Los votantes de Baviera dieron a su ministro presidente y líder de la Unión Cristianosocial, Edmund Stoiber dos tercios de los votos, 62,1%, lo que significa una victoria histórica para Stoiber, según las proyecciones de la primera cadena de televisión pública, ARD.

Es una victoria sin precedentes, pues es la primera vez que un partido logra superar la barrera de dos tercios de los escaños que le asegura una mayoría suficiente en el Parlamento regional para cambiar la constitución bávara y gobernar prácticamente sin control parlamentario.

Castigo a Schröder

En cambio, el partido socialdemócrata de Gerhard Schröder cayó en las elecciones bávaras aún más de lo que se temía, ya que no alcanzó ni el 20% de los votos, quedándose tan sólo con un 18,7%.

El partido de Los Verdes logró un 7,5% de los votos y los liberales (FDP), apenas si alcanzaron el 2,6%, con lo que el partido se quedó sin representación parlamentaria.

Stoiber, quien hace casi un año perdió las elecciones generales frente al socialdemócrata Gerhard Schröder, hizo campaña diciendo que todo voto por la CSU sería un voto contra el gobierno federal.

En comparación con las elecciones de 1998, la Unión Cristianosocial mejoró sus resultados en un 9,1% y ha cosechado un total de 127 escaños en el Parlamento regional. 120 hubieran sido suficientes para asegurarle una mayoría parlamentaria de dos tercios. La socialdemocracia bávara obtuvo 38 escaños, mientras que Los Verdes tendrán 15.

Stoiber, rey bávaro

La Unión Cristianosocial, que ha gobernado Baviera en solitario durante cuatro décadas ininterrumpidamente, obtuvo hace cinco años un 52,9% de los votos. Entonces el Partido Socialdemócrata obtuvo un 28,7% de los votos, por lo que el caer por debajo de la marca de 20% significa para el candidato Franz Maget, el peor resultado obtenido en Baviera desde la postguerra. Los Verdes, en cambio, mejoraron su posición en un 1,7%. En las elecciones de 1988 el partido obtuvo un 5,7% de los votos.