La mayoría de las ciudades han sido diseñadas por y para hombres”, sostiene un estudio del Banco Mundial. “Es necesario cambiar las formas de pensar las ciudades que omiten a las mujeres”, afirma la arquitecta Ana Falú.
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¿Existe una arquitectura feminista? ¿Hay ciudades pensadas para las mujeres? ¿Otras para los hombres? ¿En qué se diferencian?
Buscamos -y encontramos- respuestas a estos interrogantes.
"Las mujeres ocupan solo el 10 % de los puestos más importantes en los principales estudios de arquitectura del mundo”, consigna el "Manual para la planificación y el diseño urbano con perspectiva de género”, editado este año por el organismo internacional.
Y agrega: "Las ciudades se han planificado y diseñado, históricamente, para reflejar los roles de género tradicionales y la división del trabajo en función del género. Por consiguiente, las ciudades funcionan mejor para los hombres que para las mujeres”, concluye el estudio.
Desigualdad en la infraestructura pública
Y aquí algunos ejemplos en los que se nota esta desigualdad: en los parques sin luz, en la falta de baños públicos para mujeres, en las calles en mal estado -difíciles de transitar con un cochecito de bebé-, y en las largas estadías en una parada de tranporte público.
Además: "El transporte está pensado en clave masculina, en la necesidad de trasladar hombres que producen y trabajan. No está pensado en los recorridos múltiples que hacen las mujeres en razón de sus responsabilidades sobre la vida cotidiana y el cuidado de las personas”, sostiene, en el mismo sentido, la arquitecta Ana Falú, ex directora de UNIFEM (hoy ONU Mujeres) y actual asesora de ONU-Hábitat en temas de género.
"Las mujeres siguen siendo la mayoría en asumir la responsabilidad sobre la infancia, los/as adultos mayores, el abastecimiento, la higiene, el sostén de la educación, el trabajo comunitario y las gestiones. Y todo ello implica múltiples recorridos, distintos a los trayectos de los varones”, explica la experta argentina en diálogo con DW.
"Andar por nuestras calles y espacios públicos con cuerpos y vidas de mujeres es muy distinto que ser un varón. No solo en las ciudades y en los barrios, también en el interior de las viviendas”, resume Falú, también directora de CISCSA-Ciudades feministas, y una de las expertas más reconocidas del continente en la temática.
Neutralidad solo aparente
¿Por qué esto es así? Pues porque tras decisiones aparentemente neutrales, se cobija una mirada androcéntrica de la realidad, es decir, una visión masculina del mundo.
"El espacio público ha sido, sobre todo desde la revolución industrial, diseñado de forma tal de responder a una sociedad dominada por la concepción patriarcal”, indica al respecto la arquitecta y urbanista Elvira Rosa Fernández.
"La estructura física responde en primer lugar a las necesidades del trabajo y la producción y a la interconexión funcional. La sociedad industrial concibe la ciudad como sistema de flujos”, agrega la experta consultada por DW.
En este marco: "Las mujeres habitamos territorios ajenos y violentos, con servicios básicos mercantilizados, pensados para la producción y la rentabilidad”, sostiene la arquitecta Marisol Dalmazzo Peillard, cofundadora de la "Red Mujer y Hábitat de América Latina y Caribe”, desde la que impulsan "ciudades incluyentes, seguras y sostenibles para las mujeres”.
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Hacia un urbanismo feminista
Así las cosas: ¿cómo serían las ciudades feministas?
"El urbanismo feminista ubica a las necesidades cotidianas en el centro, haciendo especial hincapié en las de las mujeres, e incorpora la idea del derecho de las mujeres a la ciudad”, y propone "reconocer desigualdades y discriminaciones”, así como "impulsar cambios”, consigna la arquitecta de la Universidad Nacional de Colombia Dalmazzo Peillard.
"Una ciudad feminista no solo priorizaría el cuidado, sino que lo integraría a la planificación, y lo haría de manera colectiva: lo colectivo por sobre lo individual”, puntualiza Falú.
Y recomienda: "Menos lugar para los autos y la polución de carbono, y más espacio de reuniones, de encuentro, para las distintas edades y en variadas ofertas”.
¿Cómo lograrlo? "Es necesario sensibilizar a quienes deciden. Y cambiar las formas de ver y pensar las ciudades que omiten a las mujeres. Romper con el autoritarismo de las decisiones, y que sean las mujeres organizadas las que definan sus prioridades”, propone Falú.
(cp)
Feministas históricas: la lucha por los derechos de la mujer
Los derechos de la mujer, su sexualidad, la comprensión de su papel en la sociedad. Por todo ello luchan las feministas desde hace muchos siglos, desde Olympe de Gouges o Simone de Beauvoir hasta Alice Schwarzer.
