Bajo el título "La frágil base de poder del dictador", el periódico Neue Zürcher Zeitung escribe lo siguiente:  "Con un despliegue naval sin precedentes en el Caribe, el presidente Trump está presionando actualmente al dictador venezolano Nicolás Maduro.

En apariencia se trata de la lucha contra los carteles de drogas y la prevención de envíos de drogas a Estados Unidos, pero hay pocas dudas de que EE. UU. también tiene en la mira a Maduro. Esto es aún más válido porque en Estados Unidos él está personalmente acusado de narcotráfico y allí se lo busca con una recompensa de 50 millones de dólares.

En Venezuela, Maduro se ha mantenido en el poder desde hace diez años mediante una represión brutal. Ha evitado repetidamente que la oposición gane elecciones, excluyendo a candidatos y falsificando los resultados. También ha sobrevivido olas de manifestaciones callejeras de meses y un intento de golpe. Con una campaña estatal de terror, siembra miedo y desconfianza y dificulta la acción colectiva. Por graves violaciones a los derechos humanos, la Corte Penal Internacional investiga al liderazgo venezolano.

Varias veces Maduro pareció estar al borde del fin, pero el Ejército y las demás fuerzas de seguridad siempre respaldaron finalmente su régimen. Si hay una lección de los últimos diez años, es esta: el Ejército es el factor clave para su permanencia en el poder. Si se apartara de Maduro, el régimen probablemente colapsaría rápidamente. (...)."

"Amenaza imperialista”

Por su parte, el medio Welt online, publica un artículo titulado "Tensiones con EE. UU.: Venezuela inicia maniobras militares de gran escala”: "Ante la creciente presencia militar de Estados Unidos en el Caribe, el gobierno de Venezuela ha movilizado, según sus propias declaraciones, a casi 200.000 efectivos para ejercicios en el marco de un plan de acción de las Fuerzas Armadas. En las maniobras de dos días participan, según el ministro de Defensa, Vladimir Padrino, soldados de todas las armas, así como miembros de milicias paramilitares.

El ministro criticó la presencia estadounidense en el Caribe como un ‘uso vulgar contra la soberanía y la paz' no solo de Venezuela, sino de toda la región. En este contexto habló de una ‘amenaza imperialista'. Al mismo tiempo, dijo que el ejercicio también estaba dirigido contra el narcotráfico y ‘grupos terroristas' (...).”

"¿Ya viste la serie del Caribe en la televisión?”

Una nota del diario Zeit online afirma: "Quien habla demasiado abiertamente en Venezuela corre el riesgo de ser denunciado o arrestado. Así que quien quiere hablar de cómo Estados Unidos amenaza últimamente al propio país recurre a una estratagema lingüística. ‘¿Ya viste la serie del Caribe en la televisión?', se dice, y en realidad eso se refiere a las tropas estadounidenses en los buques de guerra frente a la costa venezolana.

Otros hablan del deporte nacional venezolano, el béisbol. ‘Quieren noquear a Venezuela', se escucha entonces, cuenta una venezolana en la capital, Caracas, a Zeit Online. Cuando alguien habla de cómo el equipo de Venezuela podría ser superado por otro, en realidad se está refiriendo a un posible ataque militar estadounidense contra Venezuela”. (...).

"El presidente estadounidense Donald Trump ha autorizado a la CIA a realizar operaciones encubiertas. Desde septiembre, las fuerzas estadounidenses han matado a más de 70 personas en embarcaciones; el gobierno de Trump afirma que se trata de narcotraficantes. Pero faltan pruebas de ello.

Estados Unidos aparentemente se prepara para una intervención directa en Venezuela. Ha ofrecido una recompensa de 50 millones de dólares por el gobernante Nicolás Maduro. A la pregunta de si los días de Maduro estaban contados, Trump dijo recientemente: ‘Creo que sí, sí'. El presidente estadounidense podría ordenar un ataque para matar a Maduro, derrocarlo o forzarlo a huir.

¿Qué pasaría si Estados Unidos realmente ataca? ¿Se convertirá el Caribe en una zona de guerra? ¿Titubearía Maduro bajo la presión, o su régimen resistiría? Zeit Online ha hablado con personas que viven en Venezuela. Sus nombres fueron cambiados para protegerlos de represalias. Algunos temen caos por una invasión estadounidense. Otros dicen que solo así podría liberarse Venezuela de Maduro. (...).”

(md/cp)