Escándalo global
22 de abril de 2010La Securities and Exchange Commission (SEC), la institución con sede en Washington cuya misión principal es garantizar que se cumplan las leyes federales en la industria de los valores y los mercados financieros estadounidenses, ha entablado una demanda en contra del Grupo Goldman Sachs, el banco de inversiones más poderoso del mundo, acusándolo de fraude por no informar a sus inversionistas que su gerente de fondos de cobertura, John Paulson, había apostado en contra de un producto de deuda hipotecaria de alto riesgo de Goldman Sachs en cuya concepción él mismo participó.
La demanda en cuestión ha levantado polvo también en Europa: Goldman Sachs no solamente está siendo investigado por la comisión de valores de Estados Unidos, sino también por la instancia supervisora del mercado británico. Los reguladores franceses Francia están considerando iniciar sus propias pesquisas y, en Alemania, el banco estatal Bayern LB anunció la cancelación de sus relaciones comerciales con el banco de Wall Street para proteger su imagen de cara a la opinión pública.
Escándalo globalizado
Después de todo, otra entidad financiera alemana, el IKB Deutsche Industriebank, tuvo que ser rescatada por el Estado alemán en 2007 tras haber perdido enormes cantidades de dinero invertidas en riesgosos papeles proveídos por Goldman Sachs. El IKB, que figuraba entre los inversionistas principales del acuerdo que ahora es blanco de las demandas de la SEC, también está preparando el camino para entablar una demanda en contra del banco de inversiones estadounidense.
Tanto el presidente ejecutivo de Goldman Sachs, Lloyd Blankfein, como el gerente Fabrice Tourre –responsable de la operación que hizo estallar este escándalo y, por eso, el único banquero de Goldman en ser demandado directamente por la SEC– deberán comparecer ante una comisión del Senado estadounidense este 27 de abril.
La paja en el ojo ajeno…
Mientras Goldman Sachs niega la veracidad de las imputaciones y defiende la inocencia de Tourre, una encuesta realizada entre ejecutivos corporativos por el Argyle Executive Forum, una empresa que organiza conferencias para los profesionales del ámbito de las inversiones, revela que el 55 por ciento de los consultados creía que Goldman había incurrido en manejos fraudulentos. Pero, viniendo de otros miembros de la industria de los valores, ¿no es este veredicto un gesto de hipocresía?
En su edición del 22 de abril, el diario suizo Neue Zürcher Zeitung sostiene que las prácticas descritas como engañosas en la demanda de la SEC contra Goldman Sachs son de uso generalizado y frecuente en el mundo de los mercados financieros, y a nadie en ese contexto se le ocurriría tildarlas de fraudulentas. Un comentarista de la versión online de la revista alemana Der Spiegel sugiere que la clase política germana debería ser la primera en admitir ese estado de cosas, sobre todo considerando las incidencias que llevaron al IKB Deutsche Industriebank a la crisis.
¿Y qué hay del Deutsche Bank?
Según Der Spiegel, la histriónica indignación de los políticos alemanes frente al episodio que involucra a Goldman Sachs en la caída del IKB no sería criticable si el Deutsche Bank –el banco más importante de Alemania– no hubiera vendido papeles riesgosos al IKB también. Peor aún, explica la publicación, el banco apostó en contra de esos papeles y aceleró la caída del IKB cuando Josef Ackermann, jefe del Deutsche Bank, llamó a la Autoridad Federal de Supervisión Financiera (BaFin son sus siglas en alemán), Jochen Sanio, para informarle que el Deutsche Bank bloquearía los créditos al IKB; una medida de la cual el IKB no se habría podido recuperar si no hubiera recibido auxilios financieros del Estado.
Las acciones de Goldman Sachs cerraron este 21 de abril con una caída del 0,7 por ciento, acentuando la caída de la última semana que fue del 14 por ciento. En Estados Unidos, los abogados de los accionistas están analizando la situación para ver si consiguen levantar un caso con miras a ganar en una querella legal contra el banco de inversiones. Y en Alemania, está por verse qué secuelas trae este escándalo para los mercados financieros locales.
Autor: erc / Reuters / dpa / AFP / Bloomberg
Editor: José Ospina Valencia