Un Papa visita Irak por primera vez. La guerra y el terror expulsaron a la mayoría de los cristianos de allí hace ya mucho tiempo. Los católicos iraquíes en Alemania viven con emoción el viaje del líder católico.
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"Ahora, en la situación creada por la pandemia de coronavirus, es difícil viajar de Alemania a Irak. Pero en realidad todo el mundo quiere seguir la visita del Papa en televisión o en YouTube", dijo Raad Washan Sarah Sharafana, sacerdote de los cristianos católicos iraquíes, en la comunidad caldea en Berlín. Durante semanas, este hombre de 51 años ha estado orando por el próximo viaje del Papa en las misas de los domingos. Es la primera vez que un líder católico visita Irak. Ninguno de los 32 viajes del Papa al extranjero hasta la fecha ha estado acompañado de tantas expectativas como esta visita de cuatro días.
Alen Albezo, de 21 años de edad, es uno de los casi 50 creyentes que acuden a las misas incluso durante la pandemia. Hay más gente joven que en cualquier comunidad católica promedio en Alemania: "A veces es importante ver, sentir y escuchar los orígenes iraquíes", dijo a Deutsche Welle. Habla sobre los recuerdos de su patria, describe la conexión con el arameo, el idioma de Jesús, y el lenguaje litúrgico de los caldeos.
Antes de la prueba de acceso a la universidad
Albezo llegó a Alemania en 2015 cuando cientos de miles huyeron de la guerra y la violencia en Irak y Siria, y vinieron a Europa. Llegó "con la ola de refugiados", afirmó, junto a un hermano y un sobrino. El camino lo llevó desde la llanura de Nínive a Turquía, luego a Grecia, a través de Serbia, Bulgaria y Austria a Erding, cerca de Múnich, y finalmente a través de Hamburgo, a Berlín. En 2017, los padres pudieron recontrarse con sus hijos como parte del plan de reunificación familiar. Ya no viven en un centro de refugiados, sino en su propio apartamento en el burgués barrio de Charlottenburg. En verano, Albezo quiere terminar la escuela y luego comenzar a formarse como asistente dental. En realidad, quiere ser dentista.
Cuando el joven habla de su familia, también lo hace sobre el destino de los cristianos en Irak, en general. Solo una pequeña parte de los dos millones de cristianos iraquíes de diferentes iglesias vive allí hoy. En 2014, el Estado Islámico irrumpió en la llanura de Nínive, donde vivían los Albezo en la ciudad de Bartilla, destruyeron iglesias y asesinaron a cristianos. "Cualquiera que no se hubiera convertido al islam, tenía que pagar una multa. Y eso no se podía financiar. También podría ser asesinado", explicó Albezo. Alrededor del 20 por ciento de su familia todavía vive en algún lugar en diferentes áreas de Irak; el 80 por ciento, "repartidos por todo el mundo", como Estados Unidos, Canadá, Alemania, Suecia y Austria.
Las comunidades crecen
En la actualidad, miles de cristianos católicos iraquíes viven en Alemania. El pastor Sami Danka, de la Comunidad Católica Caldea en Múnich, estima que hay alrededor de 20.000 cristianos caldeos viviendo en Alemania, según aseguró a Deutsche Welle.
Alen Albezo tiene aún familiares en Irak. En otras familias, la conexión con la patria se ha roto. "Toda mi familia ya no vive en Irak", aclaró Athraa Hanna (28), "están en Australia, Estados Unidos y Alemania". Esto encaja con el sombrío panorama de las últimas décadas, en el que el cristianismo de Oriente Medio se caracteriza por la huida y el declive.
El idioma
Hanna llegó a Berlín con su familia cuando era adolescente, en 2006, tras la guerra de Irak en 2003. Hoy es asistente dental. Los domingos va ocasionalmente a una comunidad alemana, y todos los domingos a la caldea. También para ella, el idioma arameo es muy relevante: "Es muy bueno para mí entender el idioma arameo, el idioma antiguo. Hay muchas personas que simplemente no lo hablan, pero lo entienden muy bien. Entonces comprenden mejor nuestra Biblia".
El Papa viaja a Irak y a su extensa tradición, quiere visitar los lugares de sufrimiento, conocer a políticos y también a representantes musulmanes. Athraa Hanna está ya muy emocionada: "Deseamos que haya una coexistencia pacífica en Irak", dijo a Deutsche Welle. "Y solo esperamos que el mundo entero mire a nuestro país. Casi nadie conoce al Irak de hoy", matizó.
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El Papa en vivo
Albezo sabe "cómo se siente ver al Papa o escuchar sus palabras en vivo". En 2016 pudo viajar de Berlín a Polonia para la Jornada Mundial de la Juventud en Cracovia. Él ve a los cristianos en Irak como a una minoría, "abandonada y sola en estos momentos". La visita del Papa supone consuelo y esperanza. Todo lo que sucede en Irak afecta tanto a cristianos como a musulmanes. "Y creo que si el Papa da ese paso, será algo positivo para nosotros", concluyó.
(rmr/ers)
El papa visita las ciudades bíblicas en Irak
Allí nació Abraham y Jonás fue tragado por una ballena, según la Biblia. En su visita a Irak, el papa Francisco pisa un terreno lleno de historia.
Imagen: Liszt Collection/imago images
Expulsados del paraíso
En la prehistoria bíblica, habría existido el paraíso, entre los ríos Éufrates y Tigris, donde vivieron Adán y Eva hasta que Dios los expulsó del Jardín del Edén por haber mordisqueado la fruta prohibida del árbol del conocimiento. Todavía hay oasis opulentos en la orilla del río, pero las condiciones de vida de sus habitantes actuales no son siempre paradisíacas.