Imagen: picture-alliance/ZB/T. Schulze
Alice Schwarzer (*1942)
Es una de las más conocidas luchadoras por los derechos de la mujer en Alemania. Desde 1977 edita la revista feminista EMMA. Antes había publicado "La pequeña diferencia y sus grandes consecuencias", libro en el que habló en favor de la libre sexualidad sin relaciones de poder. La obra se convirtió en un bestseller mundial. Schwarzer tuvo muchas antecesoras.
Imagen: picture-alliance/ZB/T. Schulze
Olympe de Gouges (1748 - 1793)
Participante en la Revolución Francesa, fue una de las precursoras de la lucha por la igualdad. Olympe de Gouges escribió en 1791 la "Declaración de los derechos de la mujer y la ciudadana", en respuesta a la "Declaración de los derechos humanos y civiles", de 1789, que no contempló a las mujeres. La feminista escribió: "La mujer nació libre y es igual al hombre en todos sus derechos."
Imagen: picture-alliance/akg-images
Sojourner Truth (1797 - 1883)
Fue la primera activista afroamericana que vinculó los derechos de la mujer con la lucha contra la esclavitud. La estadounidense se pronunció abiertamente por la abolición de la esclavitud y la introducción del voto femenino. Con su discurso en una convención sobre los derechos de la mujer, en 1851 en Ohio, Truth escribió historia.
Imagen: picture-alliance/Everett Collection
Louise Otto-Peters (1819 - 1895)
Es considerada la fundadora del feminismo en Alemania. En 1843, Otto-Peters se hizo famosa por el siguiente pronunciamiento: "La participación de la mujer en asuntos del Estado no es un derecho, sino una obligación." En 1865 colaboró en la fundación de la Asociación General Femenina de Alemania, la primera de su tipo en la sociedad alemana.
Imagen: picture-alliance/dpa
Hedwig Dohm (1831 - 1919)
En 1874 escribió "La emancipación científica de las mujeres". Con sus demandas de acceso irrestricto a las universidades y al voto, Hedwig Dohm fue una de las precursoras más radicales del feminismo en Alemania. Con su frase "los derechos humanos no tienen género" exigió la igualdad fundamental.
Imagen: picture-alliance/akg-images
Emily Davison (1872 - 1913)
La británica Emily Davison fue detenida en ocho ocasiones. En su calidad de activista, defendió los derechos de la mujer incluso a través de violentas protestas. Davison murió en 1903 como mártir: buscando atención para su movimiento, fue arrollada durante una carrera de caballos en 1913.
Una piedra fundamental de la literatura feminista es su libro "El otro sexo". Sobre todo, se volvió célebre su frase: "Una no nace como mujer. Se hace." Así, Simone de Beauvoir fue la primera en enarbolar la tesis de que la feminidad no es determinada por la biología, sino que es una cuestión social. Sin duda, se adelantó a su tiempo.
Imagen: picture-alliance/dpa
Betty Friedan (1921 - 2006)
Betty Friedan criticó en su obra "La mística femenina" la reduccion de la mujer a su rol de madre y ama de casa. Con la publicación en 1963 de dicho libro, se convirtió en una de las activistas más importantes por los derechos de la mujer en Estados Unidos. En 1966 fundó con otras mujeres la "National Organization for Women" y luchó toda su vida por la igualdad entre hombres y mujeres.
Imagen: picture alliance/dpa/AP Photo
Judith Butler (*1956)
La deconstrucción del género determinado por la biología es el tema central de la obra "Gender trouble". Su tesis: no solo el género social, sino también el biológico, son construidos por la sociedad. La identidad sexual es una escenificación, dice la filósofa estadounidense, pionera de la teoría feminista desde los años noventa.
Imagen: European Graduate School
Mozn Hassan (*1979)
Desde 2007, la egipcia Mozn Hassan lucha por los derechos de la mujer junto con su organización "Nazra para estudios femeninos". La ONG jugó un papel fundamental para que fueran investigados los abusos sexuales contra mujeres ocurridos durante la llamada "Primavera árabe". En 2016, la activista fue distinguida con el premio Right Livelihood Award, una especie de Nobel alternativo.
Imagen: Right Livelihood Award/M. Mohie
Laurie Penny (*1986)
Se le considera una de las feministas más importantes de nuestro tiempo. La británica critica en sus obras "Meat market" y "Unspeakable things" el control sobre el cuerpo femenino, las expectativas del amor romántico y la represión sexual de la mujer. Penny trabaja como periodista para medios como The Guardian.
Imagen: picture-alliance/Photoshot
Margarete Stokowski (*1986)
Se le conoce como "la Laurie Penny alemana". Su obra "Unternum frei" trata acerca de los mecanismos de represión sexual, los roles sociales y la cuestión de cómo la libertad cotidiana se transforma en libertad absoluta. Es columnista del semanario Der Spiegel.