Este domingo (27.9.2015), el papa Francisco se despidió de Filadelfia, la última etapa de su viaje a Estados Unidos, con una advertencia sobre el “desafío urgente” que plantea la protección del medioambiente, la “casa común”. Decenas de miles de personas llenaron la gran avenida B. Franklin Parkway de esa ciudad para presenciar la misa del pontífice. El Papa ya se había referido en Washington y en Nueva York a la necesidad de contribuir con la protección del planeta mediante un desarrollo sostenible, teniendo en cuenta a los excluidos.

El marco fue esta vez la misa con la que se cerraron los actos del VIII Encuentro Mundial de las Familias, un evento cuyo objetivo es que “las familias se encuentren como iglesia doméstica y santuario de la vida para orar, dialogar y profundizar en temas de actualidad; para conocer y compartir el papel de la familia cristiana con miras a la nueva evangelización”. Fue su primera participación en este evento, instituidos por el papa Juan Pablo II. La misa se celebró en el mismo lugar donde se había realizado la Fiesta de las Familias el día anterior.

Con el acto de Filadelfia acaba la gira del Papa por Estados Unidos, adonde llegó el pasado martes procedente de Cuba y que incluyó históricas intervenciones del pontífice en el Congreso y ante la Asamblea General de Naciones Unidas.

ERC ( EFE / dpa )