Imagen: Victoria Theakston/Robert Hardin/picture alliance
Bautizo en el Tigris
Juan el Bautista bautizó a la gente, también a Jesús de Nazaret, en las aguas del río Jordán para liberarla simbólicamente de sus pecados. Para los mandeos, una de las comunidades religiosas más antiguas del mundo en Irak, fue el último profeta de la tierra. Hasta el día de hoy creen en el poder del agua y se purifican regularmente en el Tigris, como lo hizo en su día el profeta.
Imagen: Ameer Al Mohammedaw/dpa/picture alliance
La patria de Abraham
Hace unos 5.500 años surgieron los primeros pueblos en Mesopotamia. Luego se convirtieron en poderosos imperios. La región mesopotámica entre el Éufrates y el Tigris, el antiguo Jardín del Edén, se encuentra ahora en gran parte en territorio iraquí. En la antigüedad la tierra era muy fértil, hoy es árida y arenosa. Aquí estaban los muros de la ciudad de Ur, donde una vez vivió Abraham.
Imagen: Asaad Niazi/AFP/Getty Images
Tierra sagrada
La fundación de Ur se remonta al 4000 a. de C. Es una de las ciudades más antiguas, cuyos restos han sido descubiertos por arqueólogos. Aquí estuvo la cuna de la civilización. Aquí. Un día Dios habría ordenado a Abraham abandonar la zona e ir a la Tierra Prometida de Canaán. Durante su viaje a Irak, el papa Francisco planea visitar también la tierra de Abraham.
Imagen: Mohammed Aty/REUTERS
Profeta de tres regiones del mundo
Abraham es una de las figuras clave del Antiguo Testamento. Dios lo puso a prueba varias veces e incluso le exigió la máxima lealtad: debía sacrificar a su hijo por él. Abraham no comprendía el sentido de esa orden, pero obedeció. En el último momento, Dios impidió el acto. Dijo a Abraham que circuncidara a su descendencia. Una práctica que mantienen judíos y musulmanes hasta el día de hoy.
Imagen: Asaad Niazi/AFP/Getty Images
Lugares de peregrinación destruidos
Nínive, la capital del Imperio asirio, se hallaba en la orilla este del Tigris. Hoy, los restos de la antigua metrópoli se encuentran en el área urbana de Mosul. La mezquita del profeta Jonás estuvo aquí hasta 2014 antes de que el Estado Islámico la destruyera. Fue una antigua iglesia que luego reconvirtieron los musulmanes. Jonás supuestamente fue enterrado en lo más profundo del edificio.
Imagen: Khalid Mohammed/AP Photo/picture alliance
Jonás y la ballena
El papa también quiere visitar Mosul, porque la tumba de Jonás era un lugar de peregrinaje popular para musulmanes y cristianos. Dios pidió al profeta que anunciara un juicio contra los habitantes pecadores de Nínive. Trató de esconderse y huyó en un barco, pero Dios lo volcó en la tormenta. Jonás solo sobrevivió, porque una ballena se lo tragó y luego lo escupió nuevamente.
Imagen: Dimitar Dilkoff/AFP/Getty Images
Puerta de Ishtar
Así es como pudo haber sido la magnífica Puerta de Ishtar, construida bajo el gobierno de Nabucodonosor II (605-562 a. C.). Hoy en día solo existe esta réplica de la puerta de la ciudad a través de la cual la gente accedía a Babilonia. Pero los habitantes querían ir mucho más lejos, querian construir una torre hasta el cielo para ser iguales a Dios.
Imagen: Hussein Faleh/AFP/Getty Images
Torre de Babel
Dios impidió que se construyera la torre, creando muchos idiomas para que la gente ya no pudiera comunicarse. Según la Biblia, Dios finalmente quiso erradicar por completo la guarida babilónica del pecado y que Babel dejara de ser un asentamiento.
Imagen: Hussein Faleh/AFP/Getty Images
Otro profeta, Ezequiel
El israelita Ezequiel era hijo de un sacerdote y fue llevado por la fuerza a Babilonia bajo el reinado del rey Nabucodonosor II. En el exilio, reprendió al pueblo por idolatría y vaticinó la caída de ciudades y naciones que se habían apartado de Dios. Según la tradición judía, la tumba del profeta Ezequiel se encuentra en la ciudad iraquí de Dhu al Kifl.
Imagen: Ahmad Al-Rubaye/AFP/Getty Images
Lugar sagrado para judíos y musulmanes
Los judíos peregrinan a la tumba del profeta Ezequiel desde el siglo X. 200 años después, los musulmanes también reclamaron el lugar de sepultura del profeta como lugar de peregrinaje. La ubicación estratégica del santuario en la ruta tradicional de las caravanas del Hajj de Irak e Irán atrajo la atención del mundo islámico.
Imagen: Mario Tama/Getty Images
Huyendo del terror islamista
Irak también ha vivido el imperio del terror es en el siglo XXI. Cuando el Estado Islámico (EI) invadió Baghdida, cerca de Mosul, casi todas las familias huyeron al norte. Alrededor del 97 por ciento de la población aquí profesa la fe cristiana; según el EI, a los incrédulos hay que asesinarlos. Solo hay 250.000 cristianos en todo Irak, ni siquiera el uno por ciento de la población.
Imagen: Getty Images/AFP/T. Coex
Oración por los cristianos
La catedral de San José en Ankawa, cerca de Erbil, es la sede del patriarca de la Iglesia católica caldea en Irak, construida sobre terreno histórico. El papa probablemente también pasará por aquí. En todas partes se pueden ver rastros de los combates entre el ejército y el Estado Islámico. El papa Francisco quiere animar a los cristianos, orando.