Los une la pasión por el fútbol, todos son latinoamericanos y se conocieron gracias a la Universidad de Leipzig. Los 25 participantes del taller Alumni-Camp que se realizó en mayo pasado en Costa Rica son ex-alumnos de los prestigiosos cursos internacionales de entrenadores ITK de este centro alemán de estudios que prepara a educadores y técnicos de todo el mundo.

ITK es un programa intensivo de un semestre de duración en el idioma de los participantes: español, francés, inglés o árabe. Dicho programa universitario imparte conocimientos teóricos y prácticos en 15 disciplinas deportivas, que van desde el fútbol al judo y de la natación al deporte para discapacitados. Todo, en las instalaciones de la Facultad de Deportes de la Universidad de Leipzig.

Pero en esta ocasión, por primera vez, la cita no fue en Alemania, sino en Latinoamérica. ITK reunió a un grupo de ex-alumnos de los cursos de fútbol en un seminario de capacitación de casi dos semanas de duración, donde ampliaron conocimientos e intercambiaron experiencias. “La idea es promover el aprendizaje permanente. Empezamos por Latinoamérica y queremos seguir con otras regiones”, indica Daniel Eckert-Lindhammer, gerente administrativo del ITK.

Efecto multiplicador en Latinoamérica

Bajo el lema “train the trainer” o “entrenar al entrenador”, el curso fue financiado por el Servicio Alemán de Intercambio Académico, DAAD y contó con el apoyo del Ministerio del Deporte de Costa Rica.

Una de las participantes invitadas fue la uruguaya María Inés Rüsch Cordano, quien fue alumna del curso de entrenamiento de fútbol femenino ITK el 2011 y actualmente trabaja como co-entrenadora del equipo Lokomotive Leipzig. La calidad de los cursos de la Facultad de Deporte de Leipzig y la fuerza de la liga de fútbol femenino alemana fueron las razones que la impulsaron a perfeccionarse en este país.

El Alumni-Camp en Costa Rica fue la oportunidad para continuar su formación y reecontrarse con antiguos compañeros. “Hacer este taller en Costa Rica es una multiplicación de la intención de ITK, de intercambiar experiencias y llevar lo que se aprende en Leipzig a cada uno de nuestros países”, indica María Inés, quien regresa a Uruguay en julio con la intención de aportar al fútbol femenino local.

Trabajando con los futbolistas del futuro

El trabajo de ITK en Latinoamérica representa también un aporte para el país anfitrión, donde el deporte ofrece nuevas oportunidades de desarrollo, fomenta una vida saludable y abre nuevas perspectivas. En Costa Rica se realizaron torneos de fútbol con niños y pobladores de familias de escasos recursos de la Provincia de Limón. “Es una región donde crecen muy buenos deportistas, cuenta Daniel Eckert-Lindhammer. Por lo mismo, pensaron hacer este proyecto en terreno, con especial énfasis en el trabajo con niños y adolescentes, en un lugar donde este tipo de iniciativas habitualmente no llega .

Un equipo de profesores, organizadores y traductores de ITK Leipzig, junto con los 25 participantes de 10 países latinoamericanos, pudieron hacer un trabajo colaborativo y de integración. “Es fundamental hacer proyectos así y no quedarse encerrados en el hotel, sino que debemos conocer, compartir con la gente y aprender del país”, agrega Eckert-Lindhammer.

El próximo año esperan contar nuevamente con el apoyo del DAAD para repetir este curso de perfeccionamiento en un país africano. Pero antes, como parte de las actividades del Año de Alemania que se celebra en Brasil, estarán en esta nación sudamericana entre octubre y noviembre. Ahí reunirán a ex-alumnos brasileros de ITK para trabajar sobre gestión deportiva: una formación específica clave que incluye conocimientos y habilidades para la planificación, ejecución y control de actividades deportivas, también con miras a los trascendentales eventos que se avecinan en este país.

Autora: Victoria Dannemann

Editor: José Ospina-Valencia