El largo camino hacia Europa
15 de octubre de 2003Unas 355 empresas latinoamericanas estuvieron presentes en la edición 2003 de la Feria de la Alimentación, Anuga. El máximo evento del sector alimenticio cerró sus puertas con un balance cauteloso. Pese el incremento de 2,5% en el número de visitantes y potenciales compradores –168.000- el sector alimenticio alemán sigue deprimido por la recesión que registró su economía desde el 2002.
Alemania, la principal economía europea y puerta de entrada a los mercados del centro y este de Europa atrae a empresarios de todo el mundo. Por su volumen en el comercio mundial, Alemania ocupa el segundo lugar después de Estados Unidos y delante de Japón. El país promete acceso al mercado interno de la UE de 375 millones de habitantes y en un futuro no muy lejano, con la Europa de los 25, será de más de 500 millones de consumidores.
El caso mexicano
Con la entrada en vigor del Tratado de Libre comercio entre México y la UE, los productos mexicanos se ven beneficiados de una reducción arancelaria en una serie de productos. Aún así las exportaciones mexicanas a Alemania dejan mucho que desear. En el 2001, México ocupó el lugar 42 por su volumen de exportaciones a Alemania, un escaso 0,3% con respecto al volumen total de las importaciones alemanas, que alcanzaron ese año un valor de más de 550.000 millones de euros. Dentro del contexto latinoamericano, México es mejorado solo por Brasil, que ocupa el ranking 26 con una participación del 0,7% del total de las importaciones germanas. Argentina ocupa el lugar 52 y Chile el 57, con una participación del 0,15% y 0, 12% respectivamente.
Nuevo intento en Europa
Históricamente México exporta hacia Estados Unidos, país destino de más del 80% de los productos mexicanos. En un esfuerzo por orientar la oferta exportable de pequeñas y medianas empresas hacia el mercado de la UE, estuvo presente en la Anuga una ‘incubadora’ mexicana de exportación que reunió bajo un mismo stand a 30 micro y pequeñas empresas. "Tenemos una gran cantidad de pequeñas y medianas empresas con buenos productos, que sin embargo no resultan competitivos debido a que no hay quien les compre todo un contenedor", dice la representante de la comercializadora Difoce, María Elena Torres Chimal.
Difoce promueve la presencia de la agroindustria mexicana en Europa y ha abierto ya una bodega en el puerto de Hamburgo. "Queremos que este proyecto perdure, que las incubadoras vayan creciendo dando cabida a cada vez más empresarios", dice la directora de oferta exportable de la Secretaría de Economía de México, Esperanza Gómez Mont. El apoyo federal representa hasta el 60% de los costos en los que incurre la empresa en su esfuerzo exportador. Actualmente hay siete incubadoras, dos de ellas en Europa.
La incubadora agroalimentaria pone especial énfasis en la promoción de frutas exóticas y vegetales étnicos como mango, aguacate, guanábana, plátano, nopal y la flor de calabaza, entre otros. Otro apartado lo integra la promoción de alimentos procesados vinculados directamente con la comida mexicana, como las salsas y el mole. También se quiere dar un impulso a los productores de orgánicos, como miel, café y productos frescos.
Aguacates y cilantro
En Alemania abunda el aguacate español e israelí, ¿por qué no hay aguacate mexicano? "Es una pena porque no tenemos ninguna barrera, que en Estados Unidos si tenemos en forma de cuota", dice Torres Chimal. "El mayor problema es la logística. Las zonas de mejor cultivo se encuentran en la zona del pacífico y para transportarlo hacia las costas del Atlántico, los productores se enfrentan altos costos y retrasos que encarecen el producto", señala. Entre las micro-empresas mexicanas presentes en la Anuga, se encuentra una empresa que quiere exportar hierbas deshidratadas étnicas, -cilantro, epazote y huauzontle entre otras- una idea novedosa que requiere de una labor adicional de difusión pues pocos europeos conoce la manera de utilizar estos ingredientes básicos de la cocina mexicana.