"La ‘mezcla de nostalgia’ se la grabamos con mi amiga Sonia a nuestro amigo Andy cuando él se iba al servicio militar. Andy me gustaba mucho y yo quería impresionarle." La historia de Nina es uno de los 21 recuerdos del casete mezclado que se presenta hasta el 29 de junio en el Museo de Comunicación en Hamburgo. Por audífonos el visitante puede escuchar las anécdotas alrededor del casete, que era el medio muy requerido por la generación pop de los años 70 y 80. Hace 40 años que la empresa Philips presentó el primer casete en una feria de Berlín.

El mensajero de amor

En la era de alta tecnología, las cajitas de plástico tienen muchos competidores. Desde que en el año 1982 el CD (disco compacto) entró en el mercado, la demanda por casetes ha bajado continuamente. A pesar de eso, el casete mezclado ha logrado defenderse en un nicho: como vehículo para los mensajes de amor sigue ocupando un puesto entre los diez mejores.

Pero no sólo se graban cintas por amor. Crear un casete con canciones de diferentes grupos y cantantes es popular en todas las ocasiones extraordinarias- cumpleaños, viajes, fiestas. Según el folclorista alemán, Thomas Overdick, "es un regalo especial porque se tarda mucho tiempo en hacerlo."

Además, la recopilación dice bastante de la personalidad del grabador: su gusto de música, su sentido para elegir la sucesión de títulos y su juego con los diferentes sentimientos y ambientes de las canciones.

Papel y tijeras

Para completar el mensaje de amor - o amistad – el diseño de la portada del casete mezclado es de gran importancia. Poner una foto, un dibujo o – como género mas popular entre los sobres del casete – componer un montaje. Por ejemplo: cortar la foto de una zanahoria del prospecto del supermercado y ponerla en un trasfondo de plumas verdes del disfraz del carnaval pasado para el sobre de la "recopilación de Pascua". O... pegar una tirita en un papel rojo como portada del "casete de consuelo" para la amiga que cortó con el novio.

Desde luego, la recopilación funciona también con la grabadora de CD o MD (mini disco). Pero los nostálgicos del casete insisten en que éstos no tienen el mismo encanto de la cinta magnética. Curiosamente, en Alemania el casete no sólo revive entre los jóvenes de los años 70 para los cuales los viejos casetes son también un recuerdo de los viejos tiempos. Son los mismos adolescentes del 2003 - que crecieron con los MP3 - que van descubriendo el casete. "Entre ellos, el casete es interesante porque no lo conocen como una cosa corriente. Es como un mito de tiempos pasados, y por eso lo consideran bastante bonito", afirma Overdick.