Hasta el momento, el Mundial de Qatar no ha provocado euforia entre los televidentes de Alemania. Al menos eso es lo que muestra un vistazo a los actuales índices de audiencia de la televisión. Los "ratings" han estado en un nivel moderado y ni siquiera el partido inaugural de la selección alemana alcanzó la marca de 10 millones de espectadores en la emisora pública ZDF.

En total, 9,23 millones de personas presenciaron la derrota  2-1 contra Japón  el miércoles por la tarde. Y aunque esto corresponde a una cuota de mercado del 59,7 por ciento, las cifras están muy por debajo de los valores registrados en pasadas Copas del Mundo.

Números muy inferiores a los de Rusia 2018

Para el Mundial de Qatar, "la cuotas de espectadores en la televisión todavía está por debajo de los valores de 2018, que tuvieron un muy buen nivel", dijo el ejecutivo de la cadena para la Copa del Mundo, Christoph Hamm, a la agencia deportiva alemana SID. Por otro lado, "el número de vistas de las transmisiones en vivo del evento (streaming) aumentó considerablemente". Algunos espectadores quizá presenciaron el partido desde sus lugares de trabajo debido a la hora del partido (14:00 tiempo de Alemania).

Crece el streaming en directo

Hace cuatro años, la derrota contra México en Moscú fue vista por 25,97 millones de espectadores en Alemania (cuota de mercado: 81,6 por ciento) en la cadena ZDF.

Las razones de la baja, cuatro años después, son complejas. Además de la inusual época del año, que en realidad representa un mayor consumo de televisión en promedio, las cuestiones políticas eclipsan el evento deportivo.

"Los primeros tres días de la Copa del Mundo en ZDF se caracterizaron por el acto de equilibrio entre el análisis sobre los primeros juegos del grupo y los problemas críticos que rodean a este torneo", dijo Hamm. La discusión sobre el brazalete "One Love" aparentemente también causó aún mayor descontento contra Qatar entre muchos fanáticos alemanes que ya eran críticos de esta Copa del Mundo.

Los índices podrían bajar aun más

Los bajos índices de audiencia son evidentes. Solo el partido inaugural entre los anfitriones de Qatar y Ecuador  rompió la marca de los 5 millones de espectadores en los primeros cuatro días del Mundial. Incluso el debut de los campeones defensores de Francia contra Australia en horario de máxima audiencia atrajo solo a 4,96 millones de aficionados frente a los televisores. Esto fue casi tres millones menos que el juego con el alcance más débil al mismo tiempo en 2018.

Si selección alemana resulta eliminada en la fase de grupos de Qatar 2022 o consigue un mal resultado contra España, el próximo domingo, cualquier euforia mundialista entre los espectadores alemanes, por pequeña que esta fuera, podría extinguirse del todo.