"Es un punto de inflexión", aseguró desde Ginebra la federación de sindicatos UNI Global Union. "La puesta en marcha empieza ahora". Entre los firmantes se encuentra la marca española Zara, al igual que Benetton, H&M, C&A, Tschibo, Primark, Aldi y Abercrombie & Fitch.

El plazo para suscribir el pacto acababa en la medianoche del miércoles, pero la intención es permitir que otras empresas se adhieran más adelante al convenio.

"El objetivo es mejorar las condiciones laborales y la vida de la fuerza laboral más explotada del mundo, que gana 38 dólares al mes bajo condiciones peligrosas", dijo Jyrki Raina, secretario general del sindicato IndustriALL Global Union, que colaboró en la redacción del texto.

En el convenio, las empresas se comprometen a mejorar las precauciones antiincendio y la seguridad de los materiales en los edificios de las fábricas.

En total están incluidos en el acuerdo más de mil talleres e intermediarios y con ello una gran parte de los aproximadamente cuatro millones de trabajadores textiles de Bangladesh, según los sindicatos. La presión de la opinión pública tras el desastre del edificio que se derrumbó acabó de convencer a las principales cadenas europeas de indumentaria.

Críticas a empresas que se marginaron

Sin embargo, compañías estadounidenses como Gap y Walmart –la mayor cadena comercial del mundo- se han negado, señaló Philip Jennings, secretario general de UNI Global Union. Es "un error que los consumidores no deberían pasar por alto", añadió.

Walmart informó que la compañía hará controles propios en las 279 fábricas que producen para la firma en Bangladesh.

La Campaña Ropa Limpia (CCC) criticó que haya habido también empresas alemanas que no firmaron. La representante de la ONG Gisela Burckhardt señaló que la reciente catástrofe muestra que "los controles existentes hasta ahora ocultan los problemas en vez de revelarlos. Exigimos a los que se negaron a firmar que revisen su postura y tomen en cuenta que su actuación pone en riesgo la vida de personas".

er (dpa, epd)