Están todos ahí. La presidenta del gobierno de Renania del Norte-Westfalia Hannelore Kraft, la alcaldesa de Colonia Henriette Reker, políticos verdes, famosas bandas musicales de la ciudad y cerca de 12 mil manifestantes. Todos se reunieron este sábado (22.04.2017) en el Heumarkt de Colonia con un mismo objetivo.

"Nosotros no elegimos estar acá hoy, pero ahora que estamos debemos usarlo para mandar un mensaje”, dijo la alcaldesa desde el escenario principal. Tras horas de tensión y temor a los potenciales disturbios, ahora parece reinar la calma.

Unos pocos metros detrás, cientos de policías fuertemente armados protegen el ingreso al hotel Maritim, donde el partido Alternativa para Alemania (AfD, por sus siglas en alemán) realiza su congreso partidario. Reker deja claro que los miembros de este partido no son bienvenidos en la ciudad.

"Primero circulan las ideas de la derecha. Después, los cuchillos”, dice, citando a la Nobel Herta Müller. Y añade: "Créanme, sé de lo que estoy hablando”. Aplausos. Todo el mundo sabe que la propia Reker fue víctima en 2015 de un ataque con un cuchillo a manos de una extremista de derecha que casi le cuesta la vida.

12 mil y no 50 mil manifestantes

La ciudad se ha demostrado que se une tras las experiencias brutales. Así fue después del ataque contra la alcalde o con los atentados en la víspera de Año Nuevo. Por eso festeja, aunque esta vez la concurrencia no haya sido la esperada.

Colonia también se demostró que los vecinos pueden manifestarse. Cada sector pudo moverse con sus propios carteles, letreros o banderas sin problemas. Los encargados de la organización se concentraron en el orden, los conductores del evento en el estado de ánimo de la gente.

Hasta las iglesias mostraron su oposición a la derecha: "Nuestra cruz no tiene esvásticas" fue el lema de católicos y protestantes en las protestas contra la AfD. Rabeya Müller, de los musulmanes liberales, agrega: "Tampoco la Media Luna tiene esvásticas".

Nos vemos en Hamburgo

Aquellos que no tuvieron lugar en el Heumarkt, realizaron sus manifestaciones frente a la estación central de Colonia e invitaron a todos a continuar con las marchas en el encuentro del G20 que se realizará en Hamburgo en julio. La presencia policial fue constante y masiva.

Para las 16 horas, las banderas comenzaron a enrollarse, los grupos se fueron disolviendo y muchos emprendieron el camino de regreso a casa. Tras días de tensión, todo sucedió sin sobresaltos.

Al final del día, el comediante colonés Fatih Cevikkollu dio algunos consejos para lo que se viene: "Es lo mismo si es Trump, Erdogan o Höcke: ríanse de los déspotas, que ellos no tienen el don del humor”.