Tras el asesinato de la periodista Miroslava Breach el pasado 23 de marzo, y el cierre, hace unos días, del diario Norte de Ciudad Juárez por el "alto riesgo” que suponía su publicación, el gobierno de México reafirmó "la importancia de redoblar esfuerzos de las instancias federales para garantizar la libertad de prensa y el derecho a la información” en México (DW informó).

Esto no acalla los llamados internacionales a que cesen las agresiones y crímenes contra periodistas y medios críticos en diversos puntos de México. En Guatemala, la Sociedad Interamericana de Prensa pidió a las autoridades mexicanas fortalecer el sistema de protección a periodistas, así como investigar los casos de violencia contra el gremio periodístico mexicano.

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Desde Berlín, el secretario general de la organización Reporteros sin Fronteras en Alemania, Christian Mihr, dijo a DW  que "la escandalosa ola de violencia arroja una nueva luz sobre la catastrófica situación de la seguridad para los periodistas mexicanos. El gobierno mexicano debe de una vez por todas proteger de manera efectiva a medios y periodistas amenazados”.

En cuanto a las medidas a adoptar para este fin, Mihr señaló que "los programas correspondientes deben contar con mejores recursos financieros y humanos, y las autoridades federales deben tener una mayor presencia en la investigación de actos violentos contra periodistas mexicanos”.

El secretario general de Reporteros sin Fronteras en Alemania calificó la situación de violencia contra periodistas en México como un "círculo vicioso de impunidad y violencia”. Para combatirla, "deben ventilarse los nexos entre el crimen organizado, las autoridades y la justicia mexicana. Para realmente mejorar la situación, se necesita finalmente voluntad política”, afirmó Christian Mihr a DW.

Periodismo en Alemania

Representantes de organismos gremiales coinciden en señalar que la situación de los periodistas en Alemania es distinta. "Tenemos algunas limitantes cuando se informa acerca de ciertas personalidades”, dice a DW Eva Werner, de la Asociación Alemana de Periodistas (DJV por sus siglas en alemán). "En Sajonia, dos reporteros fueron llevados a tribunales porque escribieron una historia sobre un alto jurista. Además, cuando se vive en una zona de conflicto, la situación puede tornarse peligrosa para los periodistas alemanes”. Werner recuerda el caso de Deniz Yücel, reportero encarcelado actualmente en Turquía, acusado de espionaje por el gobierno de Recep Tayyip Erdogan.

"Trabajar como periodista en Alemania es relativamente seguro en comparación con México”, considera por su parte Eva Völpel, del sindicato Ver.di. "Sin embargo, recientemente se observan ataques y animosidades hacia reporteros por parte de fuerzas de la derecha política”, dice a DW. "Algunas redacciones no permiten por ello que sus periodistas cubran manifestaciones derechistas sin protección; o bien, se abstienen de informar desde el propio lugar”, agrega.

Combate a la impunidad

 ¿Qué factores hacen posible el ejercicio del periodismo en Alemania en un entorno de relativa seguridad? Tanto Werner como Völpel coinciden en mencionar un primer factor. "La libertad de prensa es un principio consagrado en la Constitución, en el Artículo 5. Ahí también se garantiza que el Estado de ninguna manera debe interferir en el ejercicio de la libertad de prensa”, indica Werner, de la DJV.

Aunado a ello, "es importante un marco jurídico como el de la Ley de Información, que regula las solicitudes de información de periodistas, entre otros”, señala Völpel, quien agrega que "para la libertad del periodismo es indispensable que políticos, autoridades y la sociedad en general respeten y defiendan la libertad de prensa”.

Eva Werner señala además que el mencionado Artículo 5 de la Constitución alemana garantiza la no intervención estatal en el ejercicio de la libertad de prensa. "Esto comienza por la formación profesional de los periodistas, la cual no está reglamentada por el Estado. Son muchos los detalles que hacen del periodismo en Alemania un pilar que goza de autonomía”, dice.

Pero quizá la mayor diferencia radique en el respeto de la ley misma por parte de autoridades y gobiernos. "Un factor muy importante es que en Alemania no impera un clima de impunidad. Experiencias de países como México demuestran que una cultura de la impunidad fomenta violaciones a los derechos humanos, entre ellas, ataques a periodistas”, afirma la representante de Ver.di.