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¿Ya está todo dicho con respecto al brexit?

Friedel Taube (RMR/ER)27 de junio de 2016

Británicos buscan frenéticamente “brexit“ en Google, entiéndase, después del referéndum. Miles de irlandeses del norte quieren un pasaporte irlandés. Millones firman una petición antibrexit. ¿Es el brexit reversible?

Imagen: Getty Images/J. Taylor

Una cosa está clara: tras la decisión de abandonar la UE, la resaca en la isla es grande. Pero, ¿hasta qué punto es el brexit un tema zanjado? ¿Podría Gran Bretaña quizá quedarse en la UE? Estas son las vías posibles.

1. El Parlamento evita el brexit

El referéndum tiene carácter consultivo, pero no vinculante. El Parlamento británico no está obligado a materializar el deseo del pueblo. El artículo 50 del Tratado de Lisboa no debe necesariamente entrar en vigor. La notificación oficial a Bruselas de la voluntad de abandonar la UE no tiene por qué enviarse. Diputados, como el londinense David Lammy, del Partido Laborista, luchan para que el Parlamento decida independientemente del referéndum. “No tenemos por qué hacerlo, paremos esta locura”. Así se expresó Lammy en las redes sociales. Los diputados deben decidir de forma autónoma, teniendo en cuenta que muchos de los que votaron “leave” (salir) han cambiado de opinión desde el jueves, según Lammy.

“Los parlamentarios británicos son representantes del pueblo, no delegados“, dice Jo Murkens de la London School of Economics and Political Science. “Su tarea no es simplemente llevar a cabo los deseos del pueblo, sino sopesarlos políticamente, y luego decidir teniendo en cuenta lo que les dicte su conciencia.

La permanencia de los británicos en la UE sería a pesar de todo una variante imposible, dijo James Knightley, experto en economía del banco internacional ING-Bank. “Los políticos que ignoran el deseo del pueblo no están trabajando precisamente para ser elegidos de nuevo.”

2. Escocia o Irlanda del Norte evitan el brexit

Escocia e Irlanda del Norte votaron claramente por la permanencia en la UE. “La mayoría dice que el resultado del referéndum fue del 52 % contra el 48%”, señala Jo Murkens. "Pero hay también otra lectura del referéndum: 2:2, empate. Dos de las cuatro naciones quieren quedarse. Excluir a los escoceses y a los irlandeses del norte no sería conforme a la Constitución y pondría en peligro la unidad el reino”.

Jo Murkens, catedrático en la London School of Economics.Imagen: London School of Economics/G. Jordan

Mientras que los escoceses tantean todas las posibilidades existentes para permanecer en la UE a través de una ruptura con el reino, en la isla verde, hay cada vez más voces que están a favor de la unión entre las dos Irlandas.

La primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, propone el veto. Opina que el Parlamento regional escocés constituido en 1999 en Edimburgo puede negar el consentimiento al brexit. El hecho de que el Parlamento posea tal poder es un tema controvertido entre expertos constitucionales.

3. Otro referéndum evita el brexit

Votar hasta que los resultados cuadren es en teoría posible, también en Gran Bretaña. Más de 3,6 millones de británicos han firmado una petición que demanda evitar el brexit. Los firmantes: mucha gente joven, muchos extranjeros británicos, pero sobre todo muchos londinenses. Votantes que ya votaron por la permanencia, pero no solo ellos. Las estadísticas del buscador Google arrojan los siguientes datos: la cantidad de búsquedas de frases como “qué significa la adhesión a la UE” y “qué es la UE” tras el referéndum fue espectacular y puede significar que alguno que otro se arrepienta de haber votado contra Europa.

James Knightley, economista del banco ING.Imagen: R. Braine

Ya hay cosas que han cambiado. Por ejemplo, Nigel Farage, del partido UKIP, tuvo que dar marcha atrás y admitir que la cifra de 350 millones de libras que supuestamente Londres transfiere a Bruselas, no es del todo cierta, ya que también fluye mucho dinero hacia el país a través de subvenciones. Tampoco se veía tan claro que el brexit pondría en peligro la cohesión del reino. “El lema central para los partidarios del brexit fue: Queremos nuestro país de vuelta”, dice Murkens. "Ahora parece que el país que ellos querían, no existirá más así.”

4. La UE evita el brexit

Mientras exista el artículo 50, también es posible lo siguiente: que Bruselas quiera retener a los británicos en la UE, cueste lo que cueste, y complazca de tal manera a los isleños que incluso los defensores más acérrimos del “leave” del partido “tory” cambiaran de opinión. James Knightley cree que eso es bastante improbable: “En el referéndum se trató sobre todo de inmigración. Es decir, la UE tendría que llegar a un compromiso con respecto a este tema con los británicos. Sin embargo, la libre circulación de personas y de servicios es una de las funciones clave de la UE. No habrá por lo tanto concesiones”, dijo Knightley.

Además, muchos comentarios desde Bruselas desde el referéndum muestran que ahora la UE, viendo el resultado, se propone tramitar la salida tan rápidamente como sea posible, ya que las idas y venidas definitivamente entumecerían la Unión Europea.

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