmontaron los buzones. Geográficamente, la sede de la cumbre, a mil metros sobre el nivel del mar, era prácticamente inaccesible. ¿Y las temidas protestas violentas? No hubo.
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¿Una cumbre climática?
En la cumbre del G7 en Elmau se discutieron muchos temas ecológicos, como la protección de los mares. Los participantes se comprometieron a intensificar y mejorar la lucha contra la polución de los mares y acordaron un plan de acción.
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Hamburgo: ¿una sede peligrosa?
El hecho de que el G20 de 2017 se realice nuevamente en el centro de una ciudad, en el barrio Schanzenviertel de Hamburgo, es un paso valiente por parte de los organizadores. 20.000 agentes de seguridad velarán por la seguridad. En esta edición, se decidió que la ciudad portuaria de Hamburgo acogerá el evento para resaltar su papel como “puerta al mundo”. Estos activistas acampan en los parques.
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La cumbre alternativa
“El G20 defiende un sistema, que profundiza la desigualdad social”, dicen los organizadores de la “cumbre de solidaridad global”. Ésta se celebra poco antes del G20 en Hamburgo. En este foro, críticos del capitalismo y activistas del medio ambiente buscan alternativas a la política del G20, que, en su opinión, no puede solucionar problemas como el cambio climático, las guerras y el hambre.
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Arrancan las protestas
En Hamburgo, ya comenzó la ola de protestas. En el puerto, activistas de Greenpeace cazaron el buque de carguero de carbón chino “Golden Opportunity”. Portaban pancartas y escribieron “End Coal” (pongan fin al carbón) sobre el costado del buque, antes de que la policía marítima confiscara sus barcos neumáticos.