Los cristianos deben encontrarse "con dulzura" para "dejar de lado todo lo que nos divide y enemista y buscar nuevas posibilidades para avanzar en el camino de la unidad", dijo el Papa ante miles de personas congregadas en el estadio de fútbol de Malmö, en el sur de Suecia, para conmemorar el Día de Todos los Santos que celebran los católicos.

Francisco recibió una cálida acogida a su llegada al estadio, que no se llenó del todo. Según los organizadores unas 15.000 personas se congregaron para ver al pontífice, ondeando banderas blancas y amarillas o del país y gritando "Viva el Papa".

Gesto histórico

Durante la ceremonia Francisco se refirió en varias ocasiones al diálogo ecuménico, la razón de su viaje con motivo del inicio de las celebraciones del V Centenario de la Reforma protestante, que se cumple en 2017. "Bienaventurados los que trabajan por la unidad de los cristianos", señaló. "Nos necesitamos mutuamente para ayudarnos a conseguir la santidad", añadió.

Ya el lunes el Papa argentino respaldó con un importante gesto su llamamiento a un mayor acercamiento entre católicos y protestantes, al celebrar una misa conjunta con representantes de la Iglesia luterana. La conmemoración conjunta del 500 aniversario de las 95 tesis del teólogo alemán Martín Lutero entre la Iglesia Católica y la Federación Luterana Mundial (FLM), que agrupa a unas 145 Iglesias con tradición luterana, fue vista como un esfuerzo para superar divisiones históricas.

La Iglesia católica en Suecia tiene sólo 113.000 miembros. El 64 por ciento de los 9,9 millones de suecos son luteranos.

ER (dpa, efe)