Los precios de importación en Alemania registraron el pasado mes de abril una subida del 31,7% respecto del mismo mes de 2021, frente al 31,2% del mes de marzo, lo que supone la mayor escalada desde septiembre de 1974, cuando las importaciones germanas se encarecieron un 32,6% durante la primera crisis del petróleo, según ha informado la Oficina Federal de Estadística (Destatis). Los datos actuales reflejan también los efectos de la guerra en Ucrania, señaló la institución, con sede en Wiesbaden.

Los expertos, sin embargo, esperaban una tasa ligeramente superior a la registrada, del 31,8 por ciento de media. Además, en comparación con el mes anterior, los precios de importación en Alemania aumentaron apenas un 1,8%, después del aumento del 5,7% en marzo. Paralelamente, un sondeo del instituto de investigación económica Ifo alerta de que las restricciones y cierres en China por coronavirus están agravando la escasez de materiales en la industria alemana.

El 77,2% de las empresas encuestadas por el Ifo en mayo se quejaron de escasez de material y problemas de abastecimiento, frente al 75% de abril. "El cierre de los puertos en China ha empeorado aún más la situación de muchas empresas", dijo hoy en Múnich el director de encuestas del Ifo, Klaus Wohlrabe. Según el sondeo, la interrupción masiva de las cadenas logísticas retrasará notablemente la recuperación económica.

Los precios de la energía, los que más subieron

En abril de 2022, las importaciones de energía fueron un 157,4% más caras que en abril de 2021. La mayor influencia en la tasa interanual la tuvo el gas natural con un alza del 301,2%, seguido del crudo con un 77,5%. Asimismo, la hulla importada costó en abril un 322% más. De este modo, el índice de precios de importación, excluidos el petróleo y sus derivados, aumentó un 27,6% en abril de 2022 en comparación con abril de 2021 y un 2,3% en comparación con marzo de 2022.

Por otra parte, los precios de las exportaciones alemanas subieron un 16% en abril respecto del mismo mes de 2021, frente al 15,9% de marzo, lo que representa el mayor incremento desde noviembre de 1974, cuando subieron un 16,8% durante la primera crisis del petróleo.

Los precios de las importaciones son uno de los factores que influyen en los precios al consumo. El Banco Central Europeo (BCE) basa su política monetaria en estos últimos. El BCE ya redujo sus compras de valores debido a la elevada inflación actual. La presidenta del BCE, Christine Lagarde, apuntó recientemente hacia una primera subida de los tipos de interés en el verano europeo. 

lgc (dpa/ep)