Su tercera carrera de la temporada y también su tercera victoria. Michael Schumacher y su Ferrari parecen invencibles. Un día de ensueño en un escenario de cuento, por lo menos para la escudería Ferrari que ha logrado dar un gran paso en dirección a la Copa Mundial. Frente a más de 40.000 espectadores "Shumi" logró su 73 victoria, después de haber ganado ya en Austria y en Malasia.

Quedó oliendo a rosas

Tan acostumbrado a las victorias, por lo menos en el Circuito Internacional de Sakhir, en Bahrein, algo fue diferente. El triunfo no se festejo con champaña, sino con un sustituto hecho de granadas y agua de rosas, en respeto de las costumbres del país musulmán.

El segundo lugar lo ocupo su compañero de escudería Rubens Barrichello de Brasil, con lo que lograron el segundo triunfo doble de Ferrari en lo que va del año después de lograrlo en Melbourne. En la tabla general Michael Schumacher se sitúa con 30 puntos, por delante de Barrichello que cuenta sólo 21.

Mercedes pierde brillo

En tercer lugar llegó, lo mismo que dos semanas antes, el británico Jenson Button. Ralf Schumacher por su parte logró a pesar de un choque entrar en séptimo lugar, mientras que Nick Heidefeld entró apenas en 15 posición.

Para McLaren-Mercedes sigue empeorando el año. Kimi Räikkönen tuvo que salir de la carrera pues su bala de palta lo dejó tirado por el camino y tampoco David Coulthard logró llegar a la meta. Y el calor de la pista también hizo sudar a Juan Pablo Montoya, que pocas rondas antes de finalizar vio alejarse un tercer lugar por problemas de motor.

Sin palabras

¿Después de tantas victorias que queda por decir? No mucho, y así lo admite Schumacher: "No se que decir. El equipo hizo un trabajo perfecto". ¿Qué dirá si llega a convertirse por séptima vez líder mundial y eso a su manera, en tiempo récord?