La guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), que esta semana acordó una prórroga del cese el fuego bilateral con el Gobierno colombiano del presidente Gustavo Petro, anunció este viernes (09.02.2024) un "paro armado indefinido" en el departamento del Chocó, una empobrecida zona del noroeste del país a cuya población amenazó con "abstenerse de moverse para evitar incidentes".

"La situación humanitaria en el departamento sigue siendo precaria, la presencia del paramilitarismo arrecia contra la población humilde de este territorio, en complacencia con la fuerza pública que opera en este sector de la región", señala un comunicado del Frente de Guerra Occidental Omar Gómez del ELN, en el que prohíbe la circulación y actividad a lo largo de los ríos San Juan, Sipí, Cajón y Calima.

"Decretamos paro armado indefinido  a partir de las 00:00 del 10 de febrero del año en curso, con el fin de salvaguardar la vida e integridad de la población no combatiente", añadieron los rebeldes, que acusaron una supuesta colusión entre el Ejército y milicias ultraderechistas. El paro armado es una estrategia a la que el ELN recurre con frecuencia, siendo el Chocó una de las regiones donde más la impone a sus pobladores.

Gobernadora critica paro

Tras el anuncio, al gobernadora del Chocó, Carolina Córdoba-Curi, alertó que "el Chocó nuevamente se enfrenta a una violación masiva de derechos humanos". "He denunciado y rechazado este hecho frente al ministro de Defensa (Iván Velásquez) y la cúpula militar y de Policía. Nuestra prioridad debe enfocarse en garantizar la movilidad de las comunidades, el acceso a la salud y la garantía de la seguridad alimentaria", indicó.

La gobernadora añadió: "El confinamiento al que viene siendo sometida la población de más de cinco municipios del río San Juan no puede ser admitida desde ningún punto de vista. Aboca a la intervención de todas las entidades del orden nacional y territorial, así como de los cooperantes internacionales. ¡Se trata de los derechos humanos de la gente!".

El paro armado ocurre en medio de las negociaciones de paz entre el Gobierno y los rebeldes en Cuba, en las que acordaron ampliar hasta agosto un cese al fuego. En armas desde 1964, el Ejército de Liberación Nacional tiene un pie de fuerza de unos 5.800 combatientes y una amplia red de colaboradores, según la inteligencia militar.

DZC (EFE, AFP)