Contemplar el legado de la legendaria escuela de diseño Bauhaus y de los arquitectos modernos del siglo XX es el pretexto ideal para recorrer Alemania en 2019. Permítanos recomendarle una ruta con hitos memorables.
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El rastro de los modernos
Contemplar el legado de la legendaria escuela de diseño Bauhaus y de los arquitectos modernos del siglo XX es el pretexto ideal para recorrer Alemania en 2019. Permítanos recomendarle una ruta con hitos memorables.
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La casa Schminke (Löbau, Sajonia)
La residencia del empresario Fritz Schminke es un emblema del movimiento Neues Bauen, que prosperó en el primer tercio del siglo XX y se vio influenciado por las enseñanzas impartidas en la Bauhaus. Esta obra terminó de ser construida por el arquitecto Hans Scharoun en 1933. Aunque de momento está siendo restaurada, la casa puede ser visitada y hasta alquilada por una noche por 250 euros.
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La casa Schulenburg (Gera, Turingia)
Henry van de Velde concibió el cuerpo y el alma de esta vivienda, desde su espléndido jardín y su austera pero imponente fachada hasta su diseño interior. Ni siquiera la vajilla de la casa escapó a su imaginación. El centenario de la Bauhaus será conmemorado en este edificio con tres exhibiciones extraordinarias.
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El Hufeisensiedlung (Britz, Berlín)
El Hufeisensiedlung es un asentamiento de 2.000 viviendas sociales que fue reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2008. Su arquitecto, Bruno Taut, otro representante del movimiento Neues Bauen, diseñó urbanizaciones similares para la empobrecida Alemania de postguerra, esmerándose en honrar el derecho de sus habitantes a una infraestructura funcional y estéticamente agradable.
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Las casas de la Böttcherstraße (Bremen)
Esta fachada engaña, pero ella también fue concebida con criterios modernos: en el casco antiguo de Bremen, un comerciante de café compró siete casas y encargó la reconstrucción de seis de ellas. El resultado: entre 1922 y 1931, esa cuadra se llenó de edificios a medio camino entre la arquitectura gótica, el expresionismo y el art deco.
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La Hutfabrik (Luckenwalde, Brandeburgo)
Una obra precursora de las que más tarde caracterizarían al movimiento Neues Bauen es la antigua fábrica de sombreros de Luckenwalde, diseñada por Erich Mendelsohn, conocido representante de la arquitectura expresionista. El techo de la fábrica no era sólo un atrevimiento, con su forma de sombrero, sino también una innovación, por incluir un sistema de ventilación sin precedentes.
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La Torre Einstein (Potsdam, Brandeburgo)
Otro legado de Erich Mendelsohn es esta torre de talante expresionista: un observatorio erigido entre 1920 y 1922 que el científico Albert Einstein describió alguna vez como “orgánico”. El Premio Nobel quería que varios astrónomos pusieran a prueba su teoría de la relatividad desde esta construcción. Quienes deseen conocerla pueden solicitar una visita guiada el primer sábado de cada mes.
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El Museo Grassi (Leipzig, Sajonia)
Esta edificación es considerada una obra de arte integral, no sólo porque acoge a tres museos –uno de artes aplicadas, uno de música y uno de etnografía–, sino también porque en sus formas se mezclan armoniosamente los estilos arquitectónicos más diversos, desde los cultivados por los constructores de castillos hasta el de la Bauhaus, pasando por influencias del art deco y de la Nueva Objetividad.
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Centro Municipal (Magdeburgo, Sajonia-Anhalt)
Este edificio fue construido con motivo de la Exposición Alemana de Teatro de 1927. El Gobierno local quería presentar a Magdeburgo como la ciudad ideal para celebrar eventos culturales y ferias de gran escala. El alcalde de la época pidió una “edificación monumental y majestuosa”. Esta obra fue dotada con un sistema mecánico singular para variar la disposición de su sala de teatro.
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La Tetera de Warnemünde (Rostock, Mecklemburgo-Pomerania Occidental)
Esta obra, icono del paseo marítimo de Rostock, fue inspirada por el culto a las formas básicas de la Bauhaus. Ulrich Müther construyó la Tetera de Warnemünde en 1968 y erigió otros setenta edificios similares a lo largo de su vida, empeñado en agotar las posibilidades arquitectónicas que ofrecen las superficies doblemente arqueadas, apreciadas por la estabilidad que les dan a las estructuras.
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La Feria de Leipzig (Sajonia)
La sede de la Feria de Leipzig se asemeja mucho a la arquitectura de vidrio del siglo XIX. Su construcción, a cargo del estudio Gerkan, Marg & Asociados, fue terminada en 1996, dejando a la vista que la influencia del modernismo no ha menguado con el tiempo.
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En inglés, el credo más trascendente de los modernos tiene una ligereza incomparable gracias a su poética aliteración: "form follows function”. Pero la esencia de esa tesis –que la forma deriva de la función– tiene un enorme valor, independientemente del idioma en que se explique. Aplicado inicialmente al diseño gráfico, industrial y arquitectónico, ese criterio marcó el primer tercio del siglo XX, después de la Primera Guerra Mundial. La escuela Bauhaus, Neues Bauen, Nueva Objetividad y otros movimientos representaron un punto de inflexión en la manera de construir mensajes, mecanismos y edificios. En 2019, con motivo del primer centenario de la Bauhaus, la sociedad cooperativa creada en torno a la escuela promueve una ruta turística por Alemania (Grand Tour der Moderne) para que más gente conozca el legado de los arquitectos modernos. En el sitio web de la Asociación Bauhaus hay mayor información al erspecto.