El oculto costo medioambiental de la extracción de arena
Martin Kübler
26 de marzo de 2024
Fuertes tormentas invernales afectaron las playas del norte de Alemania. Se necesitará arena fresca para reconstruir el litoral, pero la demanda de este recurso puede causar otros problemas.
La playa de Dangast en el Mar del Norte de Alemania es un territorio de marismas, importantes para el ecosistemaImagen: Mohssen Assanimoghaddam/dpa/picture alliance
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Las zonas costeras de islas como Sylt, Borkum y Norderney, a las que acuden millones de turistas, tendrán que ser reconstruidas antes de las vacaciones de verano.
Para ello se trasladarán cargas de arena para reconstruir las costas afectadas. El gobierno de Baja Sajonia ya ha anunciado que aportará hasta 700.000 euros para reforzar la principal fuente de ingresos de la región.
¿Perjudica la reconstrucción de las playas el medio ambiente?
La arena para reponer las playas del mar del Norte no suele venir de muy lejos. En años anteriores, se ha conseguido en otras costas o en islas vecinas. La isla de Sylt, por ejemplo, lleva 40 años rellenando sus playas con arena del fondo marino.
Este método es mejor que utilizar arena traída del otro rincón del mundo, pero también tiene consecuencias para los ecosistemas costeros y fluviales. La extracción de toda esa arena puede destruir la vida submarina y alterar los lugares de anidamiento de aves y otros animales. Al retirar arena del fondo oceánico, la arena de la costa suele alejarse de la orilla para rellenar el hueco dejado antes.
Sacar arena del fondo del mar puede hacer reducir la playa aún más
Es posible obtener la arena de otros lugares para evitar el impacto ambiental del dragado en alta mar. Ciudades como Manila (Filipinas) y Miami (Estados Unidos) utilizan arena procedente de minas, canteras o ríos y lagos. Sin embargo, los expertos han advertido que es vital utilizar arena que se acerque a la composición de la playa en cuestión para evitar posibles elementos contaminantes y proteger la flora y la fauna que se han adaptado a un tipo de arena específico.
Dunas de Erg Chebbi en Marruecos. El desierto del Sahara es una mar de arena, pero su contextura impide su uso en la construir edificiosImagen: W. G. Allgoewer/blickwinkel/picture alliance
¿Por qué la arena es un recurso tan importante?
Según el programa de las Naciones Unidas para el medio ambiente, la arena es, después del agua, el segundo recurso más utilizado de la Tierra. Esta no solo se necesita para reconstruir playas, también es vital en la construcción, y se utiliza para fabricar vidrio y hormigón o para edificar nuevas construcciones en grandes metrópolis donde el espacio es escaso.
La sílice (un tipo de arena) se utiliza para fabricar silicio, un ingrediente clave en circuitos y microchips.
Según Statista, Alemania importa grandes cantidades de arena cada año. En 2022, el país importó alrededor de 1,55 millones de toneladas métricas de arena, y está entre los 10 principales importadores de arena del mundo.
La arena del desierto no sirve para construcciones
Aunque el planeta cuenta con enormes desiertos arenosos como el Sahara, gran parte de la arena es inútil para fines industriales. Ya que la arena del desierto no se adhiere lo suficiente como para fabricar hormigón resistente y otros productos.
Dado a la rápida urbanización y digitalización, la demanda mundial de arena está aumentando. Según cifras de la ONU, la extracción de arena se ha multiplicado por más de tres en las dos últimas décadas. Estados Unidos es el mayor exportador, con casi 6.300 millones de toneladas vendidas en 2022. Esto representa alrededor del 31,5% de las exportaciones mundiales.
El aumento de la demanda ha provocado un incremento del dragado ilegal en lugares como India, Vietnam y China, donde las leyes medioambientales y laborales no siempre son tan estrictas. Pero incluso en las minas autorizadas de los principales países exportadores, como Estados Unidos, Malasia, Europa y Canadá, excavar toda esa arena puede dañar la biodiversidad y alterar las corrientes marinas y las capas freáticas. También puede aumentar la erosión, destruyendo las tierras costeras.
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Existen alternativas a la extracción de arena
El vidrio puede reciclarse, molerse en partículas diminutas y utilizarse en la construcción y para rellenar las playas. Las cenizas volantes (diminutos trozos de ceniza, polvo y hollín que se generan al quemar combustible) también pueden utilizarse como aglutinante primario del hormigón, eliminando por completo la necesidad de arena.
La ONU ha recomendado que, cuando la arena sea esencial, "se extraiga y transporte de manera social y ambientalmente racional", y que los ecosistemas degradados se recuperen con "soluciones basadas en la naturaleza".
(mw/jov)
Playas paradisíacas en Europa
Para muchos, el mar y el sol son indispensble para pasar unas vacaciones perfectas. Europa tiene decenas de miles de kilómetros de costa y una gran variedad de playas de ensueño. Les mostramos una pequeña selección.
Imagen: blickwinkel/Imago
Algarve, Portugal
Extrañas formaciones rocosas, playas doradas y bahías de ensueño. El Algarve es la región turística más popular de Portugal. Con más de 3.000 horas de sol al año, es una de las zonas preferidas en Europa para ir de vacaciones en la costa. La playa de Castelo, cerca de Albufeira, es ideal para bucear y hacer esnórquel.
Imagen: imageBROKER/picture alliance
Sicilia, Italia
La isla más grande del Mediterráneo atrae a muchos turistas con pueblos medievales y ruinas antiguas. También es un paraíso por sus kilómetros de playas de arena, a menudo desiertas, que se extienden a lo largo de la costa, enmarcadas por acantilados blancos. Como aquí en Eraclea Minoa. La gente puede zambullirse en el mar hasta finales de otoño, porque África está muy cerca.
Imagen: Charles Bowman/imago images
La costa atlántica, Francia
La ola perfecta para hacer surfing en Hossegor, una playa muy popular entre los amantes de las olas. La pequeña ciudad en la costa atlántica del sur de Francia cuenta con bancos de arena perfectamente rectos y olas de hasta tres metros de altura. Aquí también se llevan a cabo campeonatos internacionales de surf desde la década de 1970.
Imagen: Franck Faugere/dpa/picture-alliance
Creta, Grecia
La isla griega más grande del país atrae con una cultura antigua, y por sus aguas cristalinas y amplias playas, a muchos turistas de todo el mundo. En el extremo suroeste se encuentra la bahía de Elafonissi. La arena de color rosa, así como las conchillas de mar, le dan un toque caribeño a la playa.
Imagen: Zoonar/picture alliance
Hiddensee, Alemania
Esta isla en el Mar Báltico es a la vez un paraíso natural y un destino vacacional. Los coches están prohibidos, con algunas excepciones. No existen grandes edificios de hoteles. Para explorar Hiddensee, con sus santuarios de aves, los turistas usan bicicletas y carruajes tirados por caballos, o simplemente caminan.
Imagen: blickwinkel/imago
Devon, Gran Bretaña
La costa de Devon es conocida como la "Riviera inglesa". La corriente del Golfo asegura un clima agradable. Hay muchos pequeños complejos turísticos, como Woolacombe: la playa de arena de seis kilómetros de largo rara vez, está llena, ni siquiera en verano.
Imagen: Ben Birchall/PA Wire/picture-alliance
Mugla, Turquía
En la playa de Iztuzu, en el Mar Mediterráneo, no solo se ralajan los turistas. Las poco comunes tortugas carey también ponen sus huevos aquí. Por esta razón, la playa está cerrada por la noche. En los alrededores de la localidad de Dalyan se pueden visitar tumbas de roca y reliquias arquitectónicas del período del Imperio Romano.
Imagen: Durmus Genc/AA/picture alliance
Romo, Dinamarca
La isla danesa de Romo tiene la playa más ancha de Europa: hay que caminar hasta seis kilómetros para llegar al agua. Es más conveniente conducir directamente al Mar del Norte en automóvil, lo que está permitido en la isla. A los amantes del deporte de vela y a los jinetes también les gusta usar la ancha pista de arena de la playa.
Imagen: Patrick Pleul//dpa/picture alliance
Montenegro, la costa adriática
Las playas de arena de Montenegro ya no son un secreto para los turistas. Son casi tan conocidas como las de la vecina Croacia. La playa de Jaz, cerca de la ciudad de Budva, merece una excursión de un día por su casco antiguo y su fortaleza.
Imagen: Wolfgang Thieme/dpa/picture alliance
El istmo de Curlandia, Lituania
El istmo de Curlandia se extiende 98 kilómetros a lo largo del Mar Báltico. La duna móvil más grande de Europa se eleva cerca del complejo vacacional de Nidden. "Uno cree que estás en el Sáhara", escribió el escritor Thomas Mann sobre su casa de verano en Nidden hace 80 años.
Imagen: Holger Hollemann/dpa/picture alliance
Ibiza, España
Las isla balear es un lugar muy concurrido para los amantes de la escena europea de la música house y tecno. En Ibiza se puede bailar toda la noche y relajarse de día junto al mar. La playa de Benirrás, por ejemplo, es famosa por sus espectaculares puestas de sol